Exsenador Carlos Amarilla repartió abrazos en la Parada del Orgullo 2023
El exsenador y exgobernador de Central, Carlos Amarilla, formó parte de la edición 2023 de la Parada del Orgullo, marcha de reivindicación de los derechos de la comunidad LGBTIQ+. El político repartió abrazos a las y los jóvenes asistentes.
El sábado 1 de julio tuvo lugar la comunidad LGBTIQ+ marchó por el centro histórico de Asunción, a fin de reivindicar una vez más sus derechos, negados por la sociedad paraguaya. Entre las y los presentes llamó la atención la presencia del político liberal Carlos Amarilla, exparlamentario y exgobernador de Central, quien junto a su esposa repartieron abrazos.
“Abrazos de papá todx” se leía en un cartel sostenido por Amarilla, mientras que el de su esposa rezaba “abrazos de mamá”. Por supuesto, muchas personas no dejaron pasar la posibilidad y se quedaban unos segundos a sentir los abrazos contenedores.
En redes sociales, muchas personas aplaudieron al matrimonio Amarilla, por sumarse a la causa y principalmente por su gran empatía. En comunicación con la 780 AM, Amarilla habló acerca su presencia en la marcha. “Nos sumamos a la alegría de esa gente maravillosa, compartimos con ellos”.
El mismo dio detalles de su iniciativa. “Detrás de esto hay una historia muy bonita. María Gloria y yo somos padres de chicos gays. Hace muchos años, nuestros hijos nos decían que somos geniales por apoyarlos y nos pidieron que le acompañemos en la marcha”, expresó.
Comentó que llegaron al microcentro asunceno y su hijo, Santiago les preparó carteles y les preguntó si se animaban a portarlos. “Nos apostamos en una esquina y llovieron los abrazos. Fue una experiencia fantástica, maravillosa, muy sentida, realmente”.
Amarilla dijo que luego de la manifestación conversó con sus hijos y Santiago le dejó una gran enseñanza a través de una reflexión. “Ayer ustedes le estaban mostrando a esas personas que abrazaron que hay esperanza, que algún día, sus padres también podrán darle ese abrazo”.
Acerca de su experiencia con su familia, sostuvo que tuvieron el privilegio y la gracia de sobrellevarlo bien desde un principio. “En la medida que descubrían su condición, lo hablamos en un ambiente de absoluta confianza, tranquilidad, armonía y compresión. Es una comunicación continúa, permanente, sostenida, que va enriqueciendo el ámbito familiar. Nunca hemos tenido inconveniente de relacionarnos y aceptar a nuestros hijos tal cual son”.
Afirmó que la homosexualidad “es una condición absolutamente natural, diríamos, de miles de personas, a lo largo de la historia de la humanidad. Simplemente se tratan de seres humanos”.
Mencionó que desde que reasumimos que son seres humanos, la dificultad de aceptación y comprensión van disipándose y facilita que los aceptemos tal cual y reafirmemos los vínculos afectivos, sin condiciones… son nuestros hijos, nuestros hermanos, nuestros amigos”.
“Esa invitación que nos hizo nuestro hijo para participar en la marcha el fin de semana pasado, lo que hace es reafirmar nuestra vocación da darles nuestro apoyo, no solo a nuestros hijos, sino a todos lo que necesiten de un abrazo y a los padres que necesiten conversar su propia experiencia, dialogar e incorporarse positivamente”, finalizó.
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El costo humano de la cruzada antitrans de Trump
Lorelei Crean, de 17 años, se la pasa visitando universidades, terminando trabajos escolares e intentando disfrutar de las vacaciones de primavera como cualquier adolescente estadounidense.
AFP
Pero la ofensiva del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, contra los derechos de la comunidad LGBTQ en sus primeros 100 días de gobierno, ha obligado a Crean, que es trans, a convertirse en activista a tiempo completo.
“Ha sido demasiado. Siento que voy a algo cada semana”, dice, mientras enumera la larga lista de mítines y eventos organizados para protestar contra Trump, que gobierna a golpe de decretos presidenciales.
En poco más de tres meses, el republicano ha dado al traste con los modestos avances en materia de derechos de las personas trans y las protecciones que había logrado esta pequeña comunidad en sus lugares de trabajo, el mundo académico y las instituciones federales.
El mes pasado, Trump emitió una orden ejecutiva que exige a las instituciones que reciben subvenciones federales para investigación o educación que pongan fin al tratamiento para cambio de género para menores de 19 años, y ordenó a su nuevo secretario de Salud que haga todo lo posible para acabar con esta práctica.
