Ola de calor asfixia a millones de mexicanos

Mientras Roberto se esfuerza por trabajar bajo un sol implacable, Wendy batalla para que la comida no se le pudra. La ola de calor que golpea a México deja ocho muertos y trastoca la vida de millones de personas. 


Fuente: AFP

Roberto de Jesús, de 50 años, ofrece sus servicios como albañil en el flanco izquierdo de la Catedral Metropolitana, en pleno centro histórico de Ciudad de México, que esta semana alcanzó temperaturas récord de 35 grados centígrados.

Y ahora lidia con la tercera ola de calor que impacta al país en lo corrido del año y que podría durar dos semanas más.

Es mediodía y el sol caldea el asfalto y la roca de los edificios de la atiborrada capital. La muchedumbre, más las emisiones de los autos y negocios de la zona, crean un ambiente agobiante.

El calor “realmente sí cala, se siente muy pesado. Al estar esperando la chamba (el trabajo) da hasta sueño”, comenta De Jesús. “Por lo mismo, a veces estamos muy deshidratados”.

El hombre permanece entre ocho y nueve horas diarias de pie a la espera de clientes, aunque lo más duro es cuando tiene que trabajar en el exterior a merced del calor. “Estamos muy sofocados”, dice.

Pero no solo laborar se hace tortuoso. Comer en puestos callejeros, un hábito querido y popular entre los mexicanos, implica ahora un alto riesgo pues el intenso calor descompone rápidamente los alimentos.

De Jesús lo comprobó recientemente. “Me enfermé del estómago, cuenta. “Fueron unos tacos que me comí en la calle (…) Eso fue lo que me descompuso”, dice el albañil, quien pasó tres días convaleciente.

 

– “Horrible calor” –

 

Pero los taqueros callejeros no son los villanos, pues además de las altas temperaturas deben trabajar entre planchas y fogones ardientes.

“Está horrible el calor”, dice Javier Ramos, de 30 años, encargado de preparar tacos en un puesto de la Alameda Central.

“Hay que estarse hidratando todo el día”, señala, refiriéndose a la jornada laboral de 15 horas en las que él y sus compañeros arman el puesto, cocinan y atienden al público.

Parte del protocolo es contar con carne fresca e ingredientes preparados “al día”, además de guardar los insumos en hieleras “y no combinar la carne con la verdura”, explica Ramos.

Ubicada también alrededor de la catedral, Natividad Flores, de 40 años y vendedora de ropa artesanal, cree que “estamos viendo las consecuencias del cambio climático”.

Protegida con guantes, sombrero de ala ancha, bloqueador solar “y mucha agüita”, Flores aprovecha para vender prendas “muy frescas” para “soportar el calor”.

“Nos da el mareo, un poquito la insolación también”, dice.

 

– Más de 40 ºC –

 

Siete personas fallecieron por golpe de calor y una por deshidratación entre el 14 de abril y el 12 de junio, según el gobierno. Tres murieron en Veracruz (este), dos en Quintana Roo (sureste), dos en Sonora (norte) y una en Oaxaca (sur).

En Monterrey, una próspera urbe del noreste, el clima impone condiciones cruentas, con temperaturas que rebasan los 40 ºC.

Parte del protocolo es contar con carne fresca e ingredientes preparados “al día”, además de guardar los insumos en hieleras “y no combinar la carne con la verdura”, explica Ramos.

Ubicada también alrededor de la catedral, Natividad Flores, de 40 años y vendedora de ropa artesanal, cree que “estamos viendo las consecuencias del cambio climático”.

Protegida con guantes, sombrero de ala ancha, bloqueador solar “y mucha agüita”, Flores aprovecha para vender prendas “muy frescas” para “soportar el calor”.

“Nos da el mareo, un poquito la insolación también”, dice.

 

– Más de 40 ºC –

 

Siete personas fallecieron por golpe de calor y una por deshidratación entre el 14 de abril y el 12 de junio, según el gobierno. Tres murieron en Veracruz (este), dos en Quintana Roo (sureste), dos en Sonora (norte) y una en Oaxaca (sur).

En Monterrey, una próspera urbe del noreste, el clima impone condiciones cruentas, con temperaturas que rebasan los 40 ºC.

La ciudad, que padeció una sequía histórica el año pasado, experimenta una preocupante disminución en la presión del agua de los hogares, mientras la elevada demanda de electricidad por el uso de aire acondicionado ha generado cortes de suministro.

