Las cajas del IPS, cómo se financian y qué implica un préstamo para pagar deudas

El Instituto de Previsión Social acumula una deuda de 240 millones con sus proveedores. De las tres cajas que dispone, la del Programa de Enfermedad es la deficitaria y la que debe cubrir ese pasivo. Se plantea que el IPS haga un préstamo y sacarle anualmente 5 % a los fondos de salud para pagar esos créditos. 

El presupuesto del IPS es financiado por los aportes de sus asegurados, el 14 % del Patronal y el 9 % del Obrero. Del total de ingresos, la distribución se da de la siguiente manera:

El 54.3 % va al Fondo de Jubilaciones y Pensiones,

El 6,52 % a la Parte Administrativa,

El 39, 14 % al Programa de Enfermedad y Maternidad.

Según el diputado Arnaldo Samaniego, el Fondo de Jubilaciones goza de buena salud financiera, con una reserva de 2.000 millones de dólares, sin embargo, aclara hasta el hartazgo, que esa caja no se tocará para cubrir deudas.

Enfatiza en cambio, que la caja del Programa de Enfermedad y Maternidad arrastra un déficit histórico desde el año 2000, década desde la cual, la deuda siempre se mantuvo en 60 millones de dólares hasta antes de la pandemia. A partir de allí trepó a 200 millones en el 2020 y subió a 241 millones de dólares en el 2021 hasta la actualidad.

Este dinero que el IPS debe es en concepto de insumos, medicamentos, equipos bioquímicos, servicios tercerizados, internaciones, hemodiálisis, etc. De los 240 millones, aproximadamente 70 corresponden a servicios prestados a pacientes no asegurados, durante la pandemia, periodo en el que el Ministerio de Salud obligó por ley al Instituto a recibir a todos por igual.

Como consecuencia inmediata ya existe un corte de suministro de alimentos, amenaza con interrumpir las prestaciones de servicios, de suministros de medicamentos e insumos, según reveló el proyectista.

Para solucionar este conflicto gigantesco, Samaniego plantea el proyecto que “Establece medidas administrativas para el financiamiento del Programa de Enfermedad y Maternidad del IPS.

“Queremos dotarlo de  instrumentos jurídicos que autoricen al programa de salud, a acceder a créditos hasta 20 años, ya que la carta orgánica no permite contraer préstamos a mediano y a largo plazo. Se blinda al Fondo de Jubilaciones y Pensiones”, aclaró Samaniego durante su exposición.

El artículo 1 dispone que el IPS

Solicite al Banco Nacional de Fomento (BNF), entidades del sistema financiero nacional y/o entidades financieras internacionales la apertura de líneas de crédito de mediano y largo plazo que serán destinados al cumplimiento de las obligaciones del Programa de Enfermedad y Maternidad.

La financiación de esa deuda está explicada en el artículo 3, donde se establece que el límite máximo del total anual de las cuotas emergentes de dichos créditos, no podrán exceder el 5 % del presupuesto anual asignado a los fondos de salud, es decir, cada año se le sacará el 5 % de los recursos a la caja de salud del IPS, para cubrir esa deuda, por los años que sean necesarios.

El artículo cuarto señala que la deuda podrá cubrir solamente con los fondos del Programa de Maternidad, es decir, no con las otras cajas restantes, que son la de Jubilación y la de la parte administrativa.

El segundo dispone

que las operaciones de financiación a largo plazo serán realizadas bajo la constitución de un Encargo Fiduciario de Administración y Pago, de conformidad con las disposiciones de la Ley N° 921/96 “DE NEGOCIOS FIDUCIARIOS” y sus modificaciones.

El propio Samaniego propone dos modificaciones a su proyecto.

En el artículo primero incluir el término otras entidades de créditos para ampliar las posibilidades de IPS de obtener mejores propuestas con todo tipo de entidades y en el segundo, reemplazar la palabra serán por podrán.

LO QUE IMPLICA LA DEUDA PARA EL FONDO DE SALUD DEL IPS

El abogado especialista en sistema de pensiones, Pedro Halley, ex gerente de prestaciones del IPS, explicó por qué este proyecto podría representar un riesgo para el Fondo de Jubilaciones, pese a que el texto habla de que el dinero solamente se sacará del Programa de Salud.

Según los porcentajes de distribución, el Programa de Salud recibe anualmente unos 421 millones de dólares , el de Administración 76 millones de dólares y el de Jubilaciones 615 millones de dólares.

