Le implantaron un chip y ahora es un humano convertido en “cyborg”

Rainer Bock mira hacia otro lado mientras la aguja penetra entre su pulgar y su índice. El chip integrado bajo su piel le permitirá ahora interactuar con objetos conectados, una novedad que suscita debate en el salón de la electrónica IFA de Berlín.

“No me ha dolido tanto”, dice el voluntario de 36 años, empleado de la empresa de seguridad informática Kaspersky.

Con el implante subcutáneo “NFC” (abreviatura inglesa de “comunicación de campo cercano”), del tamaño de un grano de arroz, el alemán puede ahora presumir de ser un “cyborg”: un humano con implantes electrónicos.

Dangerous Things, el mayor proveedor de implantes NFC, considera que hay unos 10.000 “cyborgs” en el mundo.

El nuevo cobaya se niega, sin embargo, a que se le compare con Terminator, y sus motivaciones están muy alejadas de las del público de las “implant parties”, esos eventos que organizan en todo el mundo los amantes de la tecnología para hacerse implantar chips NFC.

“Esa gente quiere ser parte de internet (…) Para mí tan sólo es curiosidad. Dudo que se puedan hacer cosas tan excepcionales” con ese chip, asegura.

A su lado, Evgeni Chereshnev enumera todo lo que puede hacer con su chip implantado hace siete meses. Responsable de redes sociales en Kaspersky, el treintañero ya no necesita tarjeta para entrar en la oficina o al gimnasio, ni código PIN para su móvil. También puede tuitear de forma instantánea, encender las luces de su casa y ajustar su intensidad con un sencillo gesto de la mano.

“Todavía estamos muy por detrás de Robocop, pero somos bastante mejores que el Inspector Gadget”, bromea el ruso, que comparte su experiencia en un blog y espera contribuir a “crear un concepto de propiedad privada para los datos”, gestionados hoy en día por Google, Apple, Yahoo y demás.

PROTECCIÓN DE DATOS

De momento, esos chips no son muy sofisticados, reconoce Marco Preuss, director europeo de investigación en Kaspersky, pero pronto podrían sustituir los actuales medios de pago, las tarjetas de transporte público, los historiales médicos en caso de accidente, etc.

Esto plantea dudas sobre la confidencialidad de esos datos y la posibilidad de que sean utilizados por otra persona, en un mundo en el que “todo lo que pueda ser pirateado será pirateado”, predice el experto.

Al contrario del wifi o el bluetooth, un chip NFC sólo funciona a corto alcance, lo cual podría tranquilizar a sus usuarios. “Para acceder a mis datos, hay que saber dónde está exactamente mi chip y tocarme”, explica Chereshnev.

Pero los datos no están encriptados y, en el mejor de los casos, sólo están protegidos por una contraseña de cuatro caracteres, “sencilla de romper”, indica Preuss, que teme que se puedan robar los datos médicos de una persona mediante un ‘smartphone’ situado cerca del chip.

Los entusiastas no piensan en esas cosas.

“Debemos explorar esta tecnología antes de que los grandes grupos propongan sus propios chips”, dice Hannes Sjöblad, miembro de la red BioNyfiken, un colectivo de expertos en biotecnología.

Este sueco de 39 años se describe como cercano al transhumanismo, un movimiento filosófico que explora la idea de un “ser humano mejorado”. Lanzó el concepto de las “implant parties” en Estocolmo en octubre de 2014.

El fenómeno no es nuevo: en 2004, una discoteca de Barcelona proponía a sus miembros un implante “VIP” para entrar y pagar las consumiciones. La experiencia tuvo poca repercusión, pero los objetos conectados son mucho más numerosos hoy, asegura Sjöblad. La mayoría de los teléfonos inteligentes tienen un chip NFC, al igual que algunas tarjetas bancarias.

Pero este avance tecnológico también plantea numerosas cuestiones éticas y “la mayoría de la gente siguen mostrándose escéptica”, observa Astrid Carolus, psicóloga de medios en la universidad de Würzburg en Alemania.

“Los políticos llevan retraso en esto. Varias empresas (…) inventan productos para los que no tenemos un marco jurídico.

Joven es diagnosticada con ‘cerebro de amor’ por llamar a su novio más de 100 veces al día

Xiaoyu lanzó y destrozó objetos domésticos por toda su casa un día que su pareja no le contestó.

Una joven de 18 años, apodada Xiaoyu, de la provincia de Sichuan, ubicada al suroeste de China, se obsesionó tanto con su novio que afectó gravemente su salud mental hasta ser diagnosticada con ‘cerebro de amor’, recoge el diario South China Morning Post.

De acuerdo con la doctora Du Na, del Cuarto Hospital Popular de Chengdu, el comportamiento preocupante de Xiaoyu comenzó en su primer año de universidad, cuando entabló una relación íntima con su novio.

Rápidamente, Xiaoyu se volvió muy dependiente de su pareja y necesitaba estar a su lado todo el tiempo, exigiéndole saber su paradero constantemente y que le respondiera los mensajes al instante, independientemente de la hora, lo que hizo sentir a su novio incómodo y sofocado.

En un video que se hizo viral en las redes sociales, se podía observar a Xiaoyu enviar mensajes repetidamente a su novio para que encendiera su cámara y haciéndole llamadas que él ignoraba. En una ocasión, la joven llamó a su novio más de 100 veces, pero él no le contestó, por lo que Xiaoyu se enfadó tanto que empezó a lanzar y destrozar objetos domésticos por toda su casa.