Wendy Tijerina, vecina del municipio de Apodaca, asegura que el calor pega más allí por ser una zona industrial. “La sensación térmica es más fuerte, falta agua, no se puede bañar a los niños y ni siquiera [usar] un abanico (ventilador) porque cortan la energía”, cuenta a la AFP.

Comenta que el refrigerador ya no basta para conservar la comida y que procuran beber mucha agua para protegerse.

“Buscamos tener una hielera para poner también medicamentos que requieren refrigeración y los alimentos que son algo delicados”, agrega.

El gobierno estatal de Nuevo León, donde queda Monterrey, también dispuso que los niños tomen clases semipresenciales, asistiendo a las escuelas solamente dos horas diarias para evitar exponerse al severo clima.

 

Cerca de 50 empleados amenazan al Vaticano con demanda sin precedentes

El reclamo por malas condiciones laborales se centra en la falta de seguridad social, reporta Corriere della Sera.

Cerca de 50 empleados de los museos de la Ciudad del Vaticano han enviado una incendiaria carta a la administración del Estado en la que amenazan con llevar a la Santa Sede ante los tribunales si no se modifican las precarias condiciones de trabajo.

“Eminencia reverendísima, las condiciones de trabajo atentan contra la dignidad y la salud de cada trabajador. Es evidente la mala gestión, que sería aún más grave si obedeciera a la única lógica de obtener mayores beneficios”, indica la misiva, compartida por el diario italiano Corriere della Sera, y firmada por 49 empleados del Vaticano (sobre un total de 700) -entre ellos guardias de museos, un restaurador y un empleado de una librería.

Los trabajadores recurrieron a la reconocida abogada del Vaticano Laura Sgró. Según el periódico, ella envió la carta al cardenal español Fernando Vérgez Alzaga, presidente del Governatorato, el órgano que ejerce el poder ejecutivo en la ciudad-estado y del que dependen también los trabajadores de los museos. La demanda colectiva, si se llega a concretar, sería la primera conocida dentro de los muros de San Pedro.

¿Qué reclaman los trabajadores?

Básicamente, el reclamo se centra en la falta de seguridad social. “En el Vaticano no hay seguro de desempleo, no hay medidas de apoyo a los ingresos en caso de crisis o fases de desempleo total”, señala el texto.

En caso de enfermedad, por ejemplo, no hay franjas horarias para las visitas de control, por lo que los empleados tienen que permanecer en casa todo el día. “La visita puede producirse en cualquier momento. Se denuncian casos de empleados sancionados mientras estaban en el médico. Permanecer a disposición del empresario más allá de las horas es una violación de la dignidad de la libertad personal”, dice el documento.

De igual forma, se denuncia un grave incumplimiento en lo que respecta al trabajo en horas extraordinarias: “Después de seis horas de pie, hay que seguir trabajando cobrando menos”, reza el texto, “y el empleador abusa de este instrumento”. Tampoco habría criterios para la asignación de niveles y clases de méritos vinculados a la antigüedad. “Son propiedad absoluta del jefe, que los utiliza a su antojo. Reina la discriminación absoluta, un estado perpetuo de caos”, indican los trabajadores.

EEUU aumenta aranceles sobre USD 18.000 millones de productos chinos

Estados Unidos decidió aumentar los aranceles a productos procedentes de China valorados en 18.000 millones de dólares, apuntando a sectores estratégicos como vehículos eléctricos, baterías, acero y minerales críticos, informó este martes la Casa Blanca.

Las tasas sobre los vehículos eléctricos se cuadruplicarán, pasando del 25% al 100% este año, precisó la Casa Blanca a menos de seis meses para las elecciones presidenciales entre el presidente demócrata Joe Biden, candidato a su reelección, y su predecesor republicano Donald Trump.

Los aranceles de los semiconductores se duplicarán, del 25% al 50%, para 2025, añadió la Casa Blanca.

El objetivo es alentar a China a “eliminar sus prácticas comerciales desleales en materia de transferencia de tecnología, propiedad intelectual e innovación”, explicó la Casa Blanca en un comunicado.

La decisión se anunció una vez revisados los aranceles impuestos durante la guerra comercial librada entre Washington y Pekín, por la que Trump estableció aranceles sobre unos 300.000 millones de dólares en bienes procedentes de China.

Antes de publicarse oficialmente el anuncio de Washington, China ya advirtió que tomará “todas las medidas necesarias” contra la decisión y reiteró su oposición a los aumentos arancelarios “unilaterales” en violación de las normas de la Organización Mundial del Comercio, dijo en Pekín un portavoz del ministerio de Exteriores, Wang Wenbin.

