Una mujer rusa asesinó a su esposo “por accidente” sentándose sobre su cabeza y estrangulándolo hasta matarlo durante una pelea mientras estaban borrachos. Tatyana O., de 45 años, supuestamente se negó a liberar a su marido, Aidar, incluso cuando él le “suplicó perdón”.

La hija de Aidar lo encontró inmovilizado boca abajo en la cama y corrió a buscar ayuda de los vecinos en la ciudad rusa de Novokuznetsk. Según los informes, una vecina que vio la escena explicó que la pareja estaba en medio de una pelea doméstica.

Cuando llegó la ambulancia, Aidar ya estaba muerto. Ante la Policía, Tatyana afirmó que simplemente quería calmar a su esposo después de haber estado bebiendo alcohol.

El hombre murió de “asfixia por bloqueo del sistema respiratorio”. De acuerdo a las pericias, Tatyana se sentó sobre el cuello de su marido, que estaba boca abajo y tenía su rostro aplastado contra el colchón. “Usó sus piernas para que no pudiera levantarse”, explicó un especialista.

La esposa “estranguló a su marido hasta la muerte con sus nalgas después de beber demasiado alcohol”, concluyó el informe policial.

Durante un juicio, Tatyana fue condenada por causar la muerte por negligencia después de que se retirara un cargo de asesinato, ya que aparentemente “no tuvo intención de matarlo”. No fue a la cárcel, pero la sentenciaron a 18 meses de trabajo comunitario y se le ordenó pagar alrededor de 3000 dólares por “daños morales”.

Una particular situación vivió un usuario de la red social TikTok, que fue a bailar con sus amigos y grabó el momento en el que uno de ellos decidió hacerle un regalo millonario a su exnovia.

@lucasslazaroo secuencia post boliche se re pudrió mal , like para parte !!!! #jodas #parati #humor #boliche ♬ sonido original – lucasslazaroo

El asunto es que Lucas sacó su teléfono y mostró como Sebastián le transfirió $45000 a Martina. En tanto, el video se volvió viral y recibió un sinfín de comentarios. A través de su cuenta @lucasslazaroo, filmó el insólito “obsequio” que su amigo le hizo a la expareja. “Yo la amo a Martina”, dijo mientras entraba a la billetera virtual que tenía en su celular. “Le voy a pasar 45 lucas”, gritó mientras Lucas intentaba sacarle el teléfono.

Dos desconocidos se acercaron a ver qué pasaba y el tiktoker comentó: “Le transfirió 50 lucas a la ex”. “Alto descanso”, acotó uno de ellos. “¿Sabés cómo yo la amo?”, retrucó Sebastián. “Transferimelo a mí, la c… de tu madre”, gritó Lucas.

“No lo puedo creer, ni eso gastó en el boliche”, sostuvo el usuario que estaba filmando la secuencia. Antes de terminar la grabación, compartió un pedazo de tortilla con los chicos que se acercaron hasta ellos. El video se viralizó y recibió 338 reproducciones y 31 mil “me gusta”.

La publicación llegó hasta Martina, la exnovia de Sebastián y comentó: “Tranqui, ya se lo devolví”. “Mi ex no me pagaba ni la cena”, acotó otra seguidora. “Qué ganas de ser Martina”, agregó otra tiktoker.

Las sirenas son un ser mitológico caracterizado por ser mitad humano y mitad pez. Tradicionalmente, se retratan como mujeres hermosas, y su presencia en la cultura popular y en películas como ‘La Sirenita’ han vuelto a estas criaturas un ser adorado por niños y niñas.

Es por eso que muchos establecimientos con shows acuáticos contratan a nadadoras profesionales para disfrazarse de sirenas, interactuar con niños al otro lado del cristal y brindar experiencias mágicas. Sin embargo, estas maniobras no siempre salen bien.

Tal es el caso de un video que se volvió viral recientemente en redes sociales, protagonizado por una mujer disfrazada de sirena, a quien se le atora el vestuario en una roca, suceso que estuvo cerca de causarle la muerte.

El clip fue originalmente publicado por un hombre llamado Zizwe Ndwandwe en el sitio web Storyful, y documenta los hechos ocurridos en una instalación que simula un acuario, dentro de lo que parece ser un centro comercial en Cresta, Sudáfrica, frente a más de una docena de personas viendo el espectáculo.

Para darle un toque fantástico al acto, una mujer disfrazada de sirena nadaba entre peces y alrededor de una estructura rocosa que imitaba un arrecife de coral. Sin embargo, después de bajar mucho para saludar a un niño del público, ocurrió lo peor: su cola se atoró en una roca.

La mujer no se dio cuenta hasta que intentó nadar hacia la superficie para tomar aire, y se percató de que, aunque nadara, su cuerpo no subía.

Fue ahí cuando empezó a hacer movimientos desesperados con sus brazos y piernas, hasta que, segundos después, cayó en cuenta de que lo que estaba atascado era su disfraz, así que procedió a quitárselo y nadar hacia la superficie, salvándose por poco de morir ahogada.

Cabe aclarar que, como evidencian sus movimientos, la mujer era una profesional entrenada en natación, y preparada para este tipo de situaciones. El accidente, más que una falla, fue fruto de una situación impredecible a la que, afortunadamente, la artista supo responder con rapidez.

El extraño suceso ocurrió en Brasil, al momento que una pareja ingresó a una panadería, donde se supone que la empleada se refirió al hombre como «mi amor», frente a la esposa del mismo.

El calificativo desencadenó la ira de la mujer, quien reaccionó violentamente tomando por el pelo a la empleada de la panadería.

Acto seguido, comenzó a destruir lo que había en la panadería hasta el punto de arrancar un extintor de la pared para continuar su escándalo.

En ese momento, varios empleados del negocio proceden a someterla para que dejara de causar alboroto.

Finalmente, los trabajadores lograron sacar a la celosa brasileña a la calle. Sin embargo, ella quería continuar la pelea. Hasta el momento se desconoce si la Policía detuvo  la mujer por escándalo en vía pública.