Una de las primeras medidas de Trump fue suspender la emisión de documentos con una “X” en la casilla de género neutro.
En enero, Trump decretó que “sólo hay dos géneros: masculino y femenino”.
A Crean, hace poco, le llegó por correo su nuevo certificado de nacimiento “con una ‘X’ en el pasaporte de género”. “Así que ahora todos mis documentos legales tienen una X”, señala.
“Mi existencia está en cierto modo en contradicción con la declaración de Trump”, afirma Crean en un parque cerca de su casa en el barrio de Washington Heights de Manhattan.
Trump ha intentado prohibir que las personas transgénero sirvan en el ejército, borrar las referencias a las personas trans en los consejos oficiales de viaje y castigar a los estados que permiten la participación de competidores trans en el deporte.
- “Hacer algo” -
“Todo el mundo tiene la sensación de odiar lo que ve en las noticias. Recibes una nueva notificación, ‘noticias de última hora, Trump ha hecho una locura o algo ilegal’”, dice Crean, con el puente George Washington que une Nueva York y Nueva Jersey a sus espaldas.
“Es algo que nos afecta a todos, no sólo a mí como joven trans, sino a todos mis amigos, a la gente de color, a otras personas queer. Es un ataque diario contra la gente”, afirma mientras varias personas toman el sol y escuchan música alrededor.
Y es que a las cosas habituales de su edad, como compaginar estudios con las visitas a las universidades y su apretada agenda de protestas se suma “la carga de vivir la vida como una persona trans en el Estados Unidos actual”.
Para el padre de Crean, Nathan Newman, de 57 años, “ha sido bueno que hayan podido canalizarlo, no para sentirse desesperanzados, sino para ver que pueden hacer algo”.
Decidir qué universidad visitar y en cuáles solicitar una plaza para estudiar no es fácil actualmente.
“Las leyes actuales contra las personas trans son un factor en mis decisiones universitarias porque, dependiendo del estado, no tendré derechos”, explica.
Las personas trans se enfrentan a una maraña de leyes y normativas locales que van desde el acceso a la atención sanitaria para la transición hasta el uso de los baños.
Incluso en la profundamente demócrata Nueva York, al menos una red de hospitales se plegó a la prohibición de Trump de ofrecer la transición bajo control médico a menores de 19 años, lo que Crean considera como una “primera señal” de que la administración actual va a “ser diferente de todo lo anterior”.
Sin embargo, Crean no se arredra y promete mantener sus protestas. “Hay gente que está saliendo a la calle y que antes no lo hubiera hecho”, dice con la esperanza de doblegar el brazo a la nueva realidad
‘La Comadre’ refuta dichos transfóbicos y se acerca a la comunidad: “Es un nuevo comienzo”
Kenny La Comadre salió al paso de la polémica generada tras los dichos de Lorena Arias sobre su persona y las mujeres trans. La instagramer pidió respeto a los derechos y un freno a los discursos de odio. Se mostró abierta a acercarse a la comunidad.
Luego de los controvertidos dichos de la exmodelo de los años 90, Lorena Arias, en la que pidió un límite a los comentarios de La Comadre y otras mujeres trans sobre sentir síntomas propios de la mujer en algunos días del mes, Kenny emitió un mensaje en sus perfiles en redes sociales.
“La transfobia no es una opinión. Es violencia. Y mientras eso exista, yo seguiré luchando. Por mí. Por las que vinieron antes. Y por todas las que vendrán. Como ya mencioné una vez como Miss pero no realicé la práctica, es un nuevo comienzo para dar mi apoyo a mis hermana”, inicia el texto en su post en Instagram.
“No todas tenemos la misma suerte porque no todas venimos del mismo sitio pero de alguna manera todas somos las mismas”, prosigue, abriendo la puerta a un acercamiento a la comunidad.
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Resalta que “la identidad de género es un derecho humano. Así lo reconoce la Organización de las Naciones Unidas y todo organismo internacional que defiende los principios de justicia y dignidad humana. Negar ese derecho, invisibilizarlo o atacarlo es perpetuar una estructura de odio, desigualdad y violencia”.
Sostiene que las mujeres trans no están compitiendo con mujeres cisgénero y tampoco buscan ocupar un lugar ajeno, “sino reclamar el espacio que siempre nos ha pertenecido: el de ciudadanas con plenos derechos. Derechos que no se mendigan: se exigen. Derechos que no son ideología: son humanidad”.
