Vacunas e implantes en vez de la píldora diaria será en breve un avance en el tratamiento del VIH

El avance en el tratamiento contra el VIH a través de métodos que permitan que el paciente reciba una vacuna o un implante en la piel sigue como debate a nivel mundial. La profilaxis pre-exposición para grupos de riesgo ya implementada en Brasil y México, en Paraguay solo está disponible en el sector privado.

La píldora diaria de por vida que es actualmente el tratamiento contra el VIH podría ser reemplazado por vacunas e implantes en la piel cuyos efectos médicos duran por meses, estos métodos podrían sumar adherencia de las personas que viven con VIH.

También se encuentra en debate a nivel mundial la profilaxis pre-exposición (Prep), un tratamiento preventivo dirigido a personas VIH – negativas pero consideradas en riesgo, como parejas de personas VIH – positivas, consumidoras de drogas, trabajadoras sexuales u hombres que tienen sexo con hombres (HSH).

Este tema fue debatido en la 10° Conferencia Científica Mundial sobre VIH (IAS 2019) realizada en México así como la disminución mundial del financiamiento y la necesidad de aumentar las acciones contra el estigma y la discriminación, explicó Martín Negrete, investigador de la Fundación Vencer que participó del evento.

En estos tiempos en que existe un avance en la cura, Negrete afirmó que es posible que no se vean los resultados a corto o mediano plazo y donde sí hay avances es en el tratamiento.

Sobre el tratamiento preventivo, explicó que tiene más del 90% de seguridad y ya se está implementando en sistemas públicos de salud de países de al región como Brasil o México.

En Paraguay solo está disponible en el sector privado no así en el sector público.

“Hay gente a favor, porque está comprobado que funciona, y otras dicen “por qué medicalizar a personas sanas, y que eso les puede traer consecuencias en salud, como efectos secundarios hepáticos o renales”, indicó el profesional.

El financiamiento de acciones de prevención a nivel mundial están sufriendo reducción y en contrapartida los Estados deberían asumirlo y no lo están haciendo, alertó Negrete.

En el ámbito local indicó que una vez que terminan los proyectos, se quede sin acciones de prevención si el Estado no asume. Citó como ejemplo que el Fondo Mundial financia grandes proyectos para tuberculosis y VIH en Paraguay y están en etapa final, y en los últimos años irá disminuyendo.

Así como hay avances en tratamiento y prevención no es igual en los casos de estigma y discriminación ya que sigue siendo una barrera para que las personas con VIH accedan a sus derechos y una buena calidad de vida y esta sigue siendo una gran deuda, afirmó el investigador.

Para Negrete, una necesidad es la promulgación de una ley marco contra la discriminación aunque se cuente con la Ley 3940.

“Pero las personas que viven con VIH no son discriminadas solamente porque viven con VIH, las personas con VIH también son gays, son trans, son mujeres, son indígenas, personas con discapacidad y también son discriminadas por eso. Ahí hay un doble estigma. Por eso es muy importante contar con un marco legal contra la discriminación”, señaló.

La implementación de la Educación Integral de la Sexualidad (EIS) es un tema de difícil implementación por la coyuntura social pese a que no solo entran temas relacionado con prevención del VIH e infecciones de transmisión sexual sino también el aspecto de estigma y discriminación.

Sobre el punto, recordó la resistencia del MEC Para abordar estos temas. “Hay una serie de barreras que nos impiden introducir o trabajar prácticamente lo que es estigma y discriminación”, puntualizó.

Descubren fósiles de tortuga gigante de 57 millones de años en Colombia

Paleontólogos descubrieron fósiles de tortuga gigante de 57 millones de años de antigüedad en Colombia, informó este martes la universidad que lideró la exploración, cuyos resultados son clave para entender la geografía de Sudamérica en las épocas del Paleoceno y Eoceno.

Los fósiles de los reptiles Puentemys mushaisaensis, que se calcula medían cerca de 1,5 metros de largo, fueron hallados en el montañoso municipio de Socha (noreste), aseguró la Universidad del Rosario en un comunicado.

El descubrimiento es inédito en esta zona andina, pues los ejemplares de esta especie más cercanos están a cientos de kilómetros en El Cerrejón, una mina de carbón cercana al mar Caribe.

“Encontrarlas 500 kilómetros al sur (...) nos permite reconstruir y entender cómo eran los paisajes” del norte de Sudamérica, pues en lugar de las actuales montañas andinas de hasta más de 5.000 msnm allí había “lagos conectados y cordilleras de muy baja altitud”, explicó Edwin Cadena, el paleontólogo a cargo de la investigación.

El estudio “permite conocer mejor la conectividad de los ambientes acuáticos del norte de Sudamérica durante una parte del tiempo geológico conocido como el Paleoceno y Eoceno”, añade el comunicado.

Ambas épocas hacen parte del Paleógeno (66 a 23 millones de años atrás), el primer período geológico después de la extinción de los dinosaurios.

