La representante legal de la familia de Mainumby, la abogada Elizabeth Torales, denunció que a la menor se le garantizó asistencia cuando salió a luz el caso de abusos sexuales reiterados en su contra, que resultó en un embarazo no deseado. Sin embargo, el Gobierno no estaría cumpliendo a cabalidad con el desembolso de los G. 250.000 que prometió realizar cada dos meses.

Así también la menor estaría siendo víctima de acoso escolar, ya que sus compañeros, de acuerdo al relato de la defensora, la critican por el hecho de haber dado a luz a tan corta edad (11 años).

Esta información fue criticada por varios sectores de la sociedad a través de las redes sociales, entre los cuales algunos cuestionaron la falta de ayuda de las organizaciones provida. En contrapartida, los que lucharon para que la niña no aborte al bebé -fruto de la violación de su padrastro- salieron al paso para defenderse.

A continuación transcribimos la carta completa divulgada por Eduardo Morales a través de las redes sociales:

“Respecto a la publicación sobre el bullying que sufre lastimosamente Mainumby por parte de compañeros de escuela (niña-madre, embarazada a consecuencia de violación), y la automática respuesta ante este hecho de activistas pro-aborto acusando a los provida de “hipócritas”, me permito responderles:

Aquí estoy y aquí estamos los pro-vidas, seguimos trabajando por una sociedad más justa, aunque no salgamos en TV, ni seamos íntimos de periodistas políticamente correctos, ni recibamos premios por parte de famosas organizaciones de DDHH (proaborto por cierto).

Podría decirse que seguimos plantando “árboles”, aunque vos no lo veas, o aunque no lo quieras ver. Plantamos “árboles” para que todos nos beneficiemos, especialmente la generación futura.

Le respondo a todas esas persona que fácilmente tildan a la sociedad paraguaya de “hipócrita” poniéndose como jueces de todos, excluyéndose de esa sociedad (hipócrita) de la cual son parte, para sentirse superiores , buscando aplausos y vanagloria.

Les cuento lo que yo Eduardo Morales hago por mi sociedad. Desde la organización Generación Provida dono mi tiempo a niños, jóvenes y padres enseñando no solo a “no abortar”. Enseño que todos tenemos derecho a vivir y que nuestra dignidad debe ser respetada sin importar nuestra raza, sexo, circunstancias de nuestra concepción, o etapa de nuestro desarrollo humano y que defender al indefenso nos hace mejores personas y una mejor sociedad, a respetar la vida como principal derecho humano sin el cual no pueden existir otros derechos.

Y lo hago no solo desde la perspectiva del niño por nacer, sino también de la madre. La madre que está recibiendo presiones de su pareja para abortar, o de la familia, o desde la misma sociedad al no darle alternativas para seguir estudiando, para encontrar trabajo o seguir trabajando etc. Enseño a los chicos que deben apoyar a sus hermanas, a sus compañeras, a sus novias, a sus esposas o madres. Apoyo, ayuda y no condenación o bullying en este caso.

Así dono mi sábado o domingo, ayudando tal vez a paliar esa falta de valores que los jóvenes no tuvieron en sus hogares. Esa falta de valores que tal vez tengan los niños de 13 años que se burlan de Mainumby. Y lo hago sin el esponsoreo del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) o de la Federación Internacional de Planificación Familiar (IPPF), esta última la mayor organización proabortista del mundo, últimamente investigada por tráfico de órganos de bebés abortados.

¿Hipócrita? ¿Porqué?. Ahh, porque “ya no me interesa Mainumby ahora que pudo parir”.

Analicemos la expresión, estas personas “a favor de la despenalización del aborto” están planteando que el “bullying” es a causa de los “providas” que lograron que el bebé nazca.

Entonces el bebé es el culpable del bullying, ya que si los “providas” no hubieran estorbado, lo hubiéramos matado y salvado a la niña del bullying.

Si esa es tu lógica, quedate con tu “coherencia” de muerte que yo me quedo con mi “hipocrecía” de vida.

Discúlpenme por no ser fiscal general del estado, ministro de salud, ministro de Educación, o presidente de la República para darle una mejor atención y desarrollar programas que realmente apoyen a TODAS las mujeres que se encuentran en una situación difícil relacionada con la maternidad.

Resulta que ahora los “provida” somos hipócritas por defender nada menos que la vida misma (de la madre y del no nacido) y no resolver los problemas de bullying, trabajo, pobreza, salud. Me permito decir que la verdadera hipocresía es trabajar por la despenalización del aborto en caso de malformación del feto y luego defender los DDHH de las personas con discapacidad. Si hubieran podido, hubieran “defendido el derecho de la mujer a acceder a la interrupción voluntaria del embarazo para no cargar con un trauma a causa del producto de la concepción”. Cruda eugenesia nazi.

Te pregunto – Y vos que hacés? – “Yo trabajo a favor de la despenalización del aborto para evitar muertes(¿?), para que los pobres no tengan más problemas económicos con otro hijo, para que las universitarias puedan terminar su carrera, para que las niñas violadas no vean la cara del agresor en el niño y se vuelvan a traumar”.

