Ecuador declara estado de excepción tras la muerte de 5 policías a manos de narcos

Varios atentados perpetrados por bandas de narcos dejaron el martes cinco policías muertos en Ecuador, lo que llevó al presidente Guillermo Lasso a decretar el estado de excepción para las dos provincias más golpeadas por el crimen vinculado al tráfico de drogas.


Fuente: AFP

 

“Estoy declarando el estado de excepción en las provincias de Guayas y Esmeraldas, y el toque de queda a partir de las nueve de la noche (02H00 GMT)”, expresó el mandatario por radio y televisión, sin precisar hasta cuándo se extenderá la medida.

La Constitución permite al mandatario declarar el estado de excepción ante una grave conmoción interna y disponer el empleo de las Fuerzas Armadas.

El Ministerio del Interior informó que los atentados del martes dejaron “5 policías fallecidos” en el puerto comercial de Guayaquil (suroeste ecuatoriano y capital de Guayas) y la vecina localidad de Durán.

Previamente, el titular de esa cartera, Juan Zapata, dio cuenta de dos policías muertos en Guayaquil, así como de otros dos heridos.

La criminalidad que se registra en Ecuador, donde bandas de narcotraficantes se disputan a fuego el poder en cárceles y calles, también derivó en la retención temporal de ocho guardias penitenciarios en un reclusorio del puerto petrolero de Esmeraldas (noroeste y capital de la provincia del mismo nombre).

 

– “Declaratoria de guerra” –

Organizaciones del narcotráfico perpetraron una decena de ataques con explosivos y bala en instalaciones policiales y gasolineras como respuesta al traslado de presos de la cárcel Guayas 1 de Guayaquil, uno de los principales escenarios de las repetidas masacres entre reclusos que dejan unos 400 muertos desde febrero de 2021.

Las autoridades precisan que 61 policías fallecieron este año también por la violencia.

“Estos actos de sabotaje y terrorismo son por así decirlo una declaratoria de guerra abierta contra el Estado de derecho, el gobierno y contra todos ustedes, los ciudadanos”, manifestó el gobernante.

Sostuvo que “hoy la narcodelincuencia se siente incómoda y manifiesta su malestar con violencia”.

Ubicado entre Colombia y Perú, los mayores productores mundiales de cocaína, Ecuador pasó de ser un país de tránsito de drogas a importante centro de distribución hacia Europa y Estados Unidos.

En 2021, el país incautó el récord de 210 toneladas de drogas, en su gran mayoría cocaína. En lo que va del año los decomisos suman 160 toneladas.

A raíz de la retención temporal de ocho guardias carcelarios en Esmeraldas, por redes sociales circuló un video en el que aparecen dos agentes con explosivos adheridos a sus cuerpos.

“Si quieren guerra, guerra van a tener”, dice en el video un hombre con su rostro cubierto, agregando que “les vamos a explotar a estos guías”.

 

– A recuperar espacios –

Con el apoyo de militares y policías, el SNAI trasladaba en principio a 200 presos de la cárcel guayaquileña Guayas 1 hacia otros reclusorios.

Su director, Guillermo Rodríguez, declaró a la prensa que esta medida se tomaba para “recuperar espacios” y anotó que la superpoblación en un pabellón llegaba al 100%.

Esa prisión es la más poblada de Ecuador con casi 6.900 presos y cada pabellón está controlado por un solo grupo criminal como los Lagartos y Tiguerones, que según medios locales reaccionaron ante el traslado de reclusos.

Lasso, quien suspendió un viaje previsto para este miércoles a Estados Unidos, señaló que se dirige a Guayaquil para “liderar el puesto de mando unificado”.

El mandatario añadió que la fuerzas del orden “van a intensificar sus operativos para garantizar la seguridad”.

El sábado se disputó en Guayaquil la final brasileña de la Copa Libertadores 2022, con victoria (1-0) de Flamengo sobre el Athletico Paranaense. Al partido llegaron unos 50.000 visitantes, según autoridades, y se desarrolló con normalidad.

Ante la violencia, en ese puerto rigió el estado de excepción por 60 días desde el 14 de agosto.

Las cárceles de Ecuador tienen capacidad para unas 30.200 personas, pero albergan a 32.400, registrándose una superpoblación de 7% frente a 30% de 2021.

