EEUU e Israel acuerdan un plan para Gaza y Hamás promete estudiarlo
El presidente Donald Trump y el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu anunciaron este lunes un acuerdo sobre un plan de paz para Gaza propuesto por el mandatario estadounidense, y que ahora queda pendiente de la reacción del movimiento Hamás, que aún tiene decenas de rehenes en su poder.
Fuente: AFP
Trump está dispuesto a presidir un comité de transición para el territorio palestino, según los detalles del pacto, bien acogido por países árabes.
“Estamos como mínimo muy, muy cerca (...) y quiero agradecer a Bibi por realmente involucrarse y hacer su trabajo”, dijo Trump a los periodistas, refiriéndose a Netanyahu por el diminutivo de su nombre.
A su lado, Netanyahu declaró su apoyo a ese plan “para poner fin a la guerra en Gaza, que logra nuestros objetivos bélicos, [que] traerá de vuelta a Israel a todos nuestros rehenes, desmantelará las capacidades militares de Hamás, pondrá fin a su gobierno político y garantizará que Gaza nunca vuelva a representar una amenaza para Israel”.
La rueda de prensa, en la que no se aceptaron preguntas, fue una reiteración de la alianza diplomática histórica entre ambos países, puesta a prueba de manera decisiva tras el ataque de Hamás del 7 de octubre de 2023 en el sur de Israel.
Ese ataque provocó una dura respuesta militar de Israel, que ha devastado la Franja y ha causado más de 66.000 muertos.
“Buena fe”
Catar y Egipto entregaron el plan a Hamás, afirmó a la AFP un responsable enterado de las negociaciones.
“Los negociadores de Hamás declararon que examinarán de buena fe y darán una respuesta”, afirmó esta fuente bajo condición de anonimato.
La Autoridad Palestina, enemistada con Hamás, “recibe favorablemente los esfuerzos” de Trump, mientras que ocho países árabes y musulmanes también acogieron favorablemente la iniciativa.
Por el contrario la Yihad Islámica, otro de los grupos activos en Gaza y que cuenta con rehenes en su poder, consideró que el plan es “una receta para una agresión”.
Israel puede contar con el “apoyo total” de Estados Unidos para continuar con sus operaciones si Hamás no acepta el pacto, advirtió Trump.
Israel “mantendrá su responsabilidad sobre la seguridad” de ese minúsculo territorio enclavado entre su territorio y el de Egipto, explicó Netanyahu.
La Autoridad Palestina “no tiene ningún papel” en todo este proceso a no ser que emprenda “cambios radicales”, advirtió.
Trump está dispuesto a presidir el “comité de transición” junto a personalidades como el ex primer ministro británico Tony Blair.
El plan también contempla, una vez desarmado Hamás, “una fuerza de estabilización internacional temporal”, indicó.
Según medios de prensa, a cambio Israel liberaría a más de 1.000 prisioneros palestinos, incluidos algunos condenados a cadena perpetua.
Netanyahu había afirmado el viernes en un mensaje desafiante en la tribuna de la Asamblea General de Naciones Unidas que aceptar la creación de un Estado palestino sería un “suicidio nacional” para su país, y aseguró que quería “terminar el trabajo” en Gaza “lo más rápido posible”.
Trump había mostrado recientemente signos de frustración ante una guerra que comenzó hace casi dos años.
El presidente estadounidense advirtió a Netanyahu la semana pasada contra el plan de anexionar Cisjordania, como piden algunos miembros del gabinete del primer ministro israelí, y también se opuso al reciente ataque de Israel contra dirigentes de Hamás en Catar, un aliado clave de Estados Unidos.
Durante el encuentro en la Casa Blanca, Netanyahu llamó personalmente al primer ministro de Catar para disculparse por ese ataque y mostrar su “profundo pesar” por la muerte de un guardia de seguridad catarí.
La guerra en Gaza estalló tras el ataque de Hamás el 7 de octubre de 2023 en Israel, que mató a 1.219 personas, en su mayoría civiles, según un recuento de AFP a partir de cifras oficiales israelíes.
De las 251 personas secuestradas durante el ataque, 47 siguen retenidas en Gaza, de las cuales 25 están consideradas muertas por el ejército israelí.
Justicia rechaza apelación de Bolsonaro y confirma condena de 27 años
La Corte Suprema de Brasil votó este viernes por unanimidad para rechazar una apelación y mantener la condena a 27 años del expresidente Jair Bolsonaro por intentar un golpe de Estado tras las elecciones de 2022.
