Una disputa entre amarillos, azules y los bomberos de Asunción, convocó a los rescatistas a las inmediaciones del parlamento, donde se tratará la modificación de la ley orgánica de los bomberos.

La modificación del proyecto de ley, que será analizada por los diputados, establece que los amarillos recibirán 40 % del presupuesto, los azules otro 40 % y los bomberos de Asunción el 20 %.

Debido a que esta repartición del presupuesto no fue al acuerdo al que habían llegado las compañías de bomberos, un grupo de uniformados exige que vuelva la ley original.

“En esta modificación que vino con la media sanción del Senado se asigna 40 % a los amarillos, 40 % a los azules y 20 % para los bomberos de Asunción. Consideramos que es bastante para un cuerpo como el nuestro que es solo en Asunción y solicitamos que nos den solo el 5%, pero los amarillos y azules consideran que deben excluirnos a nosotros y que ellos deben ser el canal para que recibamos el dinero”, explicó Juan del Puerto, voluntario del cuerpo de bomberos de Asunción.

Pese a que los rescatistas que operan en la capital exigen la reducción presupuestaria no lograron llegar a un acuerdo con sus colegas, quienes exigen que el presupuesto solo responda a los amarillos y azules, que a su vez, entregarán el dinero a la compañía de Asunción.

“Consideramos que la distribución actual no corresponde. Pedimos que se apruebe la original o se realice una distribución mas equitativa”, exigió Rafael Valdez, presidente de bomberos voluntarios.

Las compañías aguardan por la respuesta de la Cámara de Diputados, quienes deben definir si aceptan la modificación planteada por el Senado, excluyen a los bomberos de Asunción o reducen el presupuesto que les fue asignado.

AUMENTO PRESUPUESTARIO

Los bomberos también exigen que se mantenga la cláusula del proyecto original donde se contempla el aumento presupuestario del 20 %.

Tanto bomberos amarillos como azules coincidieron en solicitar un aumento del 20 % para los gastos administrativos, pero el Senado redujo la cifra al 10 %, lo que generó el rechazo de los uniformados.

La fiscal Laura Romero, que lleva la pesquisa del crimen perpetrado el sábado pasado, señaló que en el abanico de hipótesis del móvil del homicidio, no se descarta la posibilidad de que haya sido parte del ‘bautismo’ al que pandillas narco someten a menores que ingresan en las bandas. Y que consiste, en la mayoría de los casos, en pruebas que comprende actos crismales como asaltar y matar.

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“El hombre que fue ultimado fue una persona trabajadora, sin antecedentes, por lo que un ajuste de cuentas es poco probable. Pero se investiga todas las posibilidades, entre ellas que podría ser un acto de bautismo, como denominan (las bandas) a actos de iniciación”, dijo la representante del Ministerio Público en comunicación con la radio 1000 AM.

Cuando hallaron muerto a Tomàs Darío Galeano Insfràn (57), el cadáver presentaba heridas de cuchillo en el abdomen, así como dos balazos. Y un detalle que llamó la atención: los asesinos dejaron encima del pecho de la víctima, la suma de 70 mil guaraníes. Esto podría ser interpretado -según la pesquisa- como un mensaje. ¿Y cual es el contenido de lo que quisieron ‘comunicar’? Uno sería ajuste, otro lo que Barajó la fiscal (bautismo criminal) una tercera perspectiva apuntaría a robo bajo efecto de drogas.

La arista del bautismo adquiere llamado de atención, por el hecho de que dicha práctica (que ya fue advertida por autoridades) es aplicada por bandas del PCC y del clan Rotela para ingresar a nuevos integrantes de sus agrupaciones.

Un policía fue detenido en la ciudad de Caacupé, departamento de Cordillera, cuando transportaba 200 dosis de crack y un chaleco de la Secretaría Nacional Antidrogas.

El suboficial inspector David Benítez Duarte, es el agente que iba en su vehículo, cuando fue abordado por personal de la Secretaría Antidrogas, que tras revisar los elementos que llevaba, encontraron la mercancía ilegal.

Según datos proveídos por los intervinientes, el uniformado pertenecería a un esquema que opera en la zona de Central y Cordillera, y bajo esa sospecha fue puesto a consideración del Ministerio Público y de Asuntos Internos de la Policía Nacional.

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Este nuevo caso de policías implicados en el ilícito del microtráfico de estupefacientes, se suma a una serie de episodios similares detectados últimamente.

El problema tiene su tentáculo en otro aspecto del ámbito policial: el aumento de agentes que consumen estupefacientes y son adictos.

En Asuntos Internos hay alrededor de 50 expedientes de personal policial que están en esa situación, y que fueron puestos a disposición de medidas de protocolo para abordar estos casos. Uno de los puntos comprende tratamiento del adicto, seguimiento de cuadro médico, evaluación y definición de si continúa en la fuerza policial o es dado de baja.

El problema de policías adictos es considerado de gravedad, ya que esa dolencia es sindicada como una antesala para evolucionar a la comisión de delitos.

El temporal que azotó con intensas precipitaciones y fuertes vientos a Asunción, Gran Asunción y otros puntos del país provocó varios inconvenientes a su paso.

La nota de este viernes la dieron los árboles caídos, registrándose una gran cantidad de reportes de este tipo en diversos lugares.

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Uno de ellos fue el campus de la Universidad Nacional de Asunción (UNA), ubicado en la ciudad de San Lorenzo, donde algunos añosos ejemplares se vinieron abajo con la lluvia.

Según el reporte del canal GEN, tres árboles cayeron de raíz en el estacionamiento de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales (FACEN), afectando a unos 6 vehículos de diversas marcas y modelos.

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En otro sector correspondiente a la Facultad de Ciencias Agrarias de la UNA, también se produjo la caída de un frondoso árbol, causando destrozos a una camioneta 4x4 perteneciente a un docente de la universidad.

El incidente no dejó personas heridas, aunque sí cuantiosos daños a los rodados que quedaron aplastados por los árboles caídos.