El lunes, al estilo de crímenes de los carteles mexicanos, los cuerpos de dos personas decapitadas aparecieron colgando de un puente peatonal de Esmeraldas.

La guerra por el poder entre organizaciones narcos ha llevado a que la tasa de homicidios, que en 2021 casi se duplicó a 14 por cada 100.000 habitantes, creciera a 18 entre enero y octubre de 2022.

sp/dga

Milei y su ‘diplomacia’ de la agresión verbal jaquea relación de Argentina con España

El presidente de Argentina, Javier Milei, puso a su país al borde del quiebre diplomático con España, tras lanzar la acusación de “corrupta” en contra de la esposa del presidente español Pedro Sánchez, y de tildar de “satánico” al partido de gobierno, el PSOE.

En su primer viaje a España, Milei no solo no se reunió con Sánchez ni con el rey Felipe Vi, sino que “dinamitó” las relaciones de ambos países.

Milei en contrapartida se reunió con el líder del partido de ultraderecha VOX, Santiago Absacal.

También sostuvo un encuentro con empresarios, como los directivos de los bancos BBVA y Santander, la empresa de telecomunicaciones Telefónica y la aerolínea Iberia.

Javier Milei, además de atacar a la primera dama española, tildó al socialismo de “satánico” y “cancerígeno”, en la primera jornada de una visita a España en la que recibió un nuevo ataque de un miembro del gobierno del socialista Pedro Sánchez.

“No dejemos que el lado oscuro, negro, satánico, atroz, espantoso, cancerígeno, que es el socialismo, nos gane”, dijo Milei en una charla sobre su libro “El camino del libertario”.

Durante un discurso en un encuentro en Madrid de dirigentes de extrema derecha organizado por el partido español Vox, Milei se refirió a Begoña Gómez como “mujer corrupta”.

Aunque no identificó a Sánchez o a su esposa por su nombre, la alusión de Milei al periodo de reflexión que se tomó él para decidir si dimitía por los ataques a su esposa permitió identificar a la pareja.

Liberan a un hombre inocente que pasó 12 años en prisión acusado de violación en Brasil

Carlos Edmilson da Silva fue condenado a 137 años, 9 meses y 28 días de cárcel por violar a varias mujeres. Ninguna instancia comparó su ADN con el de las víctimas.

Carlos Edmilson da Silva pasó 12 años injustamente encarcelado en Sao Paulo, Brasil, tras ser condenado a 137 años, 9 meses y 28 días de prisión por violar a varias mujeres. Después de demostrase su inocencia, la semana pasada recuperó su libertad.

Su infierno, del que se hacen eco los medios, comenzó el 10 de marzo de 2012, cuando la Policía le acusó de violar a 10 mujeres en Barueri y Osaco, ciudades situadas en la región metropolitana de Sao Paulo. Su foto estaba en el archivo de la Policía por un robo cometido en 2006 y fue identificado como el autor de los crímenes.

Carlos, que entonces tenía 24 años y trabajaba como jardinero, defendió su inocencia, pero ninguna instancia comparó su ADN con el material biológico de las víctimas. Calificado como una “maníaco”, ingresó en prisión.

Su caso dio un giro inesperado cuando intervino el instituto ‘Innocence Project Brasil’, organización que ayuda de manera gratuita a víctimas de errores judiciales. Tras solicitar una comparación de su ADN con el de las víctimas no solo se demostró su inocencia, sino que se descubrió al verdadero criminal: José Reginaldo dos Santos, de 34 años, y que ya se encuentra en la cárcel por robo.

Errores judiciales

“Las víctimas no mentían. Estamos ante una situación muy triste de mujeres que fueron violadas y a las que se les hizo creer que reconocían al hombre que las violó”, explicó Flavia Rahal, directora de Innocence Project Brasil, al portal G1.

Sin embargo, la experta detalló que “la forma en que se hizo ese reconocimiento fue una muy inductivo, porque en la gran mayoría de los casos se les puso [a las víctimas] una sola fotografía de este único chico” y se afirmó que “era una persona que había sido reconocida en otros casos”.

Rahal destacó que no se buscó ninguna otra prueba. “No tenemos una imagen de una cámara de seguridad, no hay un localizador de celular que indique que estuvo en esos lugares, no tenemos una sola prenda de vestir incautada, no tenemos nada más que un reconocimiento”, comentó.