Trabajar por la despenalización del aborto es realmente el “si te visto no me acuerdo”. Ya te “solucionaron” el problema. Automáticamente vas a poder llegar a fin de mes, a poder seguir estudiando, trabajando o automáticamente se te va a pasar el trauma de la violación, si tenés secuelas post aborto lo negamos ya que son inventos de los providas, si tenés 5 veces más probabilidad de caer en drogas, alcoholismo o depresión es a causa de la sociedad hipócrita que te apunta con el dedo (aunque nadie sepa de tu aborto), no importa si te quedaste estéril a causa del aborto o si los casos de violación siguen en aumento. Es la solución mágica a todos los problemas sociales.

Yo tomo el camino difícil, que considero el camino correcto, el que dignifica a la persona. Seguiré apostando por la ayuda psicológica a las víctimas de violencia sexual, ayuda para madres solteras, más fuentes de trabajo, mejor educación, a erradicar el bullying con educación en valores, salud gratuita y universal, fomentar el deporte, justicia pronta para todos, ayudas a madres solteras, apoyo y flexibilidad para jóvenes padres y madres estudiantes, a garantizar a esa niña-madre y a ese bebé las oportunidades que yo las tuve, a pesar de las circunstancias, a pesar del pasado. Tomo el camino difícil, porque lo que vale, cuesta. Aunque me llamen hipócrita”.

En la mañana de este domingo se registró un accidente de tránsito sobre la avenida Defensores del Chaco casi Quyquyho, en jurisdicción del barrio 3 de junio de Villa Elisa.

Se vieron involucrados en este percance un automóvil Kia Río color negro, guiado por Guillermo Iván Bittar Pérez (33), un taxi al mando de Julio César Godoy Cañete (57) y una motocicleta Star SK 125, conducida por Ulises Ariel Barrios (22).

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Según manifestó uno de los involucrados, la motocicleta circulaba a alta velocidad en medio de la avenida y, luego de realizar una maniobra imprudente, ingresó al carril contrario, por lo que ya no tuvo tiempo para evitar el choque.

Tras el primer impacto, la motocicleta volvió a ser embestida por el taxi que venía detrás, cuyo conductor tampoco pudo hacer nada para evitar el accidente.

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Barrios acabó con lesiones en el brazo lado izquierdo, mientras que su acompañante, Nelson Rodrigo Fernández Mancuello (21), resultó herido en la pierna lado izquierdo. Ambos fueron llevados al Hospital de Trauma para ser atendidos.

Por protocolo, ambos automovilistas fueron sometidos a la prueba de alcotest, arrojando como resultado negativo, señala el parte policial.

Alrededor de las 19:00 hs del viernes se registró una supuesta tentativa de extorsión sobre las calles Juan de Dios Peza y Nuestra Señora de la Asunción, en el barrio Obrero de Asuncion.

Resultaron afectados Hugo David Jacobo Platón y su pareja Adriana Isabel Cáceres Dapolo, quienes viajaban a bordo de un automóvil Toyota New Vitz color rojo en compañía de dos menores de edad.

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Según la denuncia, la familia fue interceptada cuando estaba a punto de llegar a su domicilio por un vehículo Volkswagen Gol rojo, del cual descendieron tres personas que se presentaron como agentes del Departamento de Investigaciones de la Policía Nacional.

Estos supuestos agentes policiales afirmaron que Jacobo —quien posee varios antecedentes penales— contaba con una orden de captura en su contra, razón por la que manifestaron tener que detenerlo.

Para evitar su captura y ”resolver el asunto”, le habrían exigido la entrega de G. 20 millones, solicitud a la que el denunciante no accedió, increpando posteriormente a estos tres desconocidos junto a su familia, que salió a defenderlo.

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Tras el confuso episodio, los supuestos policías acabaron huyendo del lugar, aunque el caso no quedó allí, ya que los afectados decidieron formalizar la denuncia en la Comisaría 4ª de Asunción.

Aparentemente, los autores de esta extorsión se encontraban en estado de ebriedad, conforme a la versión brindada por los denunciantes.

Un fallido intento de asalto se registró en la madrugada de este domingo sobre la avenida Fulgencio Yegros de Ciudad del Este, departamento de Alto Paraná.

Resultó víctima de este hecho de inseguridad Norma Figueredo Barrios, propietaria de la bodega “Normita Bebidas“, quien fue abordada por delincuentes.

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Dos criminales irrumpieron en el local de venta de bebidas e intentaron asaltar a la dueña, para lo cual utilizaron una réplica de fusil Mini UZI.

El esposo de la comerciante salió en ese momento y, al percatarse de que se trataba de un arma de juguete, se encargó de ahuyentar a los malvivientes, quienes finalmente se dieron a la fuga.

Tras dar aviso a la Policía Nacional, se produjo una persecución que acabó en la detención de uno de los implicados. Se trata de Leodan Quintana Brítez (22), en cuyo poder hallaron el arma falsa.

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La captura de este hombre fue posible luego de que la motocicleta en la que se desplazaban haya sufrido un desperfecto mecánico, obligándolos a seguir su huida a pie.

El cómplice, identificado como Bruno Esteban Núñez Ojeda(22), logró escapar de las autoridades, por lo que aún continúa prófugo de la justicia.