Damnificados regresan a sus casas tras la crecida

Cerca de 25.000 afectados por las inundaciones del pasado diciembre en Asunción, que obligaron a desplazarse de sus hogares a unas 100.000 personas en la capital, regresaron a sus casas después de que el nivel del río haya descendido por debajo de los cuatro metros de altura.

Con estos datos, la Dirección de Gestión y Reducción de Riesgos y Desastres de la Municipalidad de Asunción estima que el Operativo Retorno de estas familias, iniciado hace una semana, ya ha alcanzado al 40 % de las más de 60.000 personas que continuaban desplazadas de sus hogares, declaró a Efe Aníbal Arias, miembro de este departamento.

Pese a ello, unas 40.000 personas permanecen todavía refugiadas en precarias casetas de madera y chapa diseminadas por parques, paseos centrales de las calles, plazas y otros espacios públicos, así como en predios militares.

Algunos refugios, como el que funcionaba en la plaza Expopar, en el barrio Republicano de Asunción, ya han quedado prácticamente despoblados, y las tareas de la Municipalidad se centran en la limpieza y la retirada de escombros para rehabilitar el parque, según Arias.

El técnico admite que en esta zona los vecinos, en su mayoría de un nivel económico medio-alto, reclamaron con frecuencia a la Municipalidad que desalojara de las plazas del barrio a los damnificados por las inundaciones, que proceden de los barrios empobrecidos de la capital.

En otros espacios, como la cancha de tierra del club deportivo Pablo Rojas, en el mismo barrio, se refugiaron más de 1.600 personas entre diciembre y enero, cuando la crecida del río Paraguay alcanzó su nivel crítico, con 7,88 metros de altura a su paso por Asunción, y decenas de miles de hogares anegados de agua.

Hoy apenas quedan en esta cancha las casetas de tres familias, y los funcionarios municipales ayudan a algunas de ellas a desmontar sus refugios provisionales y cargar sus muebles en camionetas, para trasladarlos de vuelta a sus casas.

Es el caso de Leticia Cabral, del barrio ribereño de Caacupemí, que hoy, después de nueve meses desplazada, desclava los puntales de madera que sostienen las paredes y el techo de la caseta, con cuidado de no dañar los materiales, ya que dice que no sabe si los volverá a necesitar en caso de que el río vuelva a desbordarse.

Aseguró que, una vez regrese a casa, tendrá que volver a conectar la instalación eléctrica, el agua potable y otros servicios que quedaron interrumpidos a raíz de la inundación, además de limpiar el barro y otros residuos que el río trajo hasta el patio de su vivienda.

La Municipalidad presta su apoyo en estas tareas, así como en el arreglo de las calles y la canalización de arroyos, ya que barrios enteros quedaron “devastados” después de “tres grandes inundaciones consecutivas”, la última de ellas en diciembre, y que fue la mayor registrada desde 1982, según Arias.

Sin embargo, la recuperación de estos lugares es lenta, y aunque en muchas zonas el agua ya se ha retirado, continúan rebasadas de barro y residuos, como sucede en los barrios cercanos al vertedero de Cateura, donde muchas familias cruzan canales repletos de basura con sus colchones y muebles a cuestas, hasta llegar de regreso a sus casas.

En diciembre de 2015, cerca de 100.000 personas, en su mayoría procedentes de los Bañados, los barrios ribereños de Asunción, tuvieron que abandonar sus casas por la crecida estacional del río Paraguay, que se vio agravada por el fenómeno climático de El Niño.

El Gobierno paraguayo solicitó a los afectados por estas inundaciones que permanecieran refugiados en casetas ubicadas en espacios públicos y recintos militares, y les pidió que no regresaran a sus hogares, en previsión de que las inundaciones se agravaran en junio.

Sin embargo, a lo largo de este mes el nivel del río continuó con su tendencia descendente y se aproximó a su caudal normal, por lo que muchos pobladores han logrado al fin regresar a casa.

Peña reglamenta ley que crea el Sistema Nacional de Investigadores

El Poder Ejecutivo emitió el Decreto por el cual se reglamenta la Ley Nº 7064/2023, “Que crea el Sistema Nacional de Investigadores (SISNI) y establece la carrera del investigador científico”. Para muchos significa un gran paso hacia un desarrollo de la ciencia en Paraguay.

La reglamentación de esta ley implica que el científico paraguayo va a tener mejores herramientas para poder realizar su tarea, y la carrera misma del investigador toma otra preponderancia, según explicó el presidente del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), Benjamín Barán, quien además destacó que la carrera del investigador está plenamente vigente.

El decreto firmado por el presidente Santiago Peña busca sentar las bases para la implementación de una política pública que impulse la labor científica, con observancia de principios y valores éticos, esperando que su labor redunde en beneficio de la calidad de vida de toda la población.

Por su parte, el asesor presidencial en materia científica, Antonio Cubilla, destacó que esta reglamentación marca un hito en la historia de la ciencia paraguaya y resaltó el gran apoyo del presidente Santiago Peña quien brindó todas las garantías para que se lleve adelante este proyecto.

Asimismo, se crea una estructura orgánica dentro del sistema que tendrá como rol la implementación de las disposiciones legales y reglamentarias que rigen la actividad científica y, en particular, los mecanismos y lineamientos para el acceso, permanencia, ascenso, descenso o salida de los investigadores del sistema.

Allanan planta transmisora ilegal y requisan equipos

Una comitiva fiscal allanó una planta transmisora en Juan León Mallorquín por operar ilegalmente.

El fiscal Edgar Benítez Delgado, de la Unidad Especializada en la Lucha contra la Propiedad Intelectual, el Contrabando, Lavado de Dinero y Financiamiento del Terrorismo, allanó el local de “Cable Visión Kaarendy” de la ciudad de Juan León Mallorquín y decomisó equipos codificadores que transmitían señales ilegalmente.

La intervención se produjo tras una denuncia presentada por representantes de empresa Teledeportes Paraguay y en cumplimiento de una disposición judicial firmada por el juez de atención permanente, Amílcar Antonio Marecos.

Los responsables del hecho serán investigados por los presuntos delitos de violación del derecho de autor y aprovechamiento clandestino de señal.

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Más de 2.200 familias afectadas por inundaciones

Hasta el momento se contabilizan 2.268 familias afectadas por inundaciones ocasionadas por las intensas lluvias registradas en territorio nacional, según el Centro Nacional de Información y Vigilancia de Salud.

La mayor proporción de las 2.268 familias afectadas se reporta en Ñeembucú, departamento declarado en situación de emergencia. Allí, hay 2.204 familias damnificadas y desplazadas por la crecida de las aguas, con anegamiento de sus viviendas, pérdidas materiales y daños en cultivos. Igualmente se encuentran afectadas unas 64 familias provenientes del departamento de Misiones.

De dicha cifra, las Unidades de Salud de la Familia (USF) asistieron a unas 1.628 personas, con atención médica y vacunación. También se brindó provisión de víveres a través de la gobernación de Ñeembucú.

Los principales problemas de salud registrados fueron diarrea y enfermedades tipo influenza (ETI). No se registran accidentes por animales ponzoñosos.

Existe una alta probabilidad de que se generen fenómenos de tiempo severo en el transcurso de lo que queda de esta semana en Misiones y Ñeembucú.

En Limpio, Pilar y Tacuaras se estableció emergencia distrital.