Para la especialista el reconocimiento fotográfico es “una de las principales causas” de errores judiciales en Brasil. El portal UOL indica que, en 2023, el Supremo Tribunal de Justicia (STJ) revocó la prisión provisional o absolvió a 377 personas, y en un 74,6 % de los casos fue por errores de identificación fotográficas.

“La Justicia es defectuosa. Es urgente que estas personas víctimas del error sean indemnizadas. El Estado necesita, en este proceso de reconocimiento de su error, reconocer también que está en deuda con una indemnización”, afirmó Rahal.


Habló la joven que denunció a exjugadores de Vélez: “Después de violarme, se fueron a jugar al casino”

Abiel Osorio, Braian Cufré y José Florentín están con prisión preventiva en Tucumán. “Ellos hacían como si nada hubiera pasado”, aseguró en diálogo con TN.

Luli quiere hablar. Tiene mucho para decir. A medida que pasan los días, recuerda más y más cosas. Su cabeza parece detenida en el tiempo, fijada en una fecha en el calendario que lo cambió todo. Una noche fatal donde su admiración por un jugador de futbol la sumergió en el peor de los infiernos. Luli no llora ni se abruma. Luli habla.

Todo empezó el pasado 2 de marzo luego del empate de Atlético Tucumán y Vélez en la Copa de la Liga. Luli había tomado sol en la pileta de su casa, junto a amigos y familia. La noche de ese sábado no podía ser más que entretenida. Ir a la cancha junto a su mejor amiga a ver un partido que prometía. Se preparó con su short de fútbol preferido y una musculosa blanca. Nada podía arruinar semejante plan. Jamás imaginó que el infierno iba a venir de la mano de los jugadores a quien ella tanto creía conocer y admiraba.

El primer contacto fue en la zona mixta del estadio tucumano donde periodistas y jugadores se cruzan después de los partidos. Desde el micro los de Vélez se asomaban por la ventana mirando el entusiasmo del periodismo local. Luli era parte del grupo. Su bronceado y su bermuda deportiva la distinguían de los lugares comunes. El arquero uruguayo Sebastián Sosa lo advirtió de inmediato. Fijó su mirada en ella, hizo muecas y ademanes hasta llamar su atención. El resto vino de la mano de un mensaje privado en su cuenta de Instagram: “Sos vos, te encontré”.

Sosa tuvo el comportamiento de un caballero: la invitó a tomar algo en el hotel Hilton, lugar donde concentraban los jugadores. Luli le aclaró que solo iría si no se desubicaban sus compañeros. También se inventó un novio para que no pensaran que estaba soltera. Y allí fue, confiada que el día terminaría tan bien como había empezado.

Llegó al hotel pasada la medianoche. Subió a la habitación 407 donde se encontró con el jugador. Poco después se sumaron Abiel Osorio, Braian Cufré y José Florentín. Charlaron un rato y comenzaron a tomar alcohol. Sobre esto, Luli aclara en una entrevista para el noticiero TN de 10 a 13 algo que cuesta comprender a quien es ajeno a ese mundo: “El futbol es un ambiente de hombres y mi trabajo es moverme entre ellos. Para mí es lo más normal del mundo verlos moverse en grupo, o reunidos una concentración en los hoteles”.

La noche continuó entre anécdotas, cerveza y fernet servido en un termo blanco. Luli no tiene dudas que ese termo tenía alguna sustancia química que la dejó indefensa y sin resistencias. Con el correr de los días volvió a la escena del termo una y otra vez. Finalmente pudo rearmar el rompecabezas: sólo ella y Sosa habían tomado. El resto fingía, pero luego bebían cerveza.

No pasó mucho tiempo para que empezara a sentir que el suelo se movía y todo le daba vueltas. Cuando quiso pedir ayuda a Sosa, el arquero ya estaba desplomado en la cama, o al menos eso parecía.

La sucesión de hechos son el retrato de una brutal violación en grupo. La joven pidiendo ayuda mientras Florentín y Cufré se aprovechaban de su estado de indefensión para abusar de ella en simultáneo. Ella asegura que Cufré la tomó de los pelos y la obligó a practicarle sexo oral mientras Florentín la violaba por detrás.