Los tres son independientes entre sí y ninguno le puede prestar dinero al otro. La diferencia es que las cajas de Salud y de Administración son presupuestos de ejecución anual (de enero a diciembre), pero el Fondo de Jubilaciones es distinto, ya que opera en base a un presupuesto de ingreso y egreso anual, pero con obligaciones que no son solamente de un año, sino a largo plazo. Por ello, el agente financiero del IPS es el Fondo de Jubilaciones, ya que es el único, dentro del IPS, que puede hacer inversiones y colocaciones a largo plazo, las dos dos cajas no, ya que carecen de reservas y proyecciones de gastos.

Con el planteamiento del proyecto, se deberá sacar el 5 % anual de lo asignado al programa de salud, es decir, de 421 millones de dólares que recibe cada año, 21 millones le serán descontados para pagar dicha deuda. Esto equivaldría a 11 o 12 años de sacarle 21 millones de dólares al Fondo de Salud, si se debiera cubrir la deuda de 242 millones.

“Cuando en unos años, en virtud de esta merma del presupuesto, una administración diga, ya no vamos a usar plata de Salud para pagar esta deuda, porque salud necesita porque suben los gastos, que pague el hermano rico, el fondo de jubilación porque es el único que tiene plata”, explicó Halley

Cuando eso ocurra, se registrará la violación del artículo 95 de la Constitución Nacional, que prohíbe cualquier tipo de operación que ponga en riesgo las cajas de jubilaciones.Taxativamente dice en el párrafo tercero: Los recursos financieros de los seguros sociales no serán desviados de sus fines específicos y; estarán disponibles para este objetivo, sin perjuicio de las inversiones lucrativas que puedan acrecentar su patrimonio.

 

Cirugía de la Mente: el poder transformador de la lectura que busca llegar a las escuelas

Con libros en mano y convicción en el corazón, Víctor Cabral busca impulsar un cambio profundo a través de la lectura de libros motivacionales. Su sueño es que el Ministerio de Educación incorpore este tipo de lectura formativa al currículo escolar.

“Un libro me cambió la vida”, dice Víctor Cabral con emoción durante una visita al diario Hoy Digital. Y no es una metáfora. Licenciado en Contabilidad, encontró su vocación en una causa que considera vital: fomentar la lectura de libros de autoayuda y motivacionales como herramienta de transformación personal y social. A ese proceso lo llama Cirugía de la Mente, una práctica que ya implementó en instituciones educativas, universidades, centros comunitarios y hasta cárceles del país.

El proyecto consiste en la lectura guiada de libros que despiertan conciencia, fortalecen el carácter y pacifican la mente. Títulos como El hombre mediocre o textos inspirados en el budismo, componen una lista de más de 30 obras que ayudan a desarrollar pensamiento crítico y armonía emocional.

“Yo vine del interior sin esperanzas, pero la lectura me hizo ver que todo depende de uno mismo”, cuenta. Esa convicción lo llevó a formar pequeños grupos de lectura donde, con paciencia y dedicación, acompaña a jóvenes y adultos en procesos de crecimiento personal.

Una de las experiencias más significativas ocurrió con un joven que nunca había leído un libro completo. En seis meses, guiado por Víctor, devoró 30 títulos. “Hoy es el que está generando cambios en su propia familia. La lectura no solo lo transformó a él, sino a todo su entorno”, destaca.

El programa también fue implementado en cárceles, donde los resultados sorprendieron a todos. “Trabajé en Tacumbú, donde los internos comenzaron a leer, reflexionar y cambiar su actitud. Uno de ellos, que entró desde los 13 años por hurto, hoy es un pequeño empresario en Buenos Aires”, relata emocionado. La experiencia incluso ayudó, según asegura, a lograr la ley de salida transitoria para los internos que participaban del programa.

El entrevistado recuerda que, en 2006, el Ministerio de Educación declaró el programa de interés cultural mediante una resolución. En tanto que la Cámara de Diputados también emitió una declaración favorable. Además, existen dictámenes técnicos tanto de la Dirección de Currículum como de la Dirección de Educación Básica que aprueban su implementación, agrega.

Sin embargo, a pesar del reconocimiento oficial, el proyecto nunca logró consolidarse de forma permanente en el sistema educativo. “Me invitan a las escuelas, llevo los libros, acompaño a los chicos, pero cuando los resultados empiezan a sobresalir, hay resistencia. A veces los estudiantes superan a los propios docentes en pensamiento crítico, y eso no siempre es bien recibido”, lamenta.

