El ciclista cuya novia fue asaltada por dos motochorros cuando estaba a bordo de una bicicleta, charló con la redacción de HOY para indicar que realizaron la correspondiente denuncia policial y ante la Fiscalía, y que además ya tienen plenamente identificados a los malvivientes, porque actuaron a cara descubierta.

Se trata del caso ocurrido el martes pasado a las 18:35 horas sobre las calles Molas López y Julio Correa, del barrio Carmelitas.

El joven, quien pidió el anonimato para evitar represalias, comentó que llevaba a su novia en la bicicleta a una parada de bus, para que la misma no aborde dos unidades del transporte público para llegar a su residencia. “Era la quinta vez que le acercaba, era divertido llevarla, la gente misma señalaba y le parecía simpático ver cómo le llevaba porque no es usual que se vayan dos persona en una bici”, dijo.

El ciudadano contó que el día del asalto, su novia salió de su trabajo y fue con él por la calle Molas López, rumbo a la Avda. Santísima Trinidad, donde debía abordar su bus. En un momento dado, según el relato proporcionado por el entrevistado, el mismo para su biciclo y la mujer desciende para realizar una llamada a su padre, para avisar que ya estaba cerca de la parada.

En ese instante, dice el ciclista, aparecen los dos hombres a bordo de una moto. Esto puede apreciarse en el video captado por el circuito cerrado de la zona donde ocurrió el hecho delictivo.

“Mi novia iba a llamar a su papá y cuando paramos estas ratas aparecieron en el lugar. Al principio no entendíamos qué pasaba. También pensamos que el arma era de juguete porque no disparó al principio, después cuando ya hizo los disparos al aire entendimos de qué se trataba”, rememoró.

El joven aclaró que su novia no forcejeó con el asaltante, quien aparentemente estaba drogado por la forma en que actuó. “Al descender de la moto se tropezó y estaba raro”, acotó.

“Yo me quedé congelado, no podía reaccionar porque detrás de mí estaba el otro motochorro que podía dispararme si hacía algo y también el que estaba al lado de mi novia la podía haber disparado”, dijo. Agregó que la mujer, tras escuchar los tres disparos al aire, tiró el celular, a lo que el asaltante se lanzó a recogerlo del piso y huyó con su cómplice. “Todo pasó en 10 segundos, pero para nosotros fue una eternidad”, señaló además.

Indicó que ahora buscan justicia para que los ladrones no queden impunes, ya que contó que los propios policías les indicaron que los sospechosos son conocidos en la zona por haber cometido hechos similares anteriormente, pero que es la Fiscalía quien siempre los libera “supuestamente por faltas de pruebas”.

SHOCKEADA: “ME APUNTÓ Y GATILLÓ”

El sujeto dijo que se encuentra sorprendido por la inseguridad reinante. Misma reacción tuvo su novia, quien dijo a la redacción que quedó sorprendida y bastante shockeada tras el robo. “Fue impresionante lo ocurrido, yo al principio confundí todo, pensé que la moto se averió, y después vi que era un motochorro”, afirmó.

Al consultársele qué harán ahora, respondió que deberán cambiar de camino pero que ya no podrán utilizar el biciclo para transportarse como lo venían haciendo. “Con esto termina la ida en bici. Ahora ya no podemos estar tranquillos en ningún lugar”, dijo.

Lamentó en otro momento que tanto para la Policía como la Fiscalía, el delito investigado es por robo agravado, pero que a su parecer fue un intento de homicidio. “A mí primero me apunta y gatilla, pero no se dispara. Entonces de la rabia apunta hacia arriba y ahí comienza a disparar”, aseveró.

Los entrevistados señalaron que el caso está siendo investigado por la fiscala de la Unidad Penal Nº 2, Ariela Chaparro, quien los citó en estos días para una declaración, tras la publicación del caso en los medios de prensa, por lo que están esperanzados en que se haga justicia.

El Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC), en colaboración estrecha con la Gobernación del XII departamento y los municipios correspondientes, desplegó personal y maquinaria especializada para ejecutar estas labores de rehabilitación en los caminos rurales de la región.

El sábado pasado se realizaron trabajos de perfilado de plataforma sobre tipo ripio en el tramo que conecta Cerrito con Cruce Cerrito, con el respaldo activo del municipio local. Simultáneamente, en General Díaz, se llevaron a cabo operaciones de bacheo en las vías vecinales, en estrecha coordinación con las autoridades municipales.

Asimismo, durante ese mismo día, otro equipo se dedicó al perfilado de plataforma sobre tipo ripio, empleando tres motoniveladoras, en el trayecto desde Isla Ro’y hasta Villalbín, con destino a Desmochados. Además, se efectuaron labores de perfilado de plataforma en el tramo que abarca desde Islerias hasta Isla Umbú.

Estas acciones conjuntas entre el MOPC y los gobiernos locales son una respuesta directa a los desafíos generados por las intensas lluvias e inundaciones, que han dejado a muchas comunidades aisladas en esta parte del país.

Los caminos de tierra – que en Paraguay representan el 90% de nuestra red vial- desempeñan un papel crucial en el acceso a áreas remotas, el desarrollo agrícola y ganadero, el turismo y el control de inundaciones, lo que los convierte en una infraestructura vital en muchas comunidades rurales y suburbanas. Por lo tanto, mantenerlos transitables es esencial para el funcionamiento adecuado de estas áreas.

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Un llamativo y confuso incidente en el tránsito se registró el último sábado en el barrio San Isidro de Ciudad del Este.

El hecho involucró a los ocupantes de un vehículo de la marca Toyota tipo Caldina color blanco, con chapa KAP 542, y a Casimiro Daniel Dávalos Britos (24), quien iba al mando de una camioneta Toyota Fortuner.

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Según la denuncia radicada por Dávalos, el mismo circulaba sobre la rotonda del Área 1 cuando el otro automóvil le cerró el paso de manera repentina, lo cual propició el inicio de una discusión.

Tras este episodio, decidió continuar su trayecto por la avenida San José, aunque venía siendo perseguido por los ocupantes del Toyota Caldina, quienes volvieron a alcanzarlo en la plaza del barrio San Isidro.

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Una vez allí, volvieron a tener un nuevo altercado, ya con empujones de por medio. Al abordar su camioneta para retirarse del sitio, escuchó estallidos que serían de disparos de arma de fuego.

Una vez formalizada la denuncia del hecho, agentes policiales encontraron abandonado el vehículo Toyota Caldina, que no contaba con ninguna denuncia, menciona el informe de La Jornada.

La comisario Rossana Amarilla, jefa de la Comisaría Octava de Capiatá, reportó que en horas de la tarde del sábado, una abuela de 70 años y su nieto de 19 fueron víctimas de un asalto en el cementerio de la ciudad.

Ambos fueron intimadas por un malviviente, quien tras consumar el robo de un celular, decidió encerrar a la mujer y a su nieto en un panteón y tirar la llave.

Amarilla indicó en entrevista con radio Ñanduti que los afectados fueron liberados por el encargado del cementerio, y horas más tarde, a través del relato de testigos, pudieron dar con el supuesto autor del hecho, identificado como Christian David Riveros, alias Ka´i , de 35 años de edad, quien estaba en las inmediaciones, aparentemente bajo los efectos de alguna sustancia. El mismo manifestó a la Policía que vendió el celular por G. 130.000, pero que desconocía quién fue la persona que lo adquirió.

Según la comisario, el hombre cuenta con frondosos antecedentes por tentativa de hurto, robo agravado, coacción sexual y una orden de captura pendiente.

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