Luli cuenta los hechos con lujo de detalles. No tiene angustia ni pudor. Habla con la certeza de quien sabe que le tendieron una emboscada. “Después de que me violaran, Florentín y Cufré se vistieron y se fueron a jugar al casino. Quedé tirada en la cama sin entender bien qué estaba pasando. Comencé a sangrar. Como pude me arrastré al baño para limpiarme. Regresé y me volví a tirar porque seguía mareada y no encontraba mi ropa. Allí advertí que Sosa seguía o parecía estar dormido y Osorio jugaba la play como si nada hubiera pasado. Empiezo a reprocharle lo que me habían hecho sus amigos y cómo no intercedió para evitar que me violaran. De repente, cuando pensé que lo peor ya había pasado, Osorio saltó de una cama a la otra y comenzó a violarme él también”.

Seis horas duró la pesadilla. Todo fue confusión, miedo y desesperación. Como pudo logró pararse, buscar su ropa y escapar del hotel. En el camino le escribió a Sosa buscando alguna respuesta a la trampa que le habían tendido. Las respuestas parecían sacadas de un manual del violador: someter a la víctima, ultrajarla y pensar que a pesar de todo la había pasado bien.

Los días siguientes fueron de desasosiego, angustia y soledad. Su memoria comenzó a despertarse y el grito ahogado de aquella noche fue encontrando las palabras. El 6 de marzo, acompañada por sus padres y su abogada, Patricia Neme, Luli se presentó en la división Delitos contra las personas de la Policía de Tucumán para realizar la denuncia.

Los exjugadores están presos desde entonces. Luli lleva ocho audiencias yendo a tribunales para relatar una y otra vez lo que pasó en la madrugada del 3 de marzo en el hotel más lujoso de la provincia.

Luli no sabe cómo será su vida de ahora en más. Lo único que tiene claro es que si no repara esa pesadilla con el peso de la ley, sus días quedarán suspendidos en el tiempo. Sólo la justicia le va a poder devolver un futuro.

El calvario de la joven que denunció a los exjugadores de Vélez: “Tengo una angustia que no se puede frenar”

“Por momentos tengo una angustia que no la puedo frenar. Me asusta mi futuro. ¿Cómo sigo? ¿Me voy a poder reincorporar a mi trabajo de periodista deportiva? ¿Qué jugador va a confiar en mí? ¿Cómo me saco el estigma de que yo fui la p*** que fue a acostarse con los jugadores de Vélez? Me llama la atención el prejuicio que hay con las víctimas de abuso sexual. ¿Acaso esperan vernos golpeadas, chorreando sangre, con depresión y ojeras?”. Con esas palabras punzantes la periodista tucumana describe el estigma con el que cargan quienes se animan a denunciar.

Es cierto que en muchos casos de delitos sexuales la mayoría de las preguntas van hacia la denunciante más que a los acusados: ¿para qué fuiste?, ¿por qué te vestiste así?, ¿por qué no les pegaste?, ¿Cómo que te quedaste quieta?

Una y otra vez, las opiniones están puestas en que si el abuso ocurrió, la víctima algo hizo para que los hechos sucedieran. Es paradójico, porque si uno va a denunciar el robo de una billetera nunca van a pedirte que muestres un moretón para dar por cierta la denuncia.

La abogada de Luli, Patricia Neme, tiene una amplia trayectoria en defender mujeres que enfrentan divorcios y acosos laborales y sexuales. Lleva años apuntalando a sus defendidas del prejuicio social. “No existe un manual de cómo tiene que actuar una víctima”, dice. “La gente entiende que una abusada tiene que aparecer golpeada y con la ropa arrancada. Y eso no es verdad”, agrega.

“Es muy doloroso ver los comentarios contra quien se anima a denunciar. Las mujeres cuestionan a las mujeres cuando nos están matando cada 24 horas. No hay empatía de género”, señala.

En los casos de abuso sexual la condena social a veces está por encima que la Justicia, y no siempre los señalados son los abusadores, sino la propia denunciante.

Estos casos dan cuenta que como sociedad tenemos una gran asignatura pendiente: queda mucho por hacer y mucho por educar en materia de abuso sexual.

Con información de TN Noticias.