Bale estuvo cerca de renunciar a “Knight of Cups”

Christian Bale interpreta a un guionista que ha perdido su capacidad narrativa en "Knight of Cups" de Terrence Malick, un retrato expresionista de Hollywood, las tentaciones de una industria de excesos y la búsqueda de redención espiritual que surge de esto.

Bale sabía en qué se metía al trabajar con Malick: protagonizó “The New World” hace una década y en su mayoría le encantó su proceso poco convencional. Malick incluso envió a sus actores con cámaras GoPro para que regresaran con sus propias imágenes. A Bale se le perdió una en el océano.

El actor conversó con The Associated Press sobre la película (que tendrá un estreno limitado el viernes) y el único día que estuvo cerca de renunciar. A continuación extractos de la entrevista:

AP: ¿Todos los que trabajan en esta industria tienen sentimientos complicados sobre Los Angeles?

BALE: Yo odiaba Los Angeles cuando llegué por primera vez. Venía a trabajar y me fui tan pronto como pude. Pero gradualmente me comenzó a gustar. Aprendí a ver a Los Angeles como un lugar maravilloso. Eso es lo que se ve en la película. Lo feo de la arquitectura y lo horrible de mucha gente que parece hermosa pero si te acercas te dan nauseas. Pero hay mucha sinceridad y belleza en eso también. Pasé por lo mismo en términos de llegar aquí primero y las fiestas a las que me invitaban. Ya no soy un fiestero, no me va bien en un cuarto lleno de gente, nunca ha sido así. Pero la novedad de eso era tan extraordinaria. Veía casas, actitudes y rostros que no pensaba que existieran. Y yo lo recibí con entusiasmo, venía de un pequeño pueblo en Inglaterra donde tu idea de fiesta era pasar el tiempo debajo de una carretera, fumar marihuana y romper botellas contra la pared. De pronto estaba en Malibu diciendo “¡oh cielos!”. Lo haces por un tiempo, pero después te das cuenta de que no es para ti.

AP: ¿Tuviste una mejor idea de qué esperar tras haber trabajado con Malick?

BALE: “The New World” fue diferente, teníamos un guion y (“Knight of Cups”) no lo tenía. En el minuto que se da cuenta de un diálogo que parece que ya tienes dominado dice ‘OK, corte, vamos a algo diferente”.

(Para “Knight of Cups”) hubo una mañana en la que estábamos en Las Vegas y habíamos estado caminando toda la noche por las luces de neón, y por los casinos, y a la mañana siguiente estábamos un poco desvelados y Terry estaba diciéndome algunos diálogos, yo los repetía y él me decía “simplemente improvisa, haz lo que quieras”, lo cual fue raro, porque la mayoría de las veces quería que escuchara. Pero a veces me sentía como “¡tengo que hablar un poco!”. Yo sabía que nunca lo iba a usar, pero me dejó fluir.

Una mañana dije “se acabó, ya no me interesa, de verdad que no me interesa, no quiero hacer esto más, ya fue todo. No tengo nada”. Y él dijo “comiencen a filmar inmediatamente, esto es fantástico”. Porque es sincero. Yo soy siempre el actor que quiere renunciar y dijo “genial”.

AP: ¿Qué hizo que te quedaras?

BALE: Ay, eso me pasa en cada proyecto. En serio. Sé que me voy a hartar, siempre lo hago, toda mi vida. He hecho esto desde que Reagan era presidente. Debe haber cientos de veces en las que, sin duda, ya estoy harto. Pero algo pasa y digo “al diablo, soy un adicto”.

Creo que pocas veces puedes calificar algo como arte. Y ocasionalmente ves algo y dices “quizá esto se acerque a algo que la gente de hecho considere como arte”.

AP: ¿Te desilusionó que “The Big Short” no ganara más premios en los Oscar el domingo?

BALE: ¡Claro que no! Por Dios, el solo hecho de que le haya ido tan bien como le fue y que desatara el debate como lo hizo… ¿Adam (McKay) y Charles (Randolph) con el Oscar al mejor guion adaptado? Maravilloso. Y el hecho de que puede incitar al diálogo sin importar que gane. Es como Bernie Sanders. Gane o no, ha abierto el diálogo y eso no tiene precio.

AP: Eres famoso por tus transformaciones físicas, pero recientemente tuviste que renunciar a “Enzo Ferrari” de Michael Mann por asuntos de salud. ¿Tu cuerpo está traicionando tu ambición?