Hoy, Víctor Cabral vuelve a tocar puertas, con la esperanza de que el Ministerio de Educación considere de forma seria la incorporación de la lectura formativa al currículo nacional. “La educación no se trata solo de acumular conocimientos técnicos, sino de formar seres humanos capaces de pensar, sentir y actuar con conciencia”, afirma.

Con testimonios reales, resoluciones en mano y una larga lista de libros transformadores, Cabral sigue adelante con su misión: sembrar conciencia, una página a la vez.

La tristemente célebre “Pascua Dolorosa”

“Nada de lo que se diga que ocurrió en Misiones es exagerado”. Poco tiempo después del histórico golpe que derrocó a Alfredo Stroessner en 1989, Raúl Monte Domecq y Guillermina Kanonnikoff impulsaron un proceso judicial contra los responsables del asesinato, mediante tortura, de Mario Schaerer Prono en 1976, uno de los referentes de la extinta Organización Político Militar (OPM).

Por Gonzalo Cáceres – Periodista

La querella fue contra Alfredo Stroessner, el ministro del Interior (Sabino Augusto Montanaro), el jefe de Investigaciones (Pastor Coronel), el jefe de la Policía Nacional (Alcibiades Brítez Borges) y los torturadores Nicolás Lucilo Benítez Santacruz, Camilo Almada Morel y Juan Aniceto Martínez Amarilla.

Así empezaba la búsqueda de justicia para las víctimas del quizás más brutal episodio de represión de la dictadura stronista.

EL CONTEXTO – OPM

El 3 de abril de 1976 caía el estudiante paraguayo Carlos Brañas en la aduana de Encarnación, durante un control policial rutinario tras cruzar el río Paraná en lancha. El susodicho portaba documentos de identidad falsos y escritos de la Organización Político Militar (OPM), lo que inmediatamente llamó la atención de los agentes.

La oficina de Investigaciones de la Policía Nacional se encontró de frente con un movimiento clandestino, subversivo y que, en los papeles previos, pretendía instalar la resistencia armada contra la dictadura por lo que, con la información extraída de Brañas, se desató una feroz ola de allanamientos y detenciones.

La plana mayor de la OPM fue arrasada en las siguientes horas (en este punto se da la captura de Mario Schaerer Prono) y su precaria estructura desbaratada casi del todo con el correr de los días. La pesquisa constató que la OPM no solo estaba conformada por estudiantes secundarios de la burguesía capitalina y de los círculos universitarios locales y fronterizos, también contaba con profundas ramificaciones entre los dirigentes campesinos y religiosos de las Ligas Agrarias Cristianas (LAC).

Esta situación le cayó como anillo al dedo a Stroessner, porque aprovechó el episodio para golpear a personas e instituciones que nada tenían que ver con el asunto. El dictador dejó caer su maquinaria represiva sobre los referentes del campo, a sabiendas de que la experiencia de las Ligas Agrarias Cristianas (y su modelo social y político) se extendía como pólvora encendida por el interior del país desde hacía un buen tiempo.

OPM – ‘PASCUA DOLOROSA’

Es así que en la Semana Santa del 76 llegaba el temido comisario Camilo Almada Morel (alias ‘Sapriza’) a San Juan Bautista, capital del departamento de Misiones. Se instaló en la cárcel de Abraham Cue, un edificio antiguo con forma de ‘U’ empotrado en el núcleo urbano de la ciudad.

Desde allí procedió a dar caza a cualquiera con olor a sospechoso, o de simpatizar con las ideas de la OPM, con el apoyo de los soldados de la Tercera División de Infantería del Ejército Paraguayo, policías, alcaldes de compañía y los infaltables milicianos (civiles de la seccional colorada local).

Alfredo Boccia Paz relata en su obra “La Década Inconclusa” los terroríficos episodios que se sucedieron. “Los campesinos eran llevados a Abraham Cué de a uno. Allí hubo el mismo proceso vivido por los militantes asuncenos unos días antes en Investigaciones: la tortura. Pero aquí con el estilo más bruto y bestial que imponía Camilo Almada Morel. El tormento sufrido por los agricultores apresados supera los límites de lo creíble”.

Los testimonios de los sobrevivientes fueron recopilados en el libro “Ko’aga roñe’eta” (Ahora hablaremos), editado por la CEPAG. El título surge de la frase que pronunció Almada Morel (”¡Ko’aga reñe’eta!) cuando le cortó los labios con un cuchillo a uno de los tantos desdichados que le tocó ‘procesar’.