Fuente: AFP

Verse a uno mismo durante videollamadas causa cansancio mental, según estudio

La sensación de agotamiento afecta tanto a hombres como a mujeres de manera similar, lo que contradice los resultados de investigaciones previas.

Verse a uno mismo en la pantalla durante videollamadas en plataformas como Zoom o Teams causa cansancio mental, según en un estudio publicado recientemente en la revista científica Cyberpsychology, Behavior, and Social Networking.

Los investigadores de la Universidad de Galway (Irlanda) evaluaron la actividad cerebral de 32 personas (16 hombres y 16 mujeres) mediante electroencefalogramas mientras estaban en una videollamada en Zoom, y en distintos momentos de la comunicación se mostraban o se ocultaban en su propia pantalla.

Los resultados revelaron que los niveles de cansancio fueron mayores cuando los participantes podían verse a sí mismos, y esto afectaba tanto a hombres como a mujeres de manera similar. Esta conclusión contradice las deducciones de investigaciones previas que afirman que las mujeres experimentan más cansancio que los hombres dado que tendrían “la mayor conciencia de sí mismas generada al verse en una pantalla”, señala el estudio.

“Nuestro estudio demuestra que la sensación de cansancio que surge durante las videollamadas es real y el hecho de ver nuestro propio reflejo lo hace aún más agotador”, indicó Eoin Whelan, quien dirigió la investigación. “Desactivar la imagen en espejo puede ayudar a compensar la sensación de cansancio en las reuniones virtuales”, agregó.

Demasiada comida chatarra podría causar daños duraderos al cerebro

Investigadores consideran que esto puede deberse a que las dietas occidentales alteran un neurotransmisor cerebral clave implicado en la retentiva y otras funciones.

Neurocientíficos de la Universidad del Sur de California (USC) en EE.UU. descubrieron que la ingesta abundante de una dieta occidental, alta en grasas y azúcar, desde la temprana edad, puede provocar problemas duraderos de memoria en animales de laboratorio.

“Lo que vemos […] es que, si estas ratas crecieron con esta dieta de comida chatarra, entonces tienen problemas de memoria que no desaparecen”, explica Scott Kanoski, profesor de la USC. “Si simplemente los sometes a una dieta saludable, estos efectos lamentablemente duran hasta la edad adulta”, agregó.

La concepción de la investigación

Al desarrollar el estudio, Kanoski y su estudiante de postdoctorado, Anna Hayes, tuvieron en cuenta el antecedente de que las personas que padecen la enfermedad de Alzheimer tienden a tener niveles más bajos de acetilcolina en el cerebro. Los investigadores consideran que esto puede deberse a que las dietas occidentales alteran la acetilcolina, un neurotransmisor cerebral clave implicado en la retentiva y funciones como el aprendizaje, la atención, la excitación y el movimiento muscular involuntario.

Los científicos se cuestionaron sobre el impacto que podrían tener estas dietas occidentales para las personas más jóvenes que pueden seguir una dieta similar, particularmente durante la adolescencia, cuando su cerebro está experimentando un desarrollo significativo.

Los experimentos

Los investigadores rastrearon los niveles de acetilcolina de un grupo de ratas con una dieta grasosa y azucarada y en un grupo de control de ratas analizando sus respuestas cerebrales a ciertas tareas diseñadas para probar su memoria.

La prueba implicó dejar que las ratas exploraran nuevos objetos en diferentes lugares. Días después, los investigadores reintrodujeron a las ratas en la escena, que era casi idéntica, excepto por la adición de un objeto nuevo. Las ratas que siguieron la dieta de comida chatarra mostraron signos de que no podían recordar qué objeto habían visto anteriormente ni dónde, mientras que las del grupo de control mostraron familiaridad.

Conclusiones

Según los científicos, su estudio refuerza el importante vínculo entre el intestino y el cerebro. “La señalización de acetilcolina es un mecanismo para ayudarles a codificar y recordar esos eventos, análogo a la ‘memoria episódica’ en los humanos, que nos permite recordar eventos de nuestro pasado”, subrayó Hayes. “Esa señal parece no ocurrir en los animales que crecieron con una dieta grasosa y azucarada”, añadió. La investigación se publicó recientemente en la revista científica revisada por pares Brain, Behavior, and Immunity.

Kanoski enfatizó que la adolescencia es un período muy sensible para el cerebro cuando se están produciendo cambios importantes en el desarrollo. “No sé cómo decir esto sin sonar como Casandra y pesimismo”, apuntó, “pero desafortunadamente, algunas cosas que pueden ser más fácilmente reversibles durante la edad adulta son menos reversibles cuando ocurren durante la niñez”, agregó.

Finalmente, los investigadores lograron revertir la capacidad de memoria en las ratas experimentales con medicamentos que inducen la liberación de acetilcolina, inyectada directamente en el hipocampo cerebral. Sin embargo, Kanoski señala que se necesita una investigación más amplia para saber cómo se pueden revertir los problemas de memoria, causados por una dieta de comida chatarra durante la adolescencia, sin necesidad de una intervención médica tan especial.