Vacuna anti-Covid-19 en niños: refutando algunos mitos

En Paraguay, se ha habilitado la vacunación en niños contra COVID-19 (de 12 años y más), lo que ha generado rechazo en algunas personas. Infelizmente, este rechazo se ve respaldado por personas, incluso profesionales de salud, poco informados o con una alfabetización científica nula, quienes emiten sus opiniones sin fundamento científico.

Por Fabiola Román Maldonado, PhD en Biología

Está claro que varios padres sentirán temor y más aún cuando un profesional de salud exclama su rechazo a la vacunación en niños y adolescentes. Sin embargo, es muy fácil demostrar la realidad, a partir de las informaciones emitidas por organismos internacionales, los cuales están compuestos por especialistas en diversas áreas, y de todo el mundo.

A seguir analizamos algunas de las afirmaciones erradas que hemos podido escuchar en los últimos días.

La OMS no recomienda la vacunación en niños

FALSO. La OMS ha dicho que son prioridad para la vacunación los niños y adolescentes (de 12 años y más) que se encuentran en alto riesgo. También ha manifestado que, como los niños y adolescentes tienden a tener una enfermedad más leve en comparación a los adultos, es menos urgente vacunarlos a ellos que las personas mayores (que tienen mayor riesgo de enfermedad grave) y los trabajadores de la salud. En ningún momento ha dicho que desaconseja la aplicación de la vacuna anti-Covid-19 en niños y adolescentes.

La afirmación hecha por algunas personas solo muestra claramente la falta de entendimiento sobre lo que la OMS ha escrito.

Países desarrollados han dicho que no a la vacunación pediátrica anti-Covid-19.

FALSO. Países desarrollados como Reino Unido, Dinamarca, Suecia, Noruega, Francia, Estados Unidos, Canadá, están administrando la vacuna anti-Covid-19 a los adolescentes mayores de 12 años. Alemania, ha sugerido aplicar solamente a los adolescentes con enfermedades de base, los cuales presentan mayor riesgo ante la enfermedad. En Uruguay, el 71.8% de los adolescentes, de entre 12 a 14 años, ha recibido ambas dosis de la vacuna anti-Covid-19. Eso representa aproximadamente 102.000 niños que han recibido la vacuna.

El Grupo Asesor Estratégico de Expertos de la OMS (SAGE), ha llegado a la conclusión, en base a los estudios clínicos, de que la vacuna Pfizer / BionTech es adecuada para su uso por personas de 12 años o más.

Cabe destacar que el CDC incluso ya ha aprobado la vacuna de Pfizer en niños de 5 a 11 años. La vacunación en chicos de 12 a 15 años, ya esa ampliamente aceptada en países desarrollados y no han hecho ninguna pausa de la vacunación.

Paraguay esta dando el puntapié inicial para la vacunación en adolescentes.

FALSO. Paraguay no es el primer país del mundo en aplicar las vacunas a los adolescentes. Como vimos arriba, varios países ya están vacunando a los mayores de 12 años y ahora revisan los datos para aplicar a niños de 5 a 11 años. Paraguay no es pionero en vacunación, sino que sigue las recomendaciones que las agencias reguladoras internacionales van dando.

La vacuna de Pfizer es una terapia génica

FALSO. La vacuna de Pfizer no es una terapia génica porque no altera nuestro ADN. Es más, ni siquiera llega cerca de nuestro ADN, el cual se encuentra guardado en la célula en el núcleo, que a su vez esta rodeado de una capa protectora llamada membrana nuclear. Por su parte, el ARNm se degrada muy rápido dentro de nuestras células, una vez que cumplió su función.

La terapia genética, por otro lado, implica un proceso mediante el cual la composición genética de un individuo se modifica deliberadamente para curar o tratar una condición genética específica. Las vacunas no sirven para tratar o curar una enfermedad, sirven para protegernos de antemano.

