Eran aproximadamente las 9:00 cuando Mario Luis recibió una llamada telefónica en la dirección del Colegio San José. Era un hombre que se identificó solo como “Canata” y que le dijo al joven que su madre tuvo un accidente y que iban a ir por él al colegio para retirarlo. Así fue que el alumno dejó la institución, para nunca más volver. Ese 22 de marzo de 1982 Mario Luis desapareció y solo su cuerpo torturado y sin vida aparecería el 28 de marzo de ese año, tirado en un baldío del barrio Maramburé de Luque.

El menor fue reconocido por una pulsera de plata que tenía su nombre y su uniforme del colegio San José, ya que su rostro quedó totalmente desfigurado con ácido.

El secuestro duró una semana, los que se llevaron a Mario Luis nunca pidieron un rescate o llamaron a la familia para una negociación. El fin del hecho no era cobrar dinero, sino cobrar una venganza. Muchas hipótesis se tejieron por esos años, se habló que el crimen tuvo un tinte homosexual y que el niño pagó por el “pecado” de otros.

La policía stronista liderada por Pastor Coronel tomó este hecho como punta de lanza para iniciar una cruenta persecución a la comunidad homosexual que para esos años estaba oculta en la sociedad, justamente por el temor a represalías violentas.

Como único sospechoso del horrendo final del muchacho fue detenido Reinaldo Chamorro Chávez, a quien se sindica como el autor del crimen y tras un proceso judicial fue condenado a 30 años de cárcel. El 27 de junio de 2003 el hombre murió tras las rejas de la cárcel de Tacumbú. Nunca mostró arrepentimiento del hecho y tampoco contó detalles del mismo, se llevó todos los secretos de lo ocurrido a la tumba.

Durante su juicio Chamorro Chávez, lo único que dijo fue que fue contratado para secuestrar y matar a Mario Luis, por el arquitecto José Luis Emilio Fiore Canata, quien fue condenado a nueve años de prisión, pero luego el mismo Chamorro Chávez se desmintió de sus dichos y el arquitecto fue liberado, muriendo en el 2021.

Mario Luis Palmieri de Finis fue la primera víctima de un secuestro con fines de venganza en Paraguay.

Una fuerte tormenta, con intensas ráfagas de viento, azotó este domingo diversas regiones del país, entre ellas el departamento de Itapúa, causando destrozos en varias localidades.

En respuesta a la emergencia, el Ministerio de Defensa Nacional informó que tres camiones del Ejército Paraguayo saldrán este lunes para brindar apoyo a las labores de asistencia, coordinadas por la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN).

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Dichos móviles -cuya salida está prevista para las 08:00 hs desde el Cuartel General del Comando del Ejército- se encargarán de transportar chapas, puntales y terciadas a las zonas afectadas.

Las localidades que serán asistidas en principio son Carmen del Paraná, La Paz, Nueva Alborada, Cambyretá, así como Encarnación, donde actualmente se tienen reportes de daños provocados por el fenómeno climático.

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Además de destechar varias viviendas, el temporal dejó a su paso la caída de árboles y postes de la ANDE, lo cual a su vez provocó cortes en el suministro de energía eléctrica en varios puntos del territorio nacional.

Desde la SEN continuarán llevando a cabo un relevamiento de datos en las próximas horas, a fin de determinar la cantidad exacta de familias damnificadas y así poder gestionar el envío de asistencia.

Durante un operativo policial llevado a cabo ayer en el Km 8 Acaray de Ciudad del Este, se logró la detención de Iván Junior Marquez.

Este sujeto, de nacionalidad brasileña, fue denunciado por haber privado ilegítimamente de su libertad a dos estudiantes de Medicina, también brasileñas.

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El fiscal Gabriel Segovia confirmó al canal C9N que, según la denuncia, el hombre retuvo en contra de su voluntad a las dos mujeres y exigió la entrega de 50.000 reales a sus familiares para liberarlas.

En un principio, el acusado se presentó como arquitecto y contactó con una de las victimas a través de redes sociales, tras lo cual empezaron a compartir departamento y dividirse los gastos.

Días atrás se habrían dado ciertos conflictos y, al llegar el jueves, Marquez mostró sus verdaderas intenciones al mantener en cautiverio a sus compatriotas para así obtener un rédito económico.

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Luego de su detención, se pudo constatar que el hombre cuenta con antecedentes penales en el vecino país, además de un mandato de prisión. De momento, no se pudo confirmar si es que pertenece o no al PCC, como se manejó en un primer momento.

En su desesperación, las familias de estas estudiantes llegaron a realizar transferencias de dinero, aunque las mismas fueron a las cuentas de las víctimas, por lo que no llegaron a ser efectivizadas, precisó el fiscal.

Cerca de las 09:00 hs de este domingo se registró una agresión y posterior homicidio en una estación de servicios del emblema Puma, situada en el Km 14 lado Monday de Minga Guazú, Alto Paraná.

Resultó víctima fatal Roberto Cabaña Rotela, de 36 años, quien sufrió una fuerte contusión a la altura de la cabeza que le causó la muerte.

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Los datos refieren que este hombre se encontraba compartiendo una ronda de tragos con otras personas en el surtidor cuando se produjo una acalorada discusión.

Ello derivó en una gresca con otro sujeto, identificado como Rodrigo Cabrera Báez (23), quien, en un arranque de ira y ya bajo los efectos del alcohol, decidió golpearlo con una piedra que tenía en la mano.

A raíz del fuerte golpe, Cabaña perdió el conocimiento y cayó al suelo. Posteriormente, bomberos voluntarios se encargaron de asistirlo y trasladarlo al Hospital Distrital de Minga Guazú, donde constataron su deceso.

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El médico forense del Ministerio Público determinó como probable causa de muerte un traumatismo de cráneo encefálico, detalla el informe.

Las imágenes de circuito cerrado que captaron la escena permitieron dilucidar las circunstancias en que ocurrieron los hechos e identificar plenamente al autor, quien luego de unas horas fue detenido por la Policía Nacional.