El novio llamó a la Policía, que llegó al lugar justo cuando Xiaoyu amenazaba con tirarse por un balcón. La joven fue trasladada a un hospital, donde eventualmente fue diagnosticada con trastorno límite de la personalidad (TLP), conocido coloquialmente en china como ‘cerebro de amor’, que se caracteriza por la inestabilidad emocional, impulsividad y relaciones interpersonales caóticas.

Según Du, este trastorno puede coexistir con otras afecciones mentales como la ansiedad, la depresión y el trastorno bipolar. Aunque la doctora no reveló los causantes de la enfermedad de Xiaoyu, aseguró que suele presentarse en personas que no han tenido relaciones sanas con sus padres durante la infancia.

VIDEO| “Inaceptable”: Polémica en México por el sacrificio de una gallina en el Senado

El legislador a cargo del ritual justificó sus acciones a partir de las costumbres de su grupo indígena.

La mañana de este miércoles, el senador mexicano Adolfo Gómez Hernández, del oficialista Morena, sacrificó una gallina como parte de un ritual por el Día de la Tierra. El incidente generó tanto polémica como rechazo por parte del Senado, que aseguró que el legislador lo hizo a título personal y sin la venia del cuerpo.

“Estos hechos fueron llevados a cabo bajo la estricta responsabilidad individual del senador Adolfo Gómez Hernández, quien justificó la acción bajo el amparo de usos y costumbres de un grupo o comunidad indígena de la que manifestó su autoadscripción”, se lee en un comunicado difundido por la Mesa Directiva del Senado de México en X.

En el documento también se indica que la directiva informó oportunamente a Gómez Hernández, sobre “la negativa expresa de autorizar el ingreso de cualquier tipo de animal al edificio, conforme a los protocolos de seguridad y protección civil vigentes”.

Del mismo modo, se llamó a recordar los esfuerzos realizados por las autoridades en aras del “reconocimiento, defensa y promoción de los derechos de los animales” y se recalcó que la presidencia del Senado “no respalda de ninguna manera los hechos acontecidos y tomará las medidas disciplinarias pertinentes con el senador responsable”.

De su lado, Gómez Hernández justificó ante la prensa la acción, al asegurar que le asiste el artículo segundo de la Constitución mexicana, en la que se consagra el respeto “a las prácticas de los pueblos originarios”.

Reacciones

El sacrificio del ave de corral no fue bien acogido en las redes sociales por los defensores de los animales. Así, el colectivo animalista Anima Naturalis anunció que interpondría una denuncia ante la Fiscalía de la Ciudad de México por maltrato animal.

ADVERTENCIA: ESTAS IMÁGENES PUEDEN HERIR SU SENSIBILIDAD

Otra usuaria calificó el ritual como “ignorante” y lanzó improperios tanto contra el congresista como contra el Senado en general.

“Barbárico e inaceptable. En el Senado hicieron esta ‘ofrenda’ siendo esto un delito. Pedimos la destitución del senador Adolfo Gómez Hernández, ya que fue quien propició esta masacre. No hay justificación, esto es gravísimo”, reclamaron desde la Asociación Civil Seres Libres, dedicada a la protección de animales.

“La ley de protección de animales de la Ciudad de México no aplica dentro del Senado”, se preguntó otro internauta.

Médicos realizan el segundo trasplante de riñón de cerdo en el mundo

Se trataba de un caso complicado, por lo que la paciente requirió también un timo de cerdo y una bomba cardíaca artificial para reforzar su corazón debilitado.

Cirujanos estadounidenses han practicado el segundo trasplante de riñón de cerdo en la historia, en esta ocasión, a una mujer que padecía una combinación de insuficiencia cardíaca y renal. La complejidad de su caso requirió dos intervenciones en un lapso de 8 días, y primero se le colocó una bomba cardíaca artificial para reforzar su corazón debilitado.

Lisa Pisano, de 54 años y residente en Nueva Jersey, es la primera mujer en recibir un riñón de cerdo en Estados Unidos y también es la segunda persona viva a la que se ha sustituido su órgano urinario defectuoso por uno de origen animal.

El riñón se obtuvo de un cerdo modificado genéticamente, que sirvió también como donante del timo, un órgano del sistema inmunitario que los médicos consideraron imprescindible trasplantar para evitar que el organismo humano rechace el nuevo órgano.

“Estaba al final del camino”, comentó Pisano a AP. “Aproveché la oportunidad. En el peor de los casos, si no funcionara para mí, quizás funcionaría para otro y podría ayudar a la siguiente persona”, agregó.

La paciente muestra una mejora, ya que su riñón porcino comenzó a producir orina inmediatamente en el quirófano del Instituto Langone de Trasplantes de la Universidad de Nueva York, donde recibe el tratamiento.

Otro centro médico estadounidense, el Hospital General de Massachusetts, dio de alta a comienzos de abril a la primera persona que recibió un trasplante de riñón de cerdo modificado genéticamente. El médico Tatsuo Kawai dijo que el paciente de 62 años había experimentado un susto de rechazo temprano en marzo, pero se recuperó y va bien cinco semanas después del trasplante.