José Antonio Fernández, un adicto al consumo del ctack estuvo a punto de matar a varios bebés que están en la sala neonatal del hospital regional de Luque. Ocurrió la noche de este lunes.

El reporte policial refiere que el hombre comenzó´a robar cables para reducir su cobre, hasta que en un momento detectó la maquinaria de provisión de oxígeno conectada a la sala neonatal, en donde están internados varios recién nacidos conectados a respiradores.

El marginal se disponía a cortar los caños de cobre para llevarselos como botín, con lo que si lograba ese objetivo, los pequeños iban a sufrir el corte de oxigeno.

Personal de blanco  detectaron  el intento de robo, y así enfermeros, médicos y familiares e pacientes casi lincharon al delincuente, a quien entregaron luego a la policía.

El episodio puso de nuevo al tapete los episodios criminales en el que los conocidos como “chespis” están en el centro del debate. Y esto porque los caos revelan que el adicto al crack, principalmente, realizan acciones demenciales, totalmente carente de todo razonamiento, como lo fue en este nuevo suceso.

En ese sentido, se menciona los tres últimos casos de asaltos callejeros, en donde marginales consumidores de crack, atacar de forma brutal a sus víctimas, llevandose bagatelas como botín.