El hecho de que Pfizer sea la vacuna utilizada para inmunizar niños y adolescentes, es debido a que la compañía ha presentado datos de estudios clínicos que muestran la seguridad y eficacia de la vacuna en personas de ese rango de edad. Es probable que otras vacunas también sean efectivas o más efectivas, pero primero deben presentar sus datos de estudios clínicos realizados en adolescentes y niños, y los expertos los deben evaluar. Antes de eso, no pueden ser administrados al público.

Como bien lo puso la editorial de una de las revistas prestigiosas en ciencia (Science), es comprensible que algunos padres se muestren reacios a vacunar a sus hijos, especialmente si éstos son pequeños. Sin embargo, la elección de no vacunarse no es una elección libre de riesgos; más bien, se elige tomar un riesgo diferente y más serio. La comunidad biomédica debe esforzarse por dejar esto claro al público. Podría ser una de las decisiones de salud más importantes que tomarán los padres.

Verse a uno mismo durante videollamadas causa cansancio mental, según estudio

La sensación de agotamiento afecta tanto a hombres como a mujeres de manera similar, lo que contradice los resultados de investigaciones previas.

Verse a uno mismo en la pantalla durante videollamadas en plataformas como Zoom o Teams causa cansancio mental, según en un estudio publicado recientemente en la revista científica Cyberpsychology, Behavior, and Social Networking.

Los investigadores de la Universidad de Galway (Irlanda) evaluaron la actividad cerebral de 32 personas (16 hombres y 16 mujeres) mediante electroencefalogramas mientras estaban en una videollamada en Zoom, y en distintos momentos de la comunicación se mostraban o se ocultaban en su propia pantalla.

Los resultados revelaron que los niveles de cansancio fueron mayores cuando los participantes podían verse a sí mismos, y esto afectaba tanto a hombres como a mujeres de manera similar. Esta conclusión contradice las deducciones de investigaciones previas que afirman que las mujeres experimentan más cansancio que los hombres dado que tendrían “la mayor conciencia de sí mismas generada al verse en una pantalla”, señala el estudio.

“Nuestro estudio demuestra que la sensación de cansancio que surge durante las videollamadas es real y el hecho de ver nuestro propio reflejo lo hace aún más agotador”, indicó Eoin Whelan, quien dirigió la investigación. “Desactivar la imagen en espejo puede ayudar a compensar la sensación de cansancio en las reuniones virtuales”, agregó.

Demasiada comida chatarra podría causar daños duraderos al cerebro

Investigadores consideran que esto puede deberse a que las dietas occidentales alteran un neurotransmisor cerebral clave implicado en la retentiva y otras funciones.

Neurocientíficos de la Universidad del Sur de California (USC) en EE.UU. descubrieron que la ingesta abundante de una dieta occidental, alta en grasas y azúcar, desde la temprana edad, puede provocar problemas duraderos de memoria en animales de laboratorio.

“Lo que vemos […] es que, si estas ratas crecieron con esta dieta de comida chatarra, entonces tienen problemas de memoria que no desaparecen”, explica Scott Kanoski, profesor de la USC. “Si simplemente los sometes a una dieta saludable, estos efectos lamentablemente duran hasta la edad adulta”, agregó.

La concepción de la investigación

Al desarrollar el estudio, Kanoski y su estudiante de postdoctorado, Anna Hayes, tuvieron en cuenta el antecedente de que las personas que padecen la enfermedad de Alzheimer tienden a tener niveles más bajos de acetilcolina en el cerebro. Los investigadores consideran que esto puede deberse a que las dietas occidentales alteran la acetilcolina, un neurotransmisor cerebral clave implicado en la retentiva y funciones como el aprendizaje, la atención, la excitación y el movimiento muscular involuntario.

Los científicos se cuestionaron sobre el impacto que podrían tener estas dietas occidentales para las personas más jóvenes que pueden seguir una dieta similar, particularmente durante la adolescencia, cuando su cerebro está experimentando un desarrollo significativo.

Los experimentos

Los investigadores rastrearon los niveles de acetilcolina de un grupo de ratas con una dieta grasosa y azucarada y en un grupo de control de ratas analizando sus respuestas cerebrales a ciertas tareas diseñadas para probar su memoria.