HORROR TOTAL

La población entera de San Juan Bautista estaba sumergida de lleno en el miedo. Los niños cuyos padres fueron encarcelados quedaron vagando por las compañías, de los mismos los alcaldes tomaron las propiedades y todo objeto que les apetecía. El abuso sexual de menores y mujeres y el robo sistemático fue una constante.

La impunidad de los agentes estatales era tal que, según una versión difundida luego por el hoy Monseñor emérito Mario Melanio Medina, “Sapriza”, cruzando raudamente una tarde la ciudad, atropelló y mató a una criatura de seis años que estaba sentada a la vera del camino. Nadie se atrevió a reclamar.

Los testimonios también indican que ‘Sapriza’ tuvo directa participación en el asesinato del dirigente Diego Rodas, quien fue ejecutado tras dos días de brutales torturas. “Nada de lo que se diga que ocurrió en Misiones es exagerado”, alega Boccia Paz.

Los privados de libertad abarrotaron la cárcel de Abraham Cue y la Delegación de Gobierno. Un memorándum policial, firmado por ‘Sapriza’ a mediados de mayo del 76, indica que la situación llegó a tal punto que 84 campesinos tuvieron que ser remitidos a Asunción. Ocho asesinados fueron catalogados como “desaparecidos”, quedando para siempre en algún punto de Abraham Cue o los montes vecinos. Sus cuerpos nunca fueron entregados a los familiares.

El coronel Delis Villar Marecos relató al Diario ABC Color en 1992 que en esa época él era comandante de compañía. Afirmó que su trabajo fue recoger los informes sobre los procedimientos realizados en Abraham Cue. Según su versión, Stroessner llamaba todos los días a las seis de la mañana al general Eduardo Sánchez, superior de Villar Marecos en la Tercera División de Infantería, para conocer los avances de la investigación. “Yo, en cumplimiento de la orden de mi comandante (Sánchez), iba a traer los informes para el Presidente de la República”.

Stroessner sabía de la carnicería desatada por Almada Morel y sus secuaces.

“SAPRIZA”

De entre los torturadores, Camilo Almada Morel era bien conocido, y temido, por ser de los más salvajes agentes de la dictadura. Fue el principal artífice de la tristemente célebre “Pascua Dolorosa”.

Este infame personaje nació el 18 de julio de 1941 en Acahay, hijo de Don Serafín Almada y Doña Juliana Morel. Su residencia se encontraba en Purificación y Primera. Sobre su recorrido estudiantil y llegada a los cuerpos de seguridad estatales poco o nada se sabe. Fuentes confirmaron que poseía, o posee, acciones en diversas empresas de transporte público (línea 6, entre otras).

Él mismo afirmó durante el juicio por la muerte de Schaerer Prono que su trabajo dentro de la organización de la Policía Nacional era “la del control del servicio extremo político y afines”. Tenía a su cargo el control de los puestos fronterizos (Falcón, Sajonia, Itá Enramada, Aeropuerto Internacional) y también era responsable de “observar el movimiento de los pasos que no estaban habilitados” y lugares “de aglomeración” como la terminal de ómnibus de Asunción o la calle Palma. Sus archivos y la mayoría de datos suyos se perdieron (o hicieron ‘perder’).

Por el caso Schaerer Prono, “Sapriza”, a sus 48 años de edad, guardó reclusión en la Agrupación Especializada desde el 3 de agosto de 1989, pero fue puesto en libertad el 10 de abril del 2014 tras cumplir el cuarto de siglo impuesto.

OTROS PROCESOS

Almada Morel contó con al menos 22 procesos impulsados por el Comité de Iglesias por crímenes de lesa humanidad y otros.

El 1 de septiembre de 1999 recibió 25 años de cárcel por el homicidio de los hermanos Rodolfo y Benjamín Ramírez Villalba. En este caso fue beneficiado con la libertad por la compurgación de pena mínima (12 años y 6 meses), pero no abandonó la prisión al tener la condena del caso Schaerer Prono encima.

También recibió pena máxima por la desaparición de Carlos José Mancuello y Amílcar Oviedo (septiembre de 1976), según explicó el abogado Rodolfo Aseretto.

Pero no todas fueron malas para Almeda Morel, también tuvo sus victorias en Tribunales. En la primera década del nuevo milenio fue sobreseído en otros procesos de igual naturaleza, alguna que otra por “dejadez” del Ministerio Público.

CASO CELESTINA PÉREZ

En diciembre de 2019 nuevamente Almada Morel fue condenado a siete años de cárcel por la muerte de Celestina Pérez de Almada, esposa del activista Martín Almada, querella que comenzó en 1989.