BALE: Simplemente estoy más viejo (tiene 42 años). Antes podía subir o bajar mucho de peso y no me sentía diferente, me sentía invencible. He tenido varios accidentes, accidentes de moto y contusiones. Tengo tanto metal en mi cuerpo sosteniéndolo. Es una pena porque Michael es muy buen amigo y era algo muy especial, pero había demasiadas banderas rojas de advertencia. Y soy un padre de familia, no voy a jugar con eso. Tuve que rendirme.

Rodarán serie televisiva sobre primera dama francesa

París, Francia. Una serie televisiva sobre la vida de la primera dama francesa Brigitte Macron, que era maestra de escuela cuando conoció a su futuro esposo y presidente, será rodada por la productora Gaumont, informó un comunicado este martes.

AFP

“Gaumont está trabajando en una serie titulada ‘Brigitte, una mujer libre’ de seis episodios de 45 minutos”, dijeron los productores, agregando que todavía está en etapas muy tempranas.

Brigitte Macron, de 71 años, fue profesora de francés y teatro hasta 2015.

Solía trabajar en una escuela secundaria del norte de Francia donde conoció a Emmanuel Macron. Éste tenía 24 años menos que ella.

Ha mantenido un perfil bajo desde que su esposo fue elegido por primera vez en 2017, aunque mantiene una actividad pública en la lucha contra el acoso escolar y cibernético.

Una fuente cercana a la primera dama, que prefirió no ser nombrada, dijo que era la primera vez que escuchaban hablar de esa serie.

“No estamos asociados a este proyecto del que nos enteramos hoy en la prensa”, dijo la fuente.

El año pasado la estrella del cine francés, Catherine Deneuve, protagonizó “Bernadette”, una película centrada en la esposa del ex presidente, Jacques Chirac.

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Armera de la película “Rust” condenada a 18 meses de prisión por disparo mortal

Los Angeles, Estados Unidos. La armera de la película de vaqueros “Rust”, producida por Alec Baldwin y en cuyo rodaje murió de un disparo la directora de fotografía, fue condenada el lunes a 18 meses de prisión por la justicia estadounidense.

AFP

Hannah Gutierrez-Reed había cargado el revólver con el que Baldwin estaba ensayando en octubre de 2021 cuando el rodaje se convirtió en tragedia en un rancho de Nuevo México (suroeste): una bala real mató a la directora de fotografía Halyna Hutchins e hirió al director Joel Souza.

“Tú eras la armera, la que se interponía entre un arma segura y un arma que podía matar a alguien. Solo usted convirtió un arma segura en un arma letal”, dijo la juez Mary Marlowe Sommer.

“De no ser por usted, la señorita Hutchins estaría viva. Un marido tendría a su pareja y un niño pequeño tendría a su madre”.

En el juicio de 10 días de Gutierrez se escuchó cómo a pesar de ser la persona responsable de las armas de fuego en el set, la joven de 26 años había incumplido repetidamente las reglas básicas de seguridad, dejando las armas desatendidas y permitiendo que los actores, incluido Baldwin, las empuñaran.

También se supo que Gutierrez era responsable de la presencia de seis cartuchos cargados -una línea roja en la industria cinematográfica- y que había cargado uno de ellos en el Colt .45 que Baldwin estaba utilizando.

El arma se disparó cuando el actor preparaba una escena en el interior de una iglesia de madera, matando a Hutchins e hiriendo al director Souza.

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Fuertes críticas contra serie sobre “paraguayos”, sin paraguayos enciende las redes

La serie de Netflix “El secuestro del vuelo 601″, basada en una historia real donde los protagonistas fueron dos paraguayos, Eusebio Borja y Francisco Solano López, quienes en 1973 secuestraron un avión colombiano exigiendo el pago de 200.000 dólares.

La ficción, de 6 capítulos es protagonizada por los argentinos Valentín Villafañe y Alían Emmanuel Devatac, y ni bien se estrenó desató la polémica en redes sociales.

¿La razón? La ausencia de actores de nacionalidad paraguaya y la extraña pronunciación del guaraní.

Artistas nacionales, principalmente exponentes de la actuación, lamentan el ninguneo del talento nacional ante el mundo.

Celso Franco, protagonista de la película “7 Cajas”, mencionó: “Es fundamental apoyar a los cineastas y artistas locales para que cuenten nuestras historias al mundo, desafiando estereotipos y promoviendo la diversidad cultural”.

Por su parte, Marcos Díaz, también realizador audiovisual y tiktoker, expresó: “Los tipos lo re logran, pero nosotros no hablamos así, ni los asunchetos nos animamos a hablar tan mal el guaraní, pero más allá del guaraní, porque si es difícil, tampoco hablamos así el español, o sea a mí se dio como ¡vamos a hablar mal, para hablar como paraguayos’”.

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