Arlan y Edelio, a una década de los secuestros que marcaron la historia del Paraguay

Este 2024 se cumplen 10 años de dos casos de secuestros que marcaron la historia de nuestro país. Uno de ellos, el de Arlan Fick, liberado después de 9 meses de haber sido llevado por los integrantes del grupo criminal Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP). Sin embargo, el suboficial Edelio Morínigo, no corrió la misma suerte y hasta hoy su paradero es desconocido.

Por Juan Riveros (@JuancitoRiveros)

Un 2 de abril del 2014, las noticias se vieron conmocionadas por el reporte de secuestro del joven Arlan Fick, en ese entonces con apenas 17 años de edad. Su rapto se dio en la localidad de Paso Tuyá, en el departamento de Concepción.

La familia Fick, de nacionalidad brasileña, pagó inicialmente unos US$ 500 mil, monto solicitado por los integrantes del autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP). Sin embargo, la prueba de vida del joven fue entregada recién el 22 de octubre de ese 2014.

Además, otra de las exigencias del grupo criminal era la entrega de víveres por valor de US$ 50.000 a comunidades de la zona. El pedido también fue cumplido por la familia Fick.

El secuestro de Arlan fue sigilosamente planeado por el grupo criminal, ya que, a finales del 2013, el joven fue víctima del robo de su computadora. A través del dispositivo, habrían tenido acceso a los datos financieros de la familia.

Arlan Fick pasó un total de 267 días en poder del EPP, hasta su liberación en la noche del 25 de diciembre del 2014. El joven fue recibido en su comunidad con una gran caravana de vehículos y motocicletas. En ese entonces, era considerado el secuestro más largo realizado por el grupo criminal.

En ese mismo 2014, específicamente el 5 de julio, fue secuestrado el suboficial de la Policía Nacional, Edelio Morínigo, en la localidad de Arroyito, también en el departamento de Concepción, donde se encontraba de cacería con unos amigos, que fueron liberados al instante.

Cabe mencionar que, incluso el propio Arlan tras su liberación comentó que, durante un tiempo llegó a compartir el mismo lugar de cautiverio con el efectivo policial.

La situación de Edelio era diferente a la de Arlan, ya que sus captores no pedían dinero a cambio, sino, la excarcelación de 6 miembros del EPP a cambio de la libertad del suboficial. La presión era para el Gobierno, bajo la amenaza de ejecutar a Morínigo en caso de no cumplir con la exigencia.

La primera y única prueba de vida que hasta hoy se conoce de Edelio Morínigo es la difundida a través de un video el 22 de octubre de 2014, en el que se observó al suboficial dirigiéndose a su familia con unas palabras.

Con la liberación de Arlan en diciembre del 2014, las investigaciones y la búsqueda se centraron en Edelio Morínigo. Fueron pasando los meses y años, sin que se tengan novedades. Incluso, sucesivos gobiernos que no lograron dar con resultados auspiciosos. Paralelamente, la familia emprendió también sus propias averiguaciones.

Recién en el 2018 se encontró un panfleto, supuestamente atribuido al EPP y en donde se indicaba la aparente localización del cuerpo del suboficial. Sin embargo, las indicaciones no llevaron a buen puerto. Situaciones similares se dieron en los siguientes años, pero nada conducía al paradero de Edelio Morínigo.

La lucha de la familia Morínigo es hasta el momento la más larga en la historia del país. En esta última década, también se registraron los secuestros del ganadero Félix Urbieta y el exvicepresidente de la República, Óscar Denis. Los tres siguen con paradero desconocido.

El lema “Que vuelvan los tres” fue instalado por los familiares de los secuestrados, con el objetivo de encarar acciones para la liberación de las víctimas. Desafortunadamente las campañas no arrojaron resultados favorables.

Cuarteto de la felicidad: tener sexo, ejercitarse y otras actividades estimulantes

En la búsqueda constante de la felicidad y el bienestar, surgió un concepto que destaca cuatro aspectos fundamentales para alcanzarlos. Conocido como el “Cuarteto de la Felicidad”, este enfoque pone énfasis en la importancia de la salud física y mental, las relaciones sociales y el propósito o sentido de vida.

