2014, Mal año para la salud pública

Las autoridades del campo de la salud están celebrando algunas victorias importantes en el 2014 y la revista Time incluso nombró al personal que combate el ébola como el personaje del año. Sin embargo, fue un año negativo para la salud pública.

NUEVA YORK (AP) — Algunas vacunas vitales no funcionaron bien. Laboratorios federales de Estados Unidos manejaron indebidamente patógenos peligrosos. Y funcionarios internacionales de salud pública no lograron detener en Africa Occidental un brote de ébola que se convirtió en el peor jamás registrado de esa enfermedad.

Esos fracasos ocurrieron durante uno de los 12 meses de más contagios en por lo menos una década. En Estados Unidos, enfermedades infecciosas parecieron atacar desde todos los ángulos, como el ébola, el enterovirus y el Síndrome Respiratorio del Medio Oriente (MERS). Las paperas afectaron a Ohio. California tuvo su peor brote de tosferina en 70 años. Y la chikungunya, una enfermedad que transmite un mosquito, hizo lo suyo en el Caribe y llegó a Estados Unidos.

La última vez que las autoridades de salud estadounidense tuvieron que hacer frente a una situación similar fue en el 2009, cuando una pandemia de influenza barrió el mundo. “Pero eso fue una enfermedad”, mientras que en 2014 hubo varios fuegos que controlar, dijo la doctora Marci Layton, del Departamento de Salud de Nueva York.

Los expertos dicen que la crisis de este año se debió a una combinación de factores. Muchos citan el impacto de los viajes internacionales, que pueden importar enfermedades raras de las selvas de Africa o los desiertos del Medio Oriente a un aeropuerto estadounidense en materia de horas.

“Si alguien necesitaba que lo convencieran, el 2014 mostró que una amenaza de enfermedades es válida en el mundo entero”, dijo el doctor Tom Frieden, director de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC).

Pero expertos dicen que este año otros factores fueron fallas y errores en el CDC y otras organizaciones de salud pública.

El mayor ejemplo fue la epidemia de ébola. En brotes anteriores hubo cientos de afectados. Para mediados de diciembre, funcionarios de salud reportaban que la epidemia de este año había afectado a más de 18.600 personas, principalmente en Guinea, Liberia y Sierra Leona, con un saldo de más de 6.900 muertos.

Esos tres países no estaban preparados cuando el ébola los visitó por primera vez. Los sistemas de salud pública eran débiles tras más de una década de guerra en la región. En muchas zonas había escasez de médicos y a veces confundía el ébola con la malaria en las primeras etapas de la enfermedad, y el nivel de servicios y control de la infección resultaron inadecuados.

Una de las campañas de asistencia fue liderada por la Organización Mundial de la Salud (OMS), de la ONU. Pero la OMS permitió que problemas burocráticos entorpecieran labores importantes, además de las dificultades causadas por la reducción de presupuesto y responsabilidades en otras regiones, concluyó posteriormente un informe interno de la OMS.

Durante meses, la OMS recibió ayuda limitada de varios países, y no fue hasta finales del verano —después que la epidemia estaba fuera de control— que Estados Unidos y otros países prometieron una mayor asistencia.

La respuesta internacional al brote fue inadecuada e incluso países desarrollados como Estados Unidos sucumbieron a la enfermedad.

El Centro de Control de Enfermedades de Estados Unidos (CDC) estaba a cargo de la respuesta al ébola e inicialmente parecía tener la situación controlada. La agencia envió equipos para ayudar en Africa Occidental. Frieden aseguró repetidas veces a los estadounidenses que no tenían que temer al ébola y que los hospitales eran capaces de aislar y manejar cualquier caso que llegara de Africa Occidental.

Pero el público perdió confianza después que a un visitante liberiano, Thomas Eric Duncan, le diagnosticaron ébola a finales de septiembre, días después de llegar a Dallas. Duncan falleció el 8 de octubre y dos enfermeras que lo atendieron en un hospital de Dallas se contagiaron.

No está claro cómo las enfermeras contrajeron el ébola, pero Frieden dijo posteriormente que debía haber enviado a Dallas un equipo más numeroso para ayudar a los trabajadores del hospital a evitar una mayor propagación del virus.

Además de Duncan, nadie más falleció de ébola en Estados Unidos y no se reportaron otros contagiados, pero Frieden fue duramente criticado por la forma en que el CDC manejó el caso.

Las enfermedades infecciosas se mantienen como amenaza y nadie debe pensar que el 2014 fue una excepción, dijo Michael Osterholm, experto en enfermedades infecciosas de la Universidad de Minnesota.

“Creo que esta será desde ahora la situación normal”, dijo.

No cabe duda que en el 2014 hubo éxitos en materia de salud pública. En Africa, aunque el ébola apareció en Nigeria, Senegal y Mali, fue controlado por la fuerte respuesta de salud pública. La enfermedad todavía causa estragos, particularmente en Sierra Leona, pero el Congreso de Estados Unidos tomó medidas para fortalecer el combate con la aprobación este mes de 5.400 millones de dólares para asistencia de emergencia.