Martín Almada indicó que ‘Sapriza’ causó la muerte de Celestina al hacerle llamadas telefónicas durante las sesiones en que él era torturado, donde le hacía escuchar los gritos y que en una ocasión le llevaron su ropa ensangrentada, lo que terminó por ocasionarle un infarto a la mujer, el 6 de diciembre de 1974.

Sobre este mismo caso, en agosto del 2020, la Sala Penal de la Corte rechazó un hábeas corpus preventivo a favor Almada Morel planteado por el abogado Emigdio Allendre Morel, quien argumentó que el proceso arrancó tras la caída de la dictadura, con lo que a la fecha llevaba ya 31 años. Según alegó, el 29 de julio de 1997 se le dio a su cliente la libertad por compurgamiento de pena mínima, con lo que señala que ya cumplió la pena. Además, apuntó que ya “sobrepasa los 70 años”, por lo que no se le puede dar prisión preventiva por la edad. También se habló de las dolencias que tiene por la edad, y que estaría en peligro en la cárcel por el Covid-19. La Sala Penal de la Corte advirtió en aquel momento que Almada Morel estaba en rebeldía (2020) y que, si quería pedir a la Justicia, debía ponerse a disposición.

Así, entre idas y vueltas, finalmente el 9 de abril de 2022 se informó sobre la muerte de ‘Sapriza’, en el hospital policial Rigoberto Caballero, por “problemas de salud”.

MÁS QUE CIFRAS

La dictadura stronista se saldó con 18.772 torturados, 59 ejecutados extrajudicialmente, 336 desaparecidos, 3.470 exiliados, 107.987 víctimas indirectas, entre familiares y allegados, y 7.851.295 hectáreas de tierras malhabidas, según un estudio de la Comisión Verdad y Justicia (CVJ).

Todavía existen al menos 600 torturadores libres de culpa y pena.

“Quien olvida su historia está condenado a repetirla” – Jorge Agustín Nicolás Ruiz de Santayana.


Yuyú, cincos años sin rastros y aún persiste el milagro

El 15 de abril del 2020, la pequeña Juliette desapareció misteriosamente de su ciudad Emboscada. A cinco años, muchos misterios giran alrededor del hecho. Se realizaron más de 40 allanamientos, rastrillajes, declaraciones a testigos, una sola persona fue condenada, pero nada se sabe de ella, ¿dónde está Yuyú?

Juliette, más conocida como Yuyú, fue vista por última vez jugando con los animales en inmediaciones de su casa ubicada en la compañía Isla Alta de la ciudad de Emboscada, en el departamento de Cordillera.

El caso conocido como “la niña de Emboscada” llenó a todos los paraguayos de preguntas que hasta el momento siguen sin responderse. Momentos dramáticos y de incertidumbre giraron alrededor de la pequeña.

Desapareció repentinamente, nadie vio quién la llevó o para dónde fue. Desde ese 15 de abril del 2020 comenzó una intensa búsqueda por hallar a la pequeña con vida, pero su madre Lilian Zapata y su padrastro Reiner Oberuber se llamaron al silencio, las sospechas giraron hacia ambos.

Cabe destacar que Juliette tiene una discapacidad, la cual le impide comunicarse, es por eso que nadie pudo escucharla gritar, al menos es lo que señalaron los testigos.

Lilian, la mamá, declaró que ese día de la desaparición, ella se encontraba en la cocina y desde la ventana, controlaba a Juliette, veía que la niña jugaba con las cabras, pero no supo responder en qué momento la perdió de vista.

Reiner, el padrastro, por su parte, declaró que, al momento de su desaparición, él fue a una agroveterinaria y al regresar, ya encontró a Lilian en búsqueda de su hija.

Muchas contradicciones en las declaraciones de ambos despertaron suspicacias en los investigadores, por lo que, ambos fueron imputados por el Ministerio Público.

Desde ese momento, muchas hipótesis se manejaron, trata de menores, tráfico de órganos, homicidio y desaparición, accidente, pero ninguna fue corroborada hasta ahora.

Varios operativos se realizaron, pero todos sin éxito. Solo la madre de la pequeña. Lilian Zapata, fue condenada en el 2023 a 6 años de prisión por abandono y violación al deber del cuidado, y está recluida en el penal de Buen Pastor. En tanto, el padrastro Reiner Oberuber, acusado primeramente por pornografía infantil, fue absuelto de culpa.

Pasaron cinco años y las autoridades continúan investigando, quizás no con la misma intensidad, pero sí con el mismo deseo de todos los paraguayos: que aparezca viva.