La licenciada en psicología Marta Trinidad destaca que, al equilibrar y trabajar en cuatro aspectos en nuestra vida diaria, podemos activar el Cuarteto de la Felicidad y encaminarnos hacia una vida más plena, satisfactoria y, por sobretodo, feliz. Este cuarteto consiste en desatar los efectos positivos de la endorfina, la serotonina, la dopamina y la oxitocina.

Para activar este cuarteto, es crucial prestar atención a cada uno de los aspectos. En ese sentido, las relaciones sociales ocupan un lugar primordial; mantener conexiones significativas con otros, cultivar amistades cercanas y crear redes de apoyo son aspectos esenciales para activar este pilar de la felicidad. También encontrar un propósito o sentido de vida brinda dirección y plenitud a nuestras acciones diarias.

Trinidad explica que el cuarteto de la felicidad guarda relación con un proceso biológico que sucede en nuestro cuerpo y que nos hace sentir más feliz, más satisfechos y que genera en nosotros mayor sensación de bienestar. “Estamos hablando de cuatro hormonas o neurotransmisores que luchan día a día contra la hormona del estrés, el cortisol, que se produce en nuestro cuerpo. ¿Cómo nos sentimos muchas veces cuando tenemos falta de estas cuatro hormonas? Estoy más cansado, no me hallo, no encuentro mi lugar, tengo mucho sueño durante el día o no puedo conciliar el sueño a la noche, tengo mucha ansiedad, tengo mucha hambre”, dijo en el canal GEN.

Trajo a colación que todos podemos buscar y conseguir la felicidad, la cual es importante para la salud, porque cuanto más feliz esté la persona, más saludable y longeva será. Pero, ¿qué es la felicidad? La misma tiene muchos conceptos y uno de ellos describe -según resalta la licenciada- que “son momentos que pueden suceder cada día pero que se deben trabajar activamente, lo cual significa que podemos hacer cosas para ser felices”.

Por ejemplo, escuchar música activa nuestro sistema nervioso central y genera el neurotransmisor del bienestar general del cuerpo. “Nosotros podemos ser protagonistas para hacernos felices a nosotros mismos, no depender de nadie ni de las circunstancias para ser felices, nosotros mismos podemos generar la felicidad con nuestro propio cuerpo”, acota.

ENDORFINAS:

Las endorfinas son consideradas la morfina del cuerpo, una suerte de analgésico natural.

Ejercicio físico, escuchar música, reírse, ver películas, son algunas opciones recomendadas para conseguir las endorfinas. “Si te sentís triste, salí a caminar, y tomá un poco de sol, ya que la vitamina D actúa como una hormona”, aconsejó la psicóloga.

OXITOCINA:

El ejercicio grupal, como jugar fútbol, genera la hormona de la oxitocina, que lucha contra el estrés. “Es la hormona de la parte social: un abrazo a la madre, estoy con mi mascota, juego en un grupo y tengo conexiones con mis compañeros, el fútbol, tener relaciones sexuales”, citó la licenciada.

Son los neurotransmisores de la felicidad y de la parte social. Compartir, reírse, abrazar, besar. Todo eso hace bien y genera que nuestro sistema nervioso central vaya produciendo estas hormonas y luchemos de esa manera, contra el estrés, la tristeza y el cansancio.

DOPAMINA:

La dopamina es muy importante, pero también es muy peligrosa, porque está asociada a las adicciones. De forma natural, se puede producir celebrando las metas a corto, mediano y largo plazo. Por ejemplo, festejando un logro obtenido en el trabajo. Sin embargo, se puede producir de forma química con algunas sustancias, como por ejemplo la cocaína o incluso el uso del celular. “Un niño con un celular genera mucha dopamina, más que estar jugando con algún amigo. Entonces muchas veces nos quedamos pegados a esa adicción que genera dopamina en la inmediatez del momento. En el caso de las adicciones, es demasiado difícil replicar ese momento de placer porque se tiene que aumentar la dosis y ahí viene el sistema de recompensa y la adicción”, comentó.

SEROTONINA:

Como la serotonina fluye cuando te sientes importante, el sentimiento de soledad e incluso la depresión son respuestas químicas a su ausencia. Para conseguir esta hormona, según recomienda Trinidad, podemos recordar cosas bonitas, viajar (no hace falta ir lejos), inclusive sentarse en el patio de la casa y practicar la respiración, sentir el momento, vivir el día a día.

