La fiscal de Itá Daisy Sánchez imputó a Liborio Fernández Vidaguren por estafa y producciòn de documentos no auténticos.

La denunciante explicó que necesitaba hacer un juicio de rectificación de título de lindero de su finca situada en Villeta y que para ello contrató a Fernández, por recomendación de una supuesta funcionaria del Indert

El “abogado” citó a la víctima frente a la Fiscalía y le solicitó la entrega de 3.150.000, además de otras sumas posteriores, todas ellas cobradas de forma inmediata, sin embargo, el hombre no cumplió con ningún trámite.

Entre las evidencias incautadas en poder del imputado figuran un sello y varios documentos a nombre de Liborio Fernández, cuyo nombre de matrícula registrado en la Corte Suprema de Justicia pertenecería a un abogado real.

Fernández posee otras denuncias por hechos similares y cuenta con antecedente por apropiación y orden de captura. Se presume que habría más víctimas.

A través de sus redes sociales, Santiago Peña reafirmó el compromiso del Poder Ejecutivo de garantizar la libertad de expresión para que los medios realicen su tarea sin impedimentos.

“¡Feliz Día del Periodista! Hoy recordamos el papel fundamental de quienes nos informan y velan por nuestra democracia”, expresó Peña.

La fecha que conmemora el Día del Periodista fue fijada en recordación al primer periódico publicado en el país: “El Paraguayo Independiente” el 26 de abril de 1845,

También un 26 de abril, pero de 1991, fue asesinado por la mafia el periodista Santiago Leguizamón, por informar la verdad a través de los medios.

Esta semana, el Poder Legislativo fue un escenario hostil para la prensa, cuando el diputado Yamil Esgaib reaccionó de manera agresiva contra dos periodistas, a quienes agarró de las muñecas y arrojó sus respectivos micrófonos.

Todo por la molestia que le generó la pregunta acerca del nombramiento de su hija en la Cancillería con un salario de 21 millones de guaraníes.

Ayer, en un operativo conjunto entre la ANDE, el Ministerio Público y agentes de la Policía Nacional, se realizó una intervención en un inmueble, ubicado en el Km 14 Monday, ciudad de Minga Guazú, departamento de Alto Paraná.

Este local contaba con un suministro en Baja Tensión a nombre de Ramón Martínez, con NIS 3236093, medidor N°3871845, y presumiblemente se encontraba con conexión directa en Media Tensión con un transformador de 1.000 kVA, ya que no contaba con placa identificatoria al momento de la verificación.

Como parte del procedimiento, la ANDE realizó la denuncia correspondiente ante el Ministerio Público por los delitos de “sustracción de energía eléctrica, perturbación de servicios públicos, así como sabotaje”. El fiscal Alcides Giménez encabezó el allanamiento que derivó en la incautación de un total de 476 procesadores de Criptominería, además del mencionado transformador.

Todos los elementos fueron trasladados al depósito de la fiscalía, bajo la responsabilidad del fiscal interviniente. Asimismo, se retiraron aproximadamente 300 metros de línea en Media Tensión, además de la acometida del inmueble.

Según el análisis realizado por la ANDE, el daño patrimonial mensual se estima que alrededor alrededor de G. 270.000.000. Este monto, además de los costos derivados de la intervención y la aplicación de la multa, deberán ser abonados por los responsables.

Fiscalía y policía realizaron hoy varios allanamientos en la ciudad de Limpio, departamento Central, tras los pasos de una banda de ladrones.

Detuvieron a dos hombres implicados en una seguidilla de robos domiciliarios con un ingrediente “novedoso”: el uso de sofisticados inhibidores de alarmas de viviendas, las cuales eran desactivadas por el tiempo en que los delincuentes vaciaban las casas de las víctimas.

“Son personas que activaban inhibidores para anular las alarmas, lo que simplificaba sus acciones. Hay que destacar el trabajo de la Policía para las detenciones”, señalo la fiscal Sara Torres en comunicación con la 1020 AM.

la detención de los dos sujetos se suma a otras aprehensiones de miembros de la misma banda.

De acuerdo a investigadores, los delincuentes fichaban los comercios y viviendas y procedían a aplicar sus dispositivos para desactivar los sistemas de control electrónicos.

El uso de estos artefactos era, hasta ahora, usado solo para inhibir los GPS de vehículos robados, así como para robar autos.

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