El líder ultraderechista fue hallado culpable en septiembre de haber operado para impedir la asunción del izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva tras perder los comicios.
En la apelación, los abogados alegaron “profundas injusticias” y “contradicciones” en el fallo que tiene al político de 70 años cerca de ir a la cárcel. La defensa reclamó supuestos obstáculos para ejercer su función durante el juicio y buscaba reducir la pena.
Los cuatro magistrados de la primera sala del Supremo Tribual Federal votaron en contra del recurso, en una sesión que transcurre de modo virtual.
El resultado no será oficial hasta finalizado el plazo establecido por el tribunal, a la medianoche del 14 de noviembre.
- Rechazo total -
El juez Alexandre de Moraes, a cargo del caso, fue el primero en pronunciarse y rechazó todos los argumentos de la defensa.
En un extenso documento de 141 páginas al que accedió la AFP, Moraes reiteró el papel de Bolsonaro como líder de una organización criminal que, junto a varios colaboradores, conspiró para atentar contra el estado de derecho democrático.
También reafirmó su actuación como instigador de los actos del 8 de enero de 2023, cuando cientos de sus seguidores asaltaron las sedes de los poderes públicos en Brasilia.
El magistrado negó la existencia de “cercenamiento de defensa”, señalando que todas las pruebas fueron puestas a disposición de los abogados.
Y descartó reducir el castigo, argumentando incluso que la avanzada edad de Bolsonaro ya había sido considerada como un factor atenuante.
“La sentencia fundamentó todas las etapas del cálculo de la pena”, escribió Moraes.
Los otros tres jueces votaron en el mismo sentido a lo largo del día.
El exmandatario (2019-2022) espera la decisión en prisión domiciliaria preventiva y con prohibición de dar declaraciones públicas o usar redes sociales.
Si el resultado es desfavorable, aún cabe otra apelación, pero esta puede ser rechazada sin ser sometida a votación.
En ese caso, la condena empezaría a aplicarse y Bolsonaro podría entrar en prisión.
Por sus problemas de salud, la defensa puede solicitar a la corte que le permita cumplir su condena en casa, tal como ocurrió con el expresidente Fernando Collor de Mello (1990-1992).
Este obtuvo en mayo prisión domiciliaria para una condena de ocho años por corrupción.
Bolsonaro sufre varias complicaciones derivadas de una puñalada en el vientre que recibió en 2018 durante un acto de su campaña a la presidencia. Además fue diagnosticado recientemente con cáncer de piel, aunque le removieron las lesiones.
- Apoyos -
Tras la condena, el bolsonarismo impulsó un proyecto de ley de amnistía en el Congreso que beneficiaría al expresidente y a los participantes de los disturbios de aquel 8 de enero.
Sin embargo, la iniciativa se desinfló después de grandes protestas en varias ciudades de Brasil.
El proceso contra el mayor líder de la derecha brasileña avanza mientras Brasil y Estados Unidos recomponen su relación bilateral, tensionada precisamente por este juicio.
Una campaña en Estados Unidos del diputado Eduardo Bolsonaro, hijo del exmandatario, contribuyó a que Donald Trump impusiera aranceles punitivos de 50% a exportaciones brasileñas.
Lula se encontró con Trump en octubre en Malasia para conversar sobre los aranceles y anticipó “buenos acuerdos para ambos países”.
El jueves, Eduardo Bolsonaro se reunió en Washington con el primer ministro húngaro, el ultraconservador Viktor Orban, quien le expresó su apoyo “firme” a la familia.
“¡Sigan luchando!: las cacerías de brujas políticas no tienen cabida en la democracia”, escribió Orban en X.
Fuente: AFP.
Indignación en Francia por declaraciones de Macron sobre el acuerdo UE-Mercosur
Representantes de distintos sectores políticos franceses reiteraron este viernes su rechazo al acuerdo UE-Mercosur y criticaron las declaraciones del presidente Emmanuel Macron quien la víspera dijo sentirse “más bien optimista” sobre la posibilidad de aceptarlo.
Fuente: AFP
“Soy más bien optimista, pero me mantengo vigilante porque también defiendo los intereses de Francia”, declaró Macron a periodistas el jueves al margen de la cumbre de jefes de Estado que precede a la COP30 en Belém, Brasil.
Los agricultores y ganaderos franceses temen que su mercado se vea inundado de carne, azúcar o arroz procedentes de Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay, en el marco del acuerdo UE-Mercosur.