Inteligencia Artificial: el peligro que ignora la humanidad

Los seres humanos somos dueños de una curiosidad innata, donde nace la insaciable búsqueda de conocimiento que nos permite influir en nuestro entorno. Pasamos de la revolución cognitiva a la agrícola y de la industrial a la científica. Ahora, la Inteligencia Artificial protagoniza el próximo gran episodio de la historia, porque por primera vez tendremos una competencia (amorfa, de momento) que indudablemente nos supera en muchos aspectos.

Por Gonzalo Cáceres - periodista

Modestia aparte, querido lector, las siguientes líneas no son los desvaríos de un ‘conspiranoico’ adicto al mate, sino de una persona alarmada por los pasos agigantados que está dando la Inteligencia Artificial (IA). Hecha la aclaración, permítame exponer el caso.

DESDE EL AMANECER

La condición humana conlleva mortalidad, vulnerabilidad e incertidumbre; y equipararse a lo divino es lo más parecido a un intento de superar estas limitaciones. ¿Por qué? porque a lo largo de nuestra experiencia buscamos inmortalidad, invulnerabilidad y el conocimiento absoluto, deseos que cobran forma intrínseca en lo que los antiguos denominaron ‘hubris’ (la característica de los humanos de sobreestimar sus propias capacidades y desafiar el orden natural).

Todo emana de la peligrosa combinación de curiosidad, ambición y miedo.

La mitología sumeria habla del rey Gilgamesh, quien protagoniza el poema más antiguo que llegó a nuestros días. Este habría sido una suerte de semidiós que descubrió que la inmortalidad es un privilegio exclusivo de los dioses, mientras que los humanos deben aceptar su destino (la muerte). En la mitología griega, el titán Prometeo desafió al rey de los dioses, Zeus, al robar el fuego (sabiduría/conocimiento) del Monte Olimpo y dárselo a los humanos, otorgándoles la capacidad de crear. También en la mitología griega, Ícaro intentó escapar de la isla de Creta con alas hechas de cera y plumas. A pesar de las advertencias de su padre Dédalo, voló demasiado cerca del Sol, lo que causó que las alas se derritieran y cayera al mar. Por su parte, en la tradición judeocristiana destaca la Torre de Babel, una colosal edificación con la que los humanos intentaron llegar al cielo. Dios frustró sus planes confundiendo su lenguaje, lo que causó que la humanidad se dispersara por la Tierra y el inicio de todos los conflictos.

Estas historias están separadas por una importante diferencia temporal y geográfica, pero reflejan un tema común en muchas culturas: la tensión entre el deseo del poder divino y las advertencias sobre las consecuencias de semejante ambición.

A NUESTRA FORMA Y SEMEJANZA

El saber transformar el mundo es una característica esencialmente nuestra, porque los humanos aspiramos a emular la creatividad divina, así mismo lo confirman las religiones y creencias espirituales que abrazan la promesa de alcanzar un estado divino -o de unión con lo divino- llamando a los fieles a buscar esta forma de existencia superior a través de sus credos.

La investigación científica representa una de las tantas formas en que los humanos intentamos alcanzar capacidades etéreas, como el control sobre la vida y la muerte, la manipulación del entorno natural y la creación de inteligencia, lo que milenios antes solo se atribuían a seres sobrenaturales que todo lo ven y todo lo pueden.

Es así que, en toda esta revolución tecnológica surge un campo de la informática que se centra en la creación de sistemas digitales capaces de realizar tareas que requieren inteligencia humana. Inició con las llamadas Narrow AI (IA débil o ‘estrecha’), cuyo diseño contempla la realización de tareas específicas. Por ejemplo, los asistentes virtuales como Siri o Alexa, que pueden responder a preguntas y realizar cuestiones básicas, o ciertos patrones que aplican el reconocimiento de voz, la toma de decisiones, la traducción de idiomas y la percepción visual, entre otras. Sin embargo, rápidamente se dio el salto hacia el concepto de las General IA (IA fuerte), donde ya se habla de una inteligencia comparable a la humana, con la capacidad de realizar cualquier tarea intelectual que un ser humano pueda.

La General IA supera con creces a la capacidad del ser humano, en todos los aspectos, por lo que su desarrollo ya muta a un tema de debate y especulación, y plantea importantes cuestiones éticas y de seguridad. Es decir, hablamos de inteligencia no humana capaz de aprender y mejorar automáticamente a partir de la experiencia sin ser explícitamente programada (aprendizaje supervisado, no supervisado y por refuerzo). O de las redes neuronales (sistemas computacionales inspirados en el cerebro), que son la base de muchas técnicas modernas de IA, especialmente en el aprendizaje profundo (deep learning).