Además, los trabajadores de salud que fueron a Africa Occidental mostraron un heroísmo poco común, como señaló la revista Time. “La respuesta al ébola ha sido extraordinaria” tanto en su alcance como en su valor, dijo Frieden.

Algunos expertos afirman que los errores del 2014 resultaron ser constructivos. Llevaron, por ejemplo, a una revisión exhaustiva de las prácticas en los laboratorios del CDC y a que los hospitales estadounidenses se emejor para hacer frente al ébola y otras enfermedades infecciosas que pudieran presentarse, dijeron.

“Creo que identificar problemas a veces es algo positivo”, dijo el doctor Jeff Duchin, funcionario de salud pública de Seattle y expertos nacionales en vacunas. “Creo que todo esto nos ayudó” a prepararnos para lo que venga.

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La NASA lanza una misión al asteroide ‘Dios del Caos’, que se aproxima a la Tierra

Imagen ilustrativa.

El Apophis pasará excepcionalmente cerca en el 2029.

La sonda espacial OSIRIS-REx de la NASA pasó por la Tierra a finales de septiembreentregó unas muestras de rocas y polvo recogidas del asteroide Bennu. De inmediato, y sin apagar sus motores, se embarcó en una misión adicional: estudiar el Apophis, un asteroide que se espera pase muy cerca de nuestro planeta en el 2029.

En este contexto, la NASA anunció el pasado viernes que la sonda ha sido rebautizada oficialmente como ‘OSIRIS-APEX’, acrónimo en inglés de Orígenes, Interpretación Espectral, Identificación de Recursos y Seguridad – Explorador Apophis. Además, Dani Mendoza DellaGiustina, quien fuera investigadora principal adjunta de la OSIRIS-REx, también estará al mando de esta nueva misión extendida.

El asteroide 99942 o Apophis, que debe su nombre al dios egipcio considerado la encarnación del caos, no chocará contra la Tierra, pero sí estará excepcionalmente cerca, a unos 32.000 kilómetros, el 13 de abril de 2029.

Esta distancia lo pone más cerca a nuestro planeta que algunos satélites y se prevé que eso no solo provoque cambios en su órbita, sino terremotos y deslizamientos en su superficie. “OSIRIS-APEX estudiará Apophis inmediatamente después de tal paso, permitiéndonos ver cómo cambia su superficie al interactuar con la gravedad de la Tierra”, dijo Amy Simon, científica del proyecto.

Asimismo, está dentro de los planes que, para el 2 de abril de 2029, las cámaras de la sonda comiencen a tomar imágenes del asteroide a medida que se acerque. Luego del encuentro cercano con la Tierra, operará en sus proximidades durante los 18 meses siguientes. En ese lapso llevará a cabo muchas de las mismas investigaciones que OSIRIS-REx realizó en Bennu, con el uso de instrumentos generadores de imágenes, espectrómetros, y un altímetro láser para mapear su superficie y analizar la composición química.

Si bien la entonces OSIRIS-REx recolectó agua y altas cantidades de carbono de Bennu, se estima que las muestras recogidas de Apophis sean bastante diferentes, ricas en silicato y níquel-hierro, materiales de los que están principalmente compuestos estos asteroides rocosos, denominados ‘tipo S’.

De acuerdo con la NASA, da la casualidad de que la mayoría de los asteroides potencialmente peligrosos conocidos también son de ese tipo. “Lo que el equipo aprenda sobre Apophis puede ofrecer información a la investigación de defensa planetaria, una de las principales prioridades de la NASA”, asegura la agencia.

Por otro lado, según explica Mendoza DellaGiustina, Apophis ayudará a los científicos a aprender más sobre cómo se forman los sistemas solares y los planetas. “Sabemos que las fuerzas de marea y la acumulación de escombros son procesos fundamentales que podrían desempeñar un papel en la formación de planetas. Podrían informar cómo pasamos de los escombros del sistema solar primitivo a planetas en toda regla”, explicó.

Se estima que asteroides del tamaño de este ‘Dios del Caos’, de unos 340 metros de diámetro, solo se acercan tanto a la Tierra una vez cada 7.500 años. “Aprendimos mucho en Bennu, pero ahora tenemos aún más preguntas para nuestro próximo objetivo”, dijo Simon.

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Fotos| Revelan terrible descubrimiento de una momia que murió en el parto

Momia egipcia de una adolescente que murió durante el parto.

Los restos de la fallecida pertenecen al período tardío de Egipto.

Los autores de un estudio revisaron a una momia egipcia, de una adolescente que murió durante el parto, después de más de un siglo, y le realizaron una tomografía computarizada del cuerpo, que reveló la presencia de un segundo feto en la cavidad torácica de la mujer, lo que indicaba que estaba embarazada de gemelos, según un artículo publicado en International Journal of Osteoarchaeology.