La prueba implicó dejar que las ratas exploraran nuevos objetos en diferentes lugares. Días después, los investigadores reintrodujeron a las ratas en la escena, que era casi idéntica, excepto por la adición de un objeto nuevo. Las ratas que siguieron la dieta de comida chatarra mostraron signos de que no podían recordar qué objeto habían visto anteriormente ni dónde, mientras que las del grupo de control mostraron familiaridad.

Conclusiones

Según los científicos, su estudio refuerza el importante vínculo entre el intestino y el cerebro. “La señalización de acetilcolina es un mecanismo para ayudarles a codificar y recordar esos eventos, análogo a la ‘memoria episódica’ en los humanos, que nos permite recordar eventos de nuestro pasado”, subrayó Hayes. “Esa señal parece no ocurrir en los animales que crecieron con una dieta grasosa y azucarada”, añadió. La investigación se publicó recientemente en la revista científica revisada por pares Brain, Behavior, and Immunity.

Kanoski enfatizó que la adolescencia es un período muy sensible para el cerebro cuando se están produciendo cambios importantes en el desarrollo. “No sé cómo decir esto sin sonar como Casandra y pesimismo”, apuntó, “pero desafortunadamente, algunas cosas que pueden ser más fácilmente reversibles durante la edad adulta son menos reversibles cuando ocurren durante la niñez”, agregó.

Finalmente, los investigadores lograron revertir la capacidad de memoria en las ratas experimentales con medicamentos que inducen la liberación de acetilcolina, inyectada directamente en el hipocampo cerebral. Sin embargo, Kanoski señala que se necesita una investigación más amplia para saber cómo se pueden revertir los problemas de memoria, causados por una dieta de comida chatarra durante la adolescencia, sin necesidad de una intervención médica tan especial.

Erupciones solares provocan apagones de radio en varias zonas del mundo

Tres erupciones de clase M afectaron parte de Filipinas, India y Hawái, en EE.UU.

Alrededor de 25 erupciones solares se registraron entre el miércoles y jueves de esta semana. Tres de ellas fueron de clase M y otras 22 de clase C, lo que significa que la actividad del Sol continúa siendo moderada, a pesar de la aproximación del pico del ciclo solar actual, informó EarthSky.

De acuerdo con el portal, la erupción solar M.2.2, originada en la región de manchas solares AR3638, ocasionó este jueves un apagón menor en las comunicaciones radiales de onda corta en el este de Filipinas. A su vez, indicó que las erupciones solares M.1.6 y M.1.1, de la región AR3645, también causaron apagones de radio menores este miércoles en el sur de Hawái (EE.UU.) y en la costa suroeste de la India, respectivamente.

Se esperan más erupciones

Por otro lado, EarthSky pronosticó que existe una alta probabilidad de que este viernes se produzcan erupciones solares de clase C y M. En ese sentido, mencionó que las posibilidades de una erupción de clase X, considerada de gran magnitud, se incrementaron en un 20 %.

También mencionó que el miércoles se detectó una eyección de masa coronal (CME) en un filamento magnético que se formó cerca del ecuador solar, aunque recalcó que no estaba en dirección hacia la Tierra.

No obstante, explicó que los chorros y erupciones de los filamentos identificados en el suroeste del Sol estaban siendo examinados para determinar si se dirigen a nuestro planeta. A pesar de que el jueves se esperaba una tormenta geomagnética de escala G1 (menor), el sitio Spacewather aseveró que es poco probable que ocurra, ya que no hay señales de que alguna CME alcance la Tierra.

El pico de actividad solar está próximo a ocurrir

El ‘ciclo solar’, que dura aproximadamente 11 años, es impulsado por el campo magnético del astro y se caracteriza por la frecuencia e intensidad de manchas en la superficie solar.

El actual ciclo, el número 25, comenzó en diciembre de 2019. Se prevé que el Sol alcance su pico de actividad, conocido como ‘máximo solar’, entre enero y octubre de este año, lo que podría conducir a un aumento de fenómenos como CME y erupciones solares, así como tormentas de tipo solar y geomagnéticas.