Sea IA fuerte o débil, son sistemas que cuentan con procesamiento del Lenguaje Natural (NLP); que posibilita a las máquinas entender e interpretar el lenguaje humano, lo que es fundamental para aplicaciones como chatbots y asistentes virtuales. Y/o con visión por computadora (computer vision), porque así las máquinas interpretan y entienden el mundo visual, utilizando imágenes y videos.

ALGO QUE NO COMPRENDEMOS

Pero, ¿Por qué la IA es diferente? Primero, hay que entender y reconocer que la IA es distinta a cualquier otra invención de la historia. La pólvora, la imprenta, la radio, la cuchilla, la heladera, los coches y hasta los misiles, etc., no se accionan por determinación propia. No se ponen a andar sin el factor humano. Y pasa lo contrario con las formas de inteligencia artificial. A diferencia de la pólvora, la rueda, la cuchilla, la imprenta y los misiles, etc., la IA se compone de algoritmos que aprenden de cada movimiento del ser humano, que se nutren de cada duda y que hasta tienen la increíble facultad de predecir el siguiente paso. Para ser más claro: se trata de la primera creación que resta poder al ser humano.

No hablamos de un objeto que actúe solo por la acción directa del hombre, sino de un ente (o como prefieran llamar) con voluntad propia y capaz de procesar toneladas de información en segundos, de incidir en consecuencia (sí, como los humanos).

En palabras del historiador israelí Yuval Noaḥ Harari, la IA “tal vez sea la invención más importante del siglo XXI y quizá de toda nuestra historia”, que entre tantas tiene la posibilidad de “descubrir una nueva línea de medicamentos y de solucionar la crisis ecológica”, pero “también puede acabar con nosotros”.

“Se está normalizando que no haya un ser humano decidiendo por nosotros, sino una IA. Si ves un vídeo en Youtube, no es humano el que decide qué vídeo te va recomendar después, sino un algoritmo. La decisión la toma una IA. Nunca se había visto nada igual. No tenemos ni idea de lo que implica todo esto”, explica en una conferencia que se hizo viral en las redes sociales.

Otro aspecto a tener muy presente con la IA es que puede innovar por su cuenta. Música, textos, imágenes y todo lo que se nos pueda ocurrir. Es decir, se trata de una creación que crea. Así de redundante, así de simple; así de intimidante.

No se puede ir contra los grandes beneficios de la IA. Sí, hablamos de saltos en medicina (tratamientos y longevidad), transporte, explotación y/o generación de fuentes de energía; pero también lo que conlleva; en el plano militar, una carrera armamentista solamente equiparada con lo acaecido tras la aparición de la tecnología nuclear. Con la automatización, la pérdida de empleos en ciertos sectores, solo por citar algunos ejemplos.

IMPREDECIBLE

Vivimos en un mundo donde las decisiones las toman seres sintientes, unos más o menos que otros, pero sintientes al final. La IA es, como decirlo, exógena a la esencia humana. Es ajena a nosotros; lo que la hace impredecible.

A pesar de que nuestras grandes mentes dicen que no será como en los universos distópicos de las películas, la realidad es que avanzamos hacia el momento en que dejamos de entender nuestro propio mundo. Vamos cediendo ante algo desconocido, que crea cosas que no comprendemos.

Planteémoslo de esta manera: dentro 10, 20 o 30 años, con la IA tomando las decisiones financieras, ¿Qué pasaría si se posiciona una nueva divisa creada por la IA? Una divisa que no entendemos, y esta se torna la nueva referencia mundial. Es decir, toda la economía quedaría a merced de lo exógeno.

Puede que, en unos años más, los humanos no cuenten las historias ni pinten los cuadros. Que las grandes obras de arte no nazcan de la inspiración de un ser de carne y hueso. Puede que, en un tiempo más, un complejo rejunte de códigos decida sobre el sistema de defensa de todo un país, sobre la política de alimentos, distribución del agua, tome decisiones tan importantes como si una persona merece o no tratamiento para tal o cual enfermedad, si es rentable para un Gobierno invertir en educación y/o vivienda, en la cantidad de jóvenes que podrán acceder a la universidad, establecer los criterios para el financiamiento de la banca y de los planes sociales, el control de las proyecciones económicas y demográficas, y una amalgama todavía más amplia de aspectos -de lo más básico a lo más crucial- que nos debe de hacer replantear seriamente el rumbo que toma la cuestión.