Cuando llegó al poder Biden anunció que su administración revisaría los derechos aduaneros para determinar si debían continuar o no.

Un funcionario estadounidense subrayó que se mantienen y se les añaden los 18.000 millones de dólares anunciados el martes.

Más allá de los vehículos eléctricos y los semiconductores, Washington triplica los aranceles sobre algunos productos de acero y aluminio, y sobre las baterías y piezas de baterías de iones de litio para vehículos eléctricos.

La tasa arancelaria sobre el grafito natural y algunos otros minerales críticos aumentará de cero a 25%, y la de las células solares también se duplicará de 25% al 50%.

Algunos aumentos de aranceles, como los de las baterías de iones de litio que no son para vehículos eléctricos, entrarán en vigor más tarde para permitir un período de transición para incrementar la producción nacional de baterías, afirmó un alto cargo estadounidense que pidió el anonimato.

Washington acusa a Pekín de apoyar fuertemente a sus industrias en estos sectores considerados estratégicos, con importantes subvenciones que provocan una sobreproducción que las empresas chinas venden en el mercado mundial, reventando los precios. Esto impide el desarrollo de industrias competitivas.

- Medidas “simbólicas” -

Un temor compartido por la Unión Europea y otros países, como Turquía, Brasil o la India, subrayó un responsable estadounidense durante la rueda de prensa telefónica.

La administración Biden ha inyectado fondos masivos en áreas como la fabricación y la investigación de semiconductores y ha impulsado las inversiones verdes.

Pero según la principal consejera económica de Biden, Lael Brainard, Pekín impulsa su crecimiento “a expensas de otros”.

En una nota, los economistas de Oxford Economics estiman que las medidas anunciadas el martes son “más simbólicas que otra cosa”, desde el punto de vista de la economía estadounidense, y “no tendrán un impacto considerable sobre la inflación o el PIB estadounidenses”.

En cualquier caso estos aranceles pueden “reforzar las herramientas de que dispone el gobierno para acelerar la deslocalización o el +friendshoring+ (abastecerse en países cercanos geográfica o ideológicamente) de la producción de sectores considerados estratégicos”, declaró a la AFP Emily Benson, investigadora para el CSIS.

“Esto es una señal para los fabricantes estadounidenses de que la administración Biden quiere proteger la industria contra los vehículos eléctricos chinos”, afirmó a la AFP Paul Triolo, investigador especializado en China del grupo Albright Stonegridge.

El verdadero impacto para las compañías estadounidenses podría proceder de los derechos de aduana aplicados a las baterías y a las cadenas de suministro, “debido al dominio de las empresas chinas” en estos sectores, añadió.

Estados Unidos no teme que China tome represalias duras, aunque, según la secretaria del Tesoro, Janet Yellen, es “posible”.

Fuente: AFP

Lula admite que Brasil no “estaba preparado” para desastre en el sur

Nuevas crecidas de ríos y lagos prolongaron este lunes el drama de la población del sur de Brasil, adonde el presidente Luiz Inácio Lula da Silva viajará de nuevo el miércoles tras reconocer que las autoridades “no estaban preparadas” para una catástrofe así.

Fuente: AFP

Las cifras de víctimas del desastre climático que golpea el pujante estado de Rio Grande do Sul volvieron a aumentar este lunes, con 147 muertos, 127 desaparecidos y 806 heridos, así como 600.000 personas que debieron abandonar sus hogares, según Defensa Civil.

Lula suspendió una visita oficial a Chile, inicialmente prevista para el 17 y 18 de mayo, ante la necesidad de “monitorear” la emergencia, según la Presidencia. Y anunció que volverá el miércoles al estado por tercera vez en pocos días.

“Es una catástrofe para cuya magnitud no estábamos preparados”, dijo el mandatario, durante una reunión con su ministro de Finanzas, Fernando Haddad, y el gobernador del estado, Eduardo Leite.

A pesar de una disminución de las lluvias, Leite urgió a los evacuados a no regresar a las viviendas, en especial en la capital Porto Alegre y sus alrededores, donde el río Guaíba puede alcanzar un nuevo récord.

No es momento de volver a las casas todavía en las zonas de riesgo”.

La cota de este río, en cuyas riberas se ubican varias ciudades devastadas, superó los cinco metros por primera vez desde el jueves y sigue en ascenso debido a las lluvias del fin de semana. Según Defensa Civil, podría superar el pico histórico de 5,35 metros que alcanzó el 5 de mayo.