La búsqueda de belleza que puede matar
En un mundo que busca desesperadamente la felicidad y el éxito a través de la belleza exterior, la cirugía estética es un deseo que muchas veces puede convertirse en obsesión y en un arma peligrosa y mortal en las manos equivocadas. ¿Dónde están los límites? ¿Cómo evitar riesgos? Hablamos con el Dr. Bruno Balmelli, vicepresidente de la Sociedad Paraguaya de Cirugía Plástica Reconstructiva y Estética sobre el tema.
- Por Marycruz Najle
- marycruz.najle@gruponacion.com.py
Con bastante frecuencia los medios de comunicación reflejamos las consecuencias —muchas veces trágicas— de intervenciones quirúrgicas estéticas fallidas. Son casos en los que jóvenes mujeres fallecieron a consecuencia de procedimientos realizados en su gran mayoría, en sitios no aptos y en manos de gente sin preparación.
Hoy por hoy, con bastante ligereza, se hacen todo tipo de tratamientos más o menos invasivos en consultorios instalados en forma precaria, también en peluquerías y spas y hasta “a domicilio”. Lo cierto es que el tema de las intervenciones estéticas es demasiado serio como para tomarlo a la ligera y por eso, vale la pena insistir en las advertencias de los profesionales especializados antes de decidir, aunque sea una pequeña intervención.
QUIÉN, QUÉ Y DÓNDE
Cuando vemos o escuchamos sobre casos de tratamientos mal realizados, escuchamos las palabras del doctor Bruno Balmelli, vicepresidente de la Sociedad Paraguaya de Cirugía Plástica Reconstructiva y Estética y director del Centro del Quemado, sobre los riesgos de dichos procedimientos. “ La seguridad de las intervenciones quirúrgicas pasa por estos tres ejes: Quién hace el procedimiento, qué productos utilizan y dónde lo hacen. Si no se tienen en cuenta esos tres ejes, suceden realmente verdaderas catástrofes, desde las infecciones que pueden solucionarse con un tratamiento, hasta la muerte de las personas, como ha ocurrido varias veces ya en nuestro medio”
Lo primero y principal es que el o la profesional que realizará la intervención esté debidamente acreditado. “Eso es muy importante a la hora de elegir un profesional con quien hacer el tratamiento. Luego, por supuesto, es vital comenzar evaluando las expectativas reales de cada caso, las posibilidades y lo más importante: la preparación previa, la evaluación clínica completa. Se necesitan estudios del estado del corazón, coagulación de la sangre, estado general, etc. que cada médico pide siempre antes de programar una cirugía, por pequeña que esta parezca”.
Letizia Ortiz, reina de España.
“También es importante contar con profesionales anestesiólogos de primer nivel, asistentes que ayudan a que las cirugías sean más seguras y, por supuesto, realizarlas en instalaciones en donde existan condiciones adecuadas para atender cualquier problema que pueda ocurrir, a pesar de los cuidados previos. Porque hay que tener en cuenta que, si se toman todos esos recaudos, el nivel de seguridad es muy bueno, pero en toda cirugía existe un margen pequeño de posibilidad de complicación, que si se está en lugares y condiciones adecuadas, pueden solucionarse con éxito”
COMO UNA MANICURE
Hoy por hoy, las cirugías con fines estéticos se han banalizado, hasta el punto de ofrecerse como si fueran una tintura en el pelo o una manicure. El doctor afirma que: “Realmente hay un descontrol muy importante en todas las especialidades médicas, pero en nuestro caso, la cirugía estética se nota más porque hay una cierta forma de banalización de los procedimientos médicos, tanto por parte de los pacientes como por parte de las personas inescrupulosas que se dedican a realizar procedimientos a veces criminales y, a veces, que van acercándose a lo estético. Es un peligro porque hay personas que no tienen la formación adecuada y optan por hacer esos procedimientos, solo con la idea de ganar dinero. Usan productos que muchas veces ni siquiera son aptos para utilización médica y además realizan estas prácticas en lugares no aptos, como en peluquerías, spas y, a veces, hasta en domicilios particulares”.
Scarlett Johansson.
¿HASTA DÓNDE? Y ¿DESDE CUÁNDO?