Por primera vez, reconoce los antecedentes de la colectividad trans: “Hoy podemos ver avances gracias a la valentía de las que vinieron antes. Ellas abrieron caminos en un país que intentó apagar sus voces. Pero esa libertad sigue siendo frágil, constantemente amenazada por discursos transfóbicos disfrazados de preocupación moral”.
“No confundamos opinión con odio. No toleraremos que la violencia se vista de argumentos”.
“Queremos un Paraguay donde la diversidad no sea motivo de exclusión, sino símbolo de orgullo nacional. Porque la igualdad no se pide de rodillas, se conquista de pie”, finaliza su texto.
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Nuncio apostólico insta a acercamiento entre Iglesia Católica y Comunidad LGBTIQ+
La iglesia católica en Paraguay y con la comunidad LGBTIQ+ podrían iniciar pronto un acercamiento. El nuncio apostólico en Paraguay, monseñor Vincenzo Turturro insta a autoridades locales a la apertura a la diversidad.
Por Aizar Arar (@AizarArar)
Una de las brechas socioculturales profundas en Paraguay corresponde a la barrera que separa desde siempre a la iglesia católica de la comunidad LGBTIQ+, debido a las costumbres y creencias universales que condenan principalmente el amor y la unión entre personas del mismo sexo.
Mientras en varios países las diferencias han disminuido, dando lugar a una mayor apertura, respaldadas por legislaciones, ya varios años atrás, en Paraguay la cuestión ha empeorado con el paso del tiempo. Sin embargo, hay esfuerzos por lograr cambios y uno de ellos tienen que ver con la Iglesia Católica, cerrada a los derechos de la comunidad.
El artista y activista por los Derechos Humanos, Hugo González, mantuvo una reunión con el nuncio apostólico Monseñor Vincenzo Turturro, con quien conversó sobre distintos puntos relacionados a miembros de la comunidad diversa en nuestro país. “Fue muy respetuoso y demostró apertura, tal cual como el Papa Francisco se muestra en sus declaraciones públicas”, dice Hugo en conversación con HOY.
González cuenta que hace como tres meses había remitido una nota dirigida al Papa Francisco a fin de ver las posibilidades de concretar una misa folclórica paraguaya en Roma, pero con músicos/as de la organización Repar + (Red Paraguaya de Artistas LGBTIQ+). “Creo importante visibilizar a Paraguay, su cultura y a su gente en espacios así, más aún porque localmente, en la iglesia todavía se promueven discursos poco inclusivos”, menciona.
Treinta días después de haber enviado la nota, que también fue en copia al Nuncio en Paraguay, Hugo fue contactado por la nunciatura para una reunión. En dicho encuentro trataron varios puntos: En lo que respecta a su proyecto tendrá que esperar, debido a que, entre otras cosas, la prioridad es la salud del Papa.
Otro de los temas fue la relación de la diversidad con la Iglesia Católica. En ese sentido, el nuncio instó a un diálogo con las autoridades locales de la institución “para que la sociedad también entienda que, por una parte, incluso en las diferencias podemos llevar a cabo acciones positivas, y por otra, abrir paso a una conversación para disminuir todo el sesgo que genera rechazo y odio hacia la comunidad”.
“El punto en común y de preocupación se da en las personas vulneradas que quedan en situación de calle, en adicciones y sin el pan de cada día, esto lo mencionó el mismo, el rechazo de algunas familias a quienes toman el valor para ‘salir del closet’ o ‘asumir su identidad’”.
PERSONAS TRANS
En lo que respecta a la comunidad trans en nuestro país, González indica que el nuncio es consciente de que la iglesia no está aún del todo familiarizada con algunos conceptos relacionados a la orientación sexual, identidad de género y otras que hacen parte a la comunidad LGBTIQ+, y coincidieron en que es un punto que debe abordarse adecuadamente ya que el odio y los ataques suelen ser producto de desinformación y viceversa.
“Hay oportunidades de colaboración que se pueden tomar entre la iglesia y la comunidad. El fin común es poder llegar a aquellas personas marginadas que se encuentran con algunas carencias o en situación de vulnerabilidad”, asevera.
Resalta el hecho de haber sido recibido en la Nunciatura Apostólica, siendo la primera persona de la comunidad para un encuentro con un representante diplomático de la Santa Sede y considera que de esta forma “la iglesia, siendo una institución regida por las escrituras, comienza a visibilizar a quienes son parte de la sociedad”.
Por otro lado, lamenta no estar recibiendo la misma respuesta de parte del gobierno pero remarcó que desde Repar+ seguirán insistiendo para hasta ser atendidos. “Una golondrina no hace primaveras”.
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