La cabeza del primer bebé quedó atrapada en el canal del parto, lo que provocó la muerte tanto de los bebés como de la madre, informó IFL Science.

El estudio descubrió que, al morir, la joven fue momificada junto con el niño, cuyos restos fueron colocados entre las piernas de la madre, a excepción de la cabeza, cuyos huesos quedaron dentro de la pelvis. Es decir, el niño fue decapitado durante el parto. 

La muerte del bebé y su madre probablemente ocurrieron debido al llamado parto de nalgas, donde el bebé sale con los pies primero, lo que hace el proceso mucho más complicado y peligroso.

Los investigadores suponen que con el tiempo el cuerpo de la fallecida se descompuso y el feto se desplazó desde el útero hasta la cavidad torácica.

La momia examinada pertenecía a una mujer de entre 14 y 17 años. Sus restos fueron encontrados en 1908 durante las excavaciones de la necrópolis de El Bagawat.

La joven pesaba entre 45 y 55 kilogramos. Los científicos estiman que la mujer tenía entre 34 y 40 semanas de embarazo cuando comenzó el parto.

Los restos de la fallecida pertenecen al período tardío de Egipto (desde el 664 a.C., hasta 332 a.C.), reza la anotación del estudio.

“Este examen de la madre y sus hijos al nacer reconfirma cuán peligrosos eran el embarazo, el parto y el alumbramiento, especialmente durante este período”, indicó el estudio. “El parto en el antiguo Egipto se consideraba un evento religioso, no médico”, explicaron los científicos.

“La mayor parte de la documentación descubierta describe hechizos y encantamientos recitados para proteger a la madre y al bebé durante y después del nacimiento“, sostuvieron los investigadores, al indicar que un hechizo alude a que el nacimiento de gemelos se veía de forma negativa.

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Descubren nueva evidencia de que una luna de Saturno podría albergar vida

Foto: NASA.

"Nuestro trabajo aporta más evidencia de que Encélado alberga algunas de las moléculas más importantes tanto para crear los componentes básicos de la vida como para mantener esa vida mediante reacciones metabólicas", señalan los científicos.

El Laboratorio de Propulsión a Chorro (JLP, por sus siglas en inglés) de la NASA informó este jueves que un grupo de investigadores había confirmado la presencia de nuevas moléculas orgánicas en una columna gigante de hielo y vapor que brota de la superficie de Encélado, una de las 146 lunas de Saturno, lo que indica que este cuerpo celeste podría albergar vida.

Las imágenes obtenidas en la década de 1980 por la sonda espacial Voyager demostraron que Encélado, que tiene alrededor de 500 kilómetros de ancho, cuenta con una superficie blanca y brillante, por lo que se le considera el cuerpo celeste más reflectante del sistema solar. De acuerdo con la NASA, debido a que este pequeño satélite natural refleja mucha luz solar, la temperatura de su superficie es extremadamente fría, alcanzando los -201 °C.

En 2005, el orbitador Cassini identificó partículas de agua helada y gas que brotaban desde la superficie de la luna a una velocidad de 400 metros por segundo. Los científicos explicaron que las continuas erupciones de agua terminaron por generar un enorme halo de fino polvo de hielo alrededor de Encélado, donde una parte de este material formó uno de los anillos de Saturno.

Asimismo, detallaron que estos estallidos provenían de grietas en la corteza de la luna, que son relativamente cálidas. A partir de los datos obtenidos del Cassini, se pudo conocer que debajo de la superficie helada de Encélado hay un océano líquido que alimenta los brotes de agua.

Detectando fuentes químicas adicionales

En 2017 se identificaron moléculas orgánicas en una de las columnas de hielo y vapor. Al respecto, los especialistas sugirieron que la combinación de dióxido de carbono, metano, amoníaco, hidrógeno y agua podrían conducir a la metanogénesis, un proceso metabólico que conlleva la producción de metano y que fue fundamental para la formación de vida en la Tierra.

En un nuevo estudio recientemente publicado en la revista Nature Astronomy, se reportó la existencia de “fuentes químicas de energía adicionales, mucho más potentes y diversas que la producción de metano”.

Los especialistas indicaron que los nuevos compuestos orgánicos detectados son cianuro de hidrógeno, acetileno, propileno y etano. Con su presencia se demuestra que “existen muchas vías químicas para sustentar potencialmente vida en el océano subterráneo de Encélado”, describieron en la publicación.

“Nuestro trabajo aporta más evidencia de que Encélado alberga algunas de las moléculas más importantes tanto para crear los componentes básicos de la vida como para mantener esa vida mediante reacciones metabólicas”, sostuvo el científico de la universidad de Harvard que trabajó en el proyecto Jonah Peter.

Encélado no solo parece cumplir los requisitos básicos para ser habitable, sino que ahora también tenemos una idea de cómo podrían formarse allí las biomoléculas complejas y qué reacciones químicas podrían estar involucradas”, concluyó.

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