Otro aspecto importante es tener también en cuenta los límites que, para algunos casos, parecen no existir. Por ejemplo, la edad a la que se puede realizar una intervención estética. Según el doctor Balmelli “Es muy importante saber que ese tipo de intervenciones deben hacerse después de los 18 años de edad. Antes de ello, el cuerpo no está totalmente desarrollado para poder cambiar aspectos de él. Nosotros, desde la Sociedad, decimos que antes de eso, ni prótesis mamaria ni rinoplastia, los menores de 18 años no deberían pasar por un quirófano para una cirugía plástica”. Y aclara que suele darse una excepción en el caso de las orejas, que tienen un desarrollo casi completo a los 16 años, además de ser una operación muy importante por cuestiones psicológicas. Antes de los 18 es más común que existan complicaciones, como lesiones neurológicas o cirrosis, por ejemplo. Para el doctor, “los cambios en la nariz, que muchas veces algunos padres mismos piden para sus hijas a los 15 años o antes, son peligrosos y no deben hacerse a esa edad porque luego de años, van al consultorio con narices totalmente reducidas, “cadavéricas”. Por ello, afirma que no duda en “decir que no a los padres que insisten a veces porque las chicas quieren”.
Y afirma “Volvemos a lo mismo: al control riguroso que debería haber y suele no existir y a la conciencia de los pacientes potenciales, que sepan elegir y no caer en manos de inescrupulosos”. La sinceridad es también un factor importantes a la hora de operarse: “A veces vienen con la foto de una famosa y dicen que quieren la nariz de tal, la boca de cual, etc. Eso debe ser analizado por el profesional con mucho rigor y ser lo más realistas y claros posibles para explicar los límites, lo que se puede o no”.
“QUIERO SER COMO ELLA”
La periodista Rosanna Arrúa, editora general de Crónica, conoce de cerca el mundo de la farándula, especialmente de las modelos que más atraen la atención del público. Con ella hablamos de la presión que ejercen los medios y las redes, especialmente en las más jóvenes. “Hoy por hoy, las redes sociales, muestran a cada minuto a las llamadas influencers o a las modelos que suben fotografías mostrando los cambios estético: ‘Me agrandé los labios con el doctor fulano’, o ‘mejoré mis lolas’ etcétera.
Donatella Versace.
Hoy vemos que hasta se hacen cambios en el rostro como la bichectomía , que afina la cara dando un aspecto de pómulos levantados, o se inyectan cosas para cambiar la forma de la cola”, cuenta Rosanna. Y agrega, “El problema principal que yo percibo es que las chicas ven todo eso y desean tener lo mismo, pero no tienen el dinero suficiente. Entonces es cuando aparece alguna amiga que les dice que tiene ‘una prima o amiga que en su peluquería hace lo mismo, pero que cobra mucho más barato y que hasta atiende a domicilio’. Ahí empiezan a caer en manos de gente que a veces ni siquiera es enfermera, por decir algo, y corren peligro. Lo que parece barato, termina costando demasiado caro, teniendo que recurrir luego —si están vivas— a un especialista,a ver si se puede solucionar o quedar con las secuelas. Eso es tremendo, pero real”.
TAMBIÉN ES SALUD
A esta altura de las cosas, uno puede pensar que para la mayoría de la gente que se somete a este tipo de arriesgados experimentos, que pueden llevarla a daños de todo tipo y hasta la muerte, difícilmente asocia a la cirugía estética con la salud. En casos de enfermedades o dolencias se suele acudir a especialistas o por lo menos a centros de atención de la salud, pero en la búsqueda de la belleza, parece que pensamos que es algo que no puede afectarnos realmente, cuando debería ser lo contrario. Para el doctor Balmelli, al igual que para sus colegas pertenecientes a la Sociedad Paraguaya de Cirugía Plástica Reconstructiva y Estética, es una lucha diaria informar a la gente sobre la importancia de cuidar al extremo cada decisión, pensando en la estética como una parte del cuidado de la salud.
La abundante “oferta”, casi de publicidad callejera, sobre todo tipo de procedimientos hace que los especialistas levanten su voz de alarma y pidan mayor control por parte de responsables de la Salud Pública a través de la Superintendencia de Salud, concientizando a quienes piensan o proyectan realizárselos. Balmelli señaló que debe haber más exigencia de las personas que optan por una cirugía. El bajo precio de las ofertas es el primer punto que debería llamar la atención y hacer dudar de la garantía que les ofrecen.
