La información fue dada a conocer a través de Unicanal, por parte del titular de la entidad, Luis Rojas, quien indicó que el concepto de lucha contra el narco, debe tener nuevos paradigmas.

“La simple represión no alcanza, hay que atacar las estructuras financieras que construyen y sustentan el negocio narco”, reveló Rojas.

La disyuntiva que abren los encargados de investigar el crimen de Pablo Medina, así como la proyección de la lucha antinarco, es si existe el apoyo suficiente para desmontar los negocios que se levantan lateralmente al tráfico de drogas.

Los narcodólares que sobrevienen como fruto del tráfico de estupefacientes, están distribuídos en empresas, emprendimientos, bancos, cooperativas, que en concunto implican multimillonarios negocios legalmente constituídos.

COLUMNA VERTEBRAL

Jorge Figueredo, asistente fiscal en Curuguaty entre los años 2001 y el 2007, y que investigó el crimen de Salvador Medina (hermano de Pablo Medina) en 2001, declaró que las mafias del narco, construyeron su poder en Canindenyu, y el crimen organizado se constituyó en el motor de desarrollo económico de Curuguaty.

Agentes del Departamento de Investigaciones de Caaguazú y la División de Inteligencia de la Dirección de Investigación de Hechos Punibles el día de ayer procedieron a la captura de Máximo Dionisio Mendoza Díaz, alias “Piririta”, de 57 años.

Se trata de un supuesto narcotraficante que venía siendo buscado por las autoridades desde el año 2022, en el marco de la incautación de un cargamento de cocaína en la ciudad de Juan de Mena, Cordillera.

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Mendoza también es sindicado como supuesto autor del crimen del suboficial ayudante Marcos Ramón Bazán Cañete, de 29 años, ocurrido la semana pasada en la zona de Coronel Oviedo.

En aquella oportunidad, el uniformado -quien se desempeñaba como custodio del diputado colorado Derlis Rodríguez- había tratado de impedir un asalto a un local comercial, ocasión en que recibió varias heridas de bala.

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Posteriormente, fue trasladado de urgencia al Hospital Regional de Coronel Oviedo, donde horas después se produjo su trágico fallecimiento.

Luego de una serie de investigaciones, el nombre de alias “Piririta” surgió como presunto responsable de este golpe que derivó en la muerte del uniformado.

En la mañana del viernes se produjo el hallazgo del cuerpo sin vida de Liz Paola Estigarribia en una vivienda ubicada en el barrio 29 de septiembre de la localidad de Mariscal Estigarribia, departamento de Boquerón.

Los restos de la mujer fueron hallados completamente calcinados dentro del domicilio, según el informe, el cual también fue consumido por un incendio.

El caso tomó otro rumbo luego de que fueran surgiendo informaciones que daban cuenta de un probable caso de feminicidio, presunción que fue ratificada por la familia de la víctima.

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Los familiares de Liz Paola señalan como presunto autor del crimen a su expareja, Arnaldo Andrés Gómez, que también llegó a ser su jefe. El mismo fue quien radicó la denuncia inicial ante la Comisaría de Mcal. Estigarribia.

Según señalaron en entrevista con C9N, este sujeto amenazó en reiteradas ocasiones a la ahora fallecida, lo cual quedó registrado en varios mensajes enviados a través de WhatsApp.

Finalmente, este domingo se confirmó el deceso de Gómez, quien acabó autoeliminándose tras la muerte de su expareja. “Dijo que le apenaba vivir sin ella”, mencionó al mismo canal el fiscal Lucrecio Cabrera.

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En una nota que dejó antes de quitarse la vida, el sospechoso alegó “no haber aguantado la presión” luego de la trágica muerte de Liz Paola, al tiempo de enfatizar su supuesta inocencia.

Para la Fiscalía, Gómez fue el autor de este feminicidio que conmocionó a la zona del Chaco. “No tenemos otros posibles sospechosos, es casi confirmado que él es el responsable”.

En la mañana del sábado se registró una tentativa de robo agravado en jurisdicción de la Colonia Yty, a unos 15 kilómetros del casco urbano de Itakyry.

El protagonista fue un conductor, identificado como Víctor Villalba Villar, quien se desempeña como repartidor de mercaderías e iba al mando de un camión transportador.

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Según relató a la Policía Nacional, se encontraba en medio de su recorrido habitual cuando fue seguido por dos sujetos que se desplazaban a bordo de una motocicleta, con aparentes intenciones de asaltarlo.

AL percatarse de esta situación, el chofer decidió huir por aproximadamente 2 kilómetros hasta llegar a una vivienda particular ubicada en la citada colonia, donde buscó refugio.

Una vez allí, se inició un breve tiroteo que acabó con el fallecimiento de uno de los presuntos delincuentes, cuya identidad fue confirmada horas después. Se trata de Jorge Luis Gamarra, de 29 años.

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Este hombre acabó siendo baleado por un desconocido que, según los datos que se manejan, sería poblador de la zona y a quien algunos ya catalogaron como un “justiciero anónimo”. Por su parte, su cómplice logró huir del sitio.

En el lugar del hecho, los agentes intervinientes hallaron una escopeta que habría sido utilizada por los malvivientes en este intento de asalto que acabó siendo frustrado.