Insisto, no se trata de ‘demonizar’ a la IA, que llegó para quedarse. Se trata de anticiparse a los escenarios y tomar las medidas para evitar que este hijo incomprendido de la humanidad, que carece de sentimientos y le sobra lógica, tome consciencia de su propia existencia. Hay que hacerlo, debemos tomar y asegurar el control, mientras aún podamos.

La figura femenina en la Guerra del Chaco: de madres a soldados

Mucho se habla de los hombres que lucharon contra Bolivia por la defensa del Chaco, pero las mujeres cumplieron un rol fundamental en la batalla. De ser madres, muchas de ellas pasaron a ser soldados en el frente de guerra. Acá te contamos sobre algunas de ellas que, de alguna manera, fueron protagonistas de la contienda.

En 1932, Paraguay asumía una contienda en defensa del Chaco y no solo convocó a valientes hombres, sino también a mujeres dispuestas a dar todo por la patria.

Tal como hicieron después de la Guerra de la Triple Alianza, las mujeres sobresalieron por el heroísmo soportando ideologías y costumbres históricas sobre ellas como madres, esposas, encargadas del hogar.

En la Guerra del Chaco, no solo las mujeres paraguayas jugaron un papel fundamental, las bolivianas también, quienes desempeñaron roles esenciales, desde “madrinas de guerra” hasta enfermeras y espías.

En cuanto a las paraguayas, durante esos tres años que duró la guerra se destacaron en las juntas de aprovisionamiento del campo, en la producción y cosecha en las chacras. Muchas fueron mujeres voluntarias que cumplieron diferentes labores de enfermeras e incluso como donantes de sangre. Pero lo más admirable, algunas fueron al campo de batalla.


MANUELA VILLALBA, LA MUJER SOLDADO

No estaba permitido el alistamiento de mujeres para pelear en batallas, en ninguna de las dos guerras que hubo en el país. Manuela sí lo hizo, pero fingió ser hombre.

Manuela era de Tavapy y al darse la orden de enrolamiento se presenta con su hermano, se corta el cabello y se viste como soldado. No estaba dispuesta a perderlo y dejarlo solo en la lucha sangrienta.

Combatió, al lado de su hermano en Boquerón, Castillo, Yucra, Arce, Alihuata, Saavedra, Gondra y Nanawa, pero luego intentó llevárselo de vuelta a casa. Fueron descubiertos y presentados como desertores ante el Comandante Luis Irrazábal.

Se ordenó el fusilamiento de ambos, y allí Manuela confesó ser mujer. El coronel Luis Irrazábal se conmovió y no solo desistió del fusilamiento, sino que ascendió a ambos hermanos al grado superior.


JUSTINIANA MARTÍNEZ, SOLDADO Y ENFERMERA DEL CHACO

Acompañó a su marido disfrazada de varón, se rapó la cabeza y peleó a su lado hasta que su compañero de vida fue alcanzado por el fuego enemigo. Lo vio morir en su trinchera.

Se presentó como enfermera y brindó todas sus fuerzas a salvar vidas.

Justiniana celebró 100 años el 1 de diciembre del 2013, y falleció en agosto de 2017 a los 103 años en su ciudad natal, Misiones luego de volver a casarse y formar una familia.


PASTORA CONCEPCIÓN CÉSPEDES, UNA MADRE INCONDICIONAL

Pastora acompañó a su único hijo, Francisco Céspedes de apenas 16 años a la Guerra del Chaco, cumpliendo tareas de enfermera en el hospital de sangre.

Él fue muerto en el campo de batalla en marzo de 1933. Ella, solicitó permiso para dar sepultura al joven soldado en el Fortín Núñez, hoy General Díaz. Levantó un rancho allí cerca para visitarlo todos los días, hasta que el 10 de enero de 1959 fue hallada muerta, abrazada a la cruz de la tumba.

Es importante destacar que, estas y otras mujeres no tuvieron un rol pasivo durante la guerra, sino que debieron ser en sus hogares, padres y madres para sus hijos, en ausencia del compañero. Hermanas con amor incondicional, pero por sobre todo, valientes y con compromiso único.