Blake Lively.
“Un dermatólogo o un cirujano plástico es el profesional que considero puede realizar una cirugía estética”, afirmó y recordó que la Sociedad tiene el listado de los profesionales certificados.
También hablamos de las tendencias actuales en cuanto a las cirugías. El doctor Balmelli afirma que, si bien hay un aumento en cantidad de cirugías que piden hoy en día los hombres, la mayoría de ellas se realizan en mujeres: “Implantes mamarios, rinoplastia, lipoaspiración, etc” son las más pedidas. Y sobre el punto, aclara que la tendencia actual es no utilizar prótesis mamarias demasiado grandes o prominentes, debido a que causan una desproporción en el cuerpo. “Se está optando por algo más armónico, que no quiebre el equilibrio del cuerpo, se trata de buscar lo que mejor quede, lo más natural y armónico posible”. Eso, en cuanto a la mayoría de la gente, ya que hay casos extraordinarios y hasta patológicos que deben ser tratados especialmente. “En realidad, la cirugía está para ayudar a una persona a sentirse mejor con ella misma, sin caer en exageraciones ni en ideales imposibles, sino lograr un equilibrio que apoye y aporte a la personalidad de cada una”.
ACIERTOS Y HORRORES
Las intervenciones quirúrgicas para mejorar el aspecto o corregir un defecto son excelentes cuando se notan menos, es decir, cuando el aspecto logrado es lo más natural posible. Eso en el caso de las personas que desean verse bien. Uno de los resultados más positivos y admirados en la actualidad es el cambio en el rostro de la reina de España, Letizia Ortiz (ver foto) que, aunque no haya hablado de sus operaciones, se notan las mismas, realizadas para corregir una nariz y un mentón que daban un aspecto negativo (la comparaban con una caricatura de bruja).
Mike Rourque.
Hoy, luce un rostro armónico y a la vez natural. Otros casos que pueden ilustrarnos sobre el cambio positivo que se produce con una operación bien realizada, son, por ejemplo, las rinoplastias de Blake Lively, de Elsa Pataky y de la actriz Scarlett Johansson. También la famosa Penélope Cruz puede mostrar orgullosa cómo ha mejorado su rostro y su estilo gracias al uso correcto del bisturí.
Pero, como en todo, hay casos que son todo lo contrario. Una verdadera galería de “horrores” que puede encabezar sin temor la famosa Jocelyn Wildenstein, cuyo marido el multimillonario Alec Wildenstein, prefirió pagarle 2.500 millones de dólares por el divorcio debido a que ella se había convertido en un verdadero “monstruo felino” por sus operaciones que además, no pensaba abandonar.
Penélope Cruz.
Otro caso del que todos hablan en voz baja en el mundo de la jet, es el de la diseñadora Donatella Versace, que si bien no era muy agraciada antes de sus numerosas operaciones, luego de ellas se ha deformado totalmente. Otras famosas como Melanie Griffith en su momento y René Zellweger (Bridget Jones) han recibido críticas.
En el caso de los hombres, el que tal vez se lleve las “palmas a los peor operados” es Mike Rourque, cuyo rostro original, ya nadie casi recuerda, luego de tanto cambio. Eso, si dejamos de lado al ya desaparecido Michael Jackson, que llevó los límites de los procedimientos de todo tipo más allá de lo humano.
Jocelyn Wildenstein
JENIFER RUIZ DÍAZ
“Lo barato te puede salir muy caro”
Es una de las modelos más seguidas en los medios y su cuerpo ha ido modelándose y cambiando con el tiempo. Dice que se ha puesto siempre en manos profesionales y que hay que tener mucho cuidado antes de operarse.
“Yo creo que hacerse retoques no es nada malo, si es para sentirse bien con uno mismo. Lo malo es volverse adicto y no parar más”. Si tuviera que darles un consejo útil a las chicas que quieren ser como ella, dice sin dudar: “Les diría que deben cerciorarse bien antes de entrar al quirófano, ya que es la vida de una la que corre peligro. Nunