Acoso escolar: consecuencias en los niños y cómo manejarlo según el protocolo del MEC
El acoso escolar puede tener consecuencias graves y duraderas en los niños. Además de efectos físicos, puede ocasionar problemas emocionales y de salud mental, como depresión o ansiedad, que pueden derivar en el abuso de sustancias, mal rendimiento escolar o suicidio.
Fuente: Carol Salinas
Los chicos volvieron a las aulas luego de dos años de encierro por la pandemia. Dos años pasaron para que vuelvan a compartir con sus compañeros y amigos, pero no todo es color de rosa, porque también existen diferencias, como en todo grupo.
Hasta ahí todo es normal en un lugar convivencia por la diversidad de pensamiento y de personalidades, sin embargo, el problema comienza cuando se presentan casos de acoso escolar o bullying.
Pero ¿Qué es el acoso escolar?
El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) detalla que por lo general, el acoso puede identificarse a través de tres características: intención, repetición y poder.
Un acosador tiene la intención de causar dolor, ya sea a través del daño físico, con de palabras o mediante comportamientos hirientes que lo hace de manera repetida hacia la víctima.
“Los niños tienen más probabilidades de ser víctimas de acoso físico, mientras que las niñas suelen sufrir acoso psicológico”.
Es importante saber que, más que un incidente aislado, el acoso es un patrón de comportamiento. Los niños o adolescentes que acosan a otros suelen tener a un estatus social más alto o una posición de poder, es el caso de aquellos que son más grandes o fuertes o considerados “populares”.
Los chicos más vulnerables se enfrentan a un riesgo mayor de ser víctimas de acoso. Normalmente, se trata de niños de comunidades marginadas o de familias pobres, niños con identidad de género distinta, con discapacidades, migrantes o refugiados.
Así también, el acoso puede darse en persona o a través de las redes sociales, mensajes de texto, SMS, mensajería instantánea, correo electrónico o cualquier otra plataforma que utilicen los niños o adolescentes, conocido como “ciberacoso”,
En tal sentido, dado que los padres no siempre saben lo que hacen sus hijos en dichas plataformas, puede resultar difícil identificar cuándo el niño tiene un problema.
Sobre cómo tratar el acoso escolar o bullying, el Ministerio de Educación y Ciencias (MEC) elaboró un protocolo de atención en instituciones educativas para casos de violencia entre pares o acoso escolar.
PROCESO DE DETECCIÓN Y COMUNICACIÓN
Cualquier miembro de la comunidad educativa, familia, alumno, docente o personal de la escuela o colegio, que sospeche o tenga constancia de una situación de violencia o acoso escolar debe activar el presente protocolo de atención, poniéndolo en conocimiento de docente encargado del alumno o del equipo directivo, según el caso.
“Hay que entender que para los casos de violencia contra la integridad física de los alumnos/as, ante la simple declaración de la víctima es necesario derivar a la misma al centro de salud más cercano, activar las medidas de urgencia establecidas en el protocolo y comunicar a sus padres, madres o encargados, las medidas adoptadas para luego continuar con los pasos establecidos en el Diagrama de la página 9”, expresa parte del libro del MEC.

Protocolo de los pasos establecidos en el Diagrama del libro del MEC.
El protocolo incluye los siguientes pasos:
a- Comunicación de la situación de acoso al director/a de la institución educativa: el primer nivel de atención consiste en comunicar la situación observada al equipo directivo y al docente encargado. Para ello, se propone utilizar un modelo de registro como el que se muestra a continuación solicitando el inicio de actuación ante posibles casos de violencia o acoso escolar.

Modelo de registro.
b- Comunicación a las familias: el director/a junto con el equipo técnico valorará la situación a fin de informar a las familias de los afectados/as, puesto que en un primer momento se trata de una sospecha.
c- Recogida de la información: el director/a coordinará la recogida de información, pudiendo designar a un docente encargado de la misma a fin de completar y contrastar la información confidencial recibida.
d- Análisis de la información recogida y valoración inicial de la situación: el intercambio y análisis de la información obtenida se podrá realizar por medio de reuniones de reflexión entre los responsables de la institución. Es conveniente recoger en un informe escrito tanto las actuaciones como las valoraciones a las que den lugar. El director/a se incorpora al equipo de recogida de información para participar en el análisis y valoración.
e- Elaboración de un informe escrito: en este documento figurará el contenido de las actuaciones realizadas y la justificación de la confirmación o no de violencia o acoso escolar. El responsable de la elaboración de este informe será el funcionario referente de la institución educativa.
El plazo establecido para confirmar o no la sospecha/denuncia de la situación de violencia o acoso escolar es 72 horas.
f- No se confirma la violencia o acoso escolar: si a partir del análisis de toda la información obtenida, no se confirma la existencia de violencia o acoso escolar, puede ser el momento oportuno para revisar las medidas de sensibilización y prevención que, de forma ordinaria, deben llevarse a cabo en las instituciones educativas.
g- Se confirma la violencia o acoso escolar: la confirmación conlleva la adopción de varias actuaciones de forma paralela. Por un lado valorar la necesidad de comunicar la situación a otras instituciones o instancias del nivel central del MEC, y por otro lado, la puesta en marcha de forma inmediata de las medidas urgentes, entre las que pueden contemplarse las medidas disciplinarias.
Una vez confirmada la violencia o acoso escolar, se informará a las familias, al plantel docente, a la Supervisión Pedagógica con copia a la Coordinación Departamental para su conocimiento y a la Dirección de Protección y Promoción de Derechos de la Niñez y la Adolescencia. Se tratará en todo momento de evitar sembrar alarma en la institución y ofrecer una información veraz.
A su vez, la Dirección de Protección y Promoción de los Derechos de la Niñez y Adolescencia será la instancia coordinadora de las acciones que puedan ser llevadas adelante desde el nivel central del MEC.
El objetivo del protocolo impulsado por el MEC con apoyo del Ministerio de la Niñez y la Adolescencia es desnaturalizar el acoso escolar. El mismo cuenta con las medidas a ser implementadas ante situaciones de violencia entre los pares y acoso escolar, medidas preventivas en la institución educativa, en el aula y con las familias. También sobre como es el proceso de detección y comunicación sobre estos hechos de violencia. Además de las medidas urgentes tanto para la víctima como el victimario, y todo el entorno educativo y familiar.
Así también, medidas de intervención con la víctima, con el agresor, y ambos (intervenciones conjuntas), con la escuela o colegio, aula y las familias e indicadores para identificar el acoso escolar.
Este material ayudará a comprender mejor a los estudiantes y sus entornos sin juzgarlos; valorar las alternativas para las posibles resoluciones de conflictos no violentos y llevar a cabo estrategias mediadoras y alternativas de apoyo.
Para leer el protocolo de atención en instituciones educativas para casos de violencia entre pares o acoso escolar, puede ingresar a este enlace.
Batallón de Amor: movimiento solidario que transforma vidas y dignifica el trabajo
La empatía y la solidaridad tienen un nombre en Paraguay: Batallón de Amor. Esta iniciativa ciudadana, que nació en Venezuela y se replicó en varios países de Latinoamérica, llegó a nuestro territorio gracias a la determinación y el corazón generoso de jóvenes que transforman las vidas de adultos mayores y personas vulnerables.
Con más de 2.000 integrantes en el país, este movimiento busca brindar apoyo a personas en situación de vulnerabilidad, especialmente adultos mayores y vendedores ambulantes, a través de una metodología innovadora: la compra solidaria.
Todo comenzó con un simple comentario en TikTok en diciembre, cuando alguien sugirió crear Batallón de Amor en Paraguay. La joven Ara Echagüe, actual coordinadora, no lo dudó y, con la ayuda de redes sociales, se formó el primer grupo de voluntarios. Desde entonces, la iniciativa se expandió más allá del departamento Central, llegando a lugares como Concepción y Alto Paraná.
El concepto de Batallón de Amor es sencillo pero poderoso: los voluntarios identifican a vendedores ambulantes, adultos mayores o personas en situación de necesidad y organizan compras colectivas de sus productos. De esta manera, no solo se les brinda apoyo económico, sino que se respeta su dignidad y su esfuerzo. “Es un gesto que les llena de alegría, porque les permite vender todo en un día”, explicó Ara al canal GEN.
Las convocatorias se realizan cada fin de semana, y cualquier persona interesada puede sumarse a través de redes sociales o grupos de WhatsApp. “No aceptamos dinero, queremos que la ayuda sea directa, de voluntario a beneficiario. Nos organizamos y cada voluntario compra lo que la persona vende, ya sea trapitos, yuyos o sándwiches”, agregó la coordinadora.
Uno de los casos más emblemáticos fue el de un adulto mayor que vendía trapos en una esquina de Asunción. Su historia conmovía a todos los que pasaban, y Batallón de Amor logró cambiar su realidad, al menos por un día. “Nos organizamos, le compramos todos sus productos y, a pesar de que ya nos reconocen, intentamos que sea una sorpresa para ellos”, contó Ara.
El trabajo de este grupo no se limita solo a la compra de productos. Los voluntarios también se interesan en las historias de vida de los beneficiarios y buscan brindar apoyo adicional en casos necesarios. Los voluntarios se encuentran con realidades muy duras, con abuelitos abandonados o personas que, a pesar de la adversidad, siguen luchando.
El llamado es claro: Batallón de Amor depende de la voluntad de la gente. “Al principio fue un boom por la viralidad en redes, pero esto debe seguir”, enfatizó Ara. Los interesados en sumarse pueden seguir a la organización en TikTok e Instagram bajo el usuario @batallondeamorparaguayoficial.
En un mundo donde las dificultades parecen multiplicarse, Batallón de Amor demuestra que la solidaridad sigue siendo una luz de esperanza.
El ‘jopará’, símbolo de la identidad paraguaya que cautiva a propios y extraños
“Jopará”, término acuñado desde tiempos inmemoriales para definir a esa singular mezcla entre el guaraní y el español, siempre logra despertar el interés de propios y extraños. En esta oportunidad, un importante medio británico se hizo eco del llamado “tercer idioma” de Paraguay.
Por Robert Bourgoing (@robertb_py)
Al paraguayo lo define una característica forma de expresarse al conversar con sus pares. Una charla entre amigos, una ronda de tereré o una consulta rápida a algún transeúnte...todas son ocasiones propicias para utilizar el “jopará”.
Esta singular mezcla entre el castellano y el guaraní, impregnada en la idiosincrasia de cada compatriota, se destaca por su amplia aceptación y, sobre todo, por la facilidad que otorga a sus hablantes para utilizar términos de uno u otro idioma, sin preocuparse por el respeto de las tradicionales normas que rigen la lengua española.
El reconocido medio británico BBC Mundo, en un reciente artículo, se hizo eco de esta llamativa forma en que nos comunicamos los paraguayos, resaltando las virtudes del que decidieron nombrar como “tercer idioma de Paraguay” por su masivo uso a nivel local.
El Dr. David Galeano, presidente del Ateneo de la Lengua Guaraní, resaltó que esta “alternancia” entre idiomas se caracteriza por el “préstamo” de términos o frases. “Muchas veces no sabemos cómo decir algo en guaraní, y ¿qué hacemos en ese caso?, prestamos del castellano”, manifestó al SNT.
Otro uso que se le da habitualmente al jopará (y del que quizás no somos conscientes en todos los casos) es el énfasis a determinadas expresiones, insertando “piko”, “ko”, “na”, “pa”, por citar algunos ejemplos, para complementar una sentencia formulada mayormente en español.
“Solo nosotros entendemos, por eso a un extranjero le llama la atención, uno dice algo en castellano y luego sale algo que es en guaraní. Es increíble como el paraguayo funciona perfectamente en dos idiomas”, añadió.
Según Galeano, existe una necesidad de darle mayor fortaleza a la enseñanza del guaraní y el castellano como herramientas de comunicación oral, pudiendo dejarse a la gramática en un segundo plano para priorizar la fluidez verbal. Para ello, insta al Ministerio de Educación y Ciencias (MEC) a asumir un compromiso real para lograr este objetivo.
Una de las ventajas para facilitar la comprensión del guaraní son las herramientas digitales, como el “Wikipedia en guaraní”o el traductor incluido dentro de Google Translate. A su vez, el navegador Mozilla Firefox ya incluye una versión en nuestro idioma. “Tenemos varias herramientas que bien se pueden utilizar”, refirió.
Galeano, quien es uno de los pocos Doctores en Lengua Guaraní que existen en el país, resaltó que, según las estadísticas actuales, más del 70% de la población sigue siendo guaraní-hablante, lo cual demuestra que este sigue siendo el idioma más hablado en nuestro territorio.
A su criterio, existe un “resurgir del guaraní” si se hace una comparación con algunas décadas atrás, cuando el idioma de nuestros antepasados era “censurado”, lo cual también se explica con las restricciones impuestas durante la dictadura stronista y la ya conocida historia del término “guarango”, utilizado de forma despectiva para definir a quienes osaran hablar con esta lengua.
Estemos o no de acuerdo con esta manera tan particular de expresarnos que nos caracteriza, es innegable el impacto que posee el jopará dentro de nuestra identidad y su alcance entre compatriotas, quienes con orgullo siguen adoptando a este “tercer idioma” en su día a día.
Embarazo psicológico: ¿Cómo afecta emocionalmente y qué hacer al respecto?
El embarazo psicológico es una condición en la que una mujer experimenta síntomas de embarazo, pero sin estarlo. Esto afecta emocionalmente y puede generar confusión, pero con diagnóstico y apoyo adecuado, es posible superarlo.
El embarazo psicológico, conocido también como pseudociesis, es una condición en la que una persona presenta síntomas físicos y emocionales propios de un embarazo real, a pesar de no estar efectivamente embarazada, explicó la psicóloga Paola Zapata, en contacto con HOY/Nación Media.
Indicó que, a pesar de que este fenómeno se da mayormente en mujeres, en casos raros también puede ocurrir en hombres. Esta condición, aunque compleja, es completamente real y puede tener un impacto profundo en la persona que lo experimenta.
Síntomas comunes y causas del embarazo sicológico
Entre los síntomas más comunes del embarazo psicológico se incluyen la ausencia de menstruación o ciclos irregulares, náuseas y vómitos, cambios en los senos como sensibilidad o aumento de tamaño, y aumento de peso.
Estos síntomas pueden ser tan intensos que a menudo se confunden con los de un embarazo real, lo que genera confusión en la persona afectada y en su entorno.
La especialista explicó que el embarazo psicológico generalmente está relacionado con factores emocionales y psicológicos. “El intenso deseo de quedar embarazada, la ansiedad, o el miedo a estarlo, son algunas de las causas subyacentes más comunes”, comentó Zapata.
Además, las expectativas sociales o familiares sobre la maternidad pueden añadir presión y desencadenar este trastorno.
Un aspecto relevante de este fenómeno es que, en algunos casos, los cambios hormonales pueden contribuir a los síntomas, lo que hace más difícil para la persona distinguir entre un embarazo real y el psicológico.
Diagnóstico y tratamiento
Sobre ese punto, la psicóloga dijo que el diagnóstico del embarazo psicológico se basa principalmente en una evaluación clínica detallada, donde se descartan otras causas médicas. Las pruebas de embarazo suelen dar resultados negativos, aunque algunas personas pueden obtener falsos positivos, complicando aún más el proceso de diagnóstico.
El tratamiento suele ser multifacético. La intervención más efectiva es la terapia psicológica para tratar las causas emocionales subyacentes del embarazo psicológico.
La licenciada enfatizó la importancia del apoyo emocional durante este proceso: “Escuchar activamente y brindar un espacio seguro es fundamental. La persona afectada necesita saber que sus sentimientos son validados”, asegura.
En algunos casos, si los síntomas son intensos o persisten, se puede considerar el tratamiento hormonal para equilibrar los niveles hormonales que contribuyen a la aparición de los síntomas. Además, se recomienda un enfoque integral que incluya autocuidado, actividades que fomenten la distracción y un entorno de apoyo continuo.
Consecuencias emocionales y apoyo profesional
El impacto emocional del embarazo psicológico puede ser significativo. Las personas afectadas experimentan confusión, ansiedad, tristeza e incluso depresión.
Esto no solo afecta a quien lo padece, sino que también puede generar estrés en su entorno cercano. Por eso, la empatía y el apoyo profesional son cruciales para el bienestar de la persona.
Es importante que quienes atraviesan por esta experiencia comprendan que no están solas. Según un estudio de la Harvard Medical School (2020), aunque el embarazo psicológico es relativamente raro, afecta a aproximadamente 1 de cada 22.000 embarazos reales, lo que subraya la necesidad de informar y desmitificar esta condición.
Zapata añadió que “la terapia psicológica es clave para ayudar a las personas a comprender su situación y encontrar maneras efectivas de lidiar con los sentimientos de ansiedad y confusión”.
Promoción del autocuidado y estrategias de apoyo
Además del tratamiento psicológico, el autocuidado juega un papel esencial en la recuperación. Se recomienda practicar técnicas de relajación como la meditación o el yoga, mantener una alimentación equilibrada y realizar ejercicio físico si es adecuado, ya que estas prácticas pueden ayudar a reducir la ansiedad y mejorar el bienestar general.
El apoyo emocional es igualmente crucial. Ofrecer ayuda práctica en las tareas cotidianas o simplemente estar presente para la persona puede hacer una gran diferencia.
“Es vital ser paciente y comprensivo. Cada persona tiene su propio ritmo para sanar, y lo más importante es que la persona sepa que tiene el respaldo de su entorno”, concluyó la psicóloga.