Bruselas espera obtener el aval de los Estados europeos antes de finales de diciembre, mientras el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, ocupe la presidencia rotatoria del Mercosur.
“Este acuerdo, finalizado en la opacidad y que atenta directamente contra los intereses de la agricultura francesa, debe ser rechazado”, declaró Marine Le Pen, líder del partido ultraderechista Reagrupamiento Nacional (RN), en la red social X.
“Después de la industria, ahora es nuestra agricultura la que (el jefe de Estado) acepta malvender”, criticó en la misma red social el presidente de Los Republicanos (derecha), Bruno Retailleau.
“¡Un presidente tan desacreditado debería callarse y dejar que el Parlamento decida!”, ironizó por su parte el secretario nacional del Partido Comunista Francés (PCF), Fabien Roussel.
Macron “está firmando la sentencia de muerte de la agricultura francesa”, lamentó la eurodiputada de La Francia Insumisa (izquierda radical), Manon Aubry, criticando el “giro inaudito y escandaloso” del jefe de Estado, quien “decía que se opondría a este acuerdo de libre comercio”.
En su visita a México el viernes, Macron reaccionó a las críticas y dijo que Francia mantiene “la vigilancia” sobre el acuerdo.
Francia espera “respuestas claras” sobre el pacto, insistió durante una rueda de prensa junto a la presidenta mexicana Claudia Sheinbaum.
Ofensiva antinarco de EEUU ya deja 70 muertos en el Caribe
Un nuevo ataque estadounidense a otra presunta lancha con drogas en el Caribe dejó el jueves tres personas muertas, según el jefe del Pentágono, con lo que el saldo de la ofensiva de Washington contra el narcotráfico en aguas internacionales asciende a al menos 70.
Washington comenzó a llevar a cabo a principios de septiembre este tipo de operaciones apuntando a embarcaciones en aguas caribeñas y del Pacífico oriental. Algunos expertos han advertido que equivalen a “ejecuciones extrajudiciales”, incluso si apuntan a traficantes conocidos.
Según el secretario del Departamento de Guerra, Pete Hegseth, quien publicó imágenes aéreas del ataque en la red social X, la nueva acción tuvo lugar en aguas internacionales y estaba dirigida a “una embarcación operada por una Organización Terrorista Designada”.
El video muestra una lancha navegando antes de explotar en llamas.
“Tres narcoterroristas masculinos -que estaban a bordo de la embarcación- murieron”, agregó Hegseth, sin dar más detalles.
Con este balance, el número de fallecidos que deja la campaña antinarcóticos de Estados Unidos se eleva a al menos 70.
- “Amenazan nuestra patria” -
Washington ha destruido durante su campaña al menos 18 naves hasta ahora: 17 barcos y un semisumergible, si bien aún no muestra pruebas de que sus objetivos fueran narcotraficantes o representaran una amenaza para el país.
“A todos los narcoterroristas que amenazan nuestra patria: si quieren seguir vivos, dejen de traficar drogas. Si siguen traficando drogas mortales, los mataremos”, añadió el jefe del Pentágono.
La administración del presidente Donald Trump ha reposicionado fuerzas en América Latina, en lo que dice ser una medida para erradicar el tráfico de drogas.
Ha desplegado seis barcos de la Marina en el Caribe, enviado aviones furtivos F-35 a Puerto Rico y ordenado al grupo de ataque del portaviones USS Gerald R. Ford a ir a la región.
Estados Unidos también ha realizado demostraciones de fuerza cerca de Venezuela, sobrevolando el mar Caribe frente a la costa del país en al menos cuatro ocasiones desde mediados de octubre.
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, ha acusado repetidamente a Trump de intentar derrocarlo.
El izquierdista, señalado de cargos de narcotráfico por Estados Unidos, insiste en que no hay cultivos de drogas en su país.
- “Conflicto armado” -
La administración de Trump ha informado al Congreso que Estados Unidos está involucrado en un “conflicto armado” con los cárteles de drogas latinoamericanos.
Los describe como “grupos terroristas” para justificar los ataques.
Los gobiernos y familias de víctimas de los ataques estadounidenses afirman que muchos de los fallecidos eran civiles, principalmente pescadores.
El jefe de Derechos Humanos de Naciones Unidas, Volker Turk, ha dicho que las muertes han ocurrido “en circunstancias que no encuentran justificación en el derecho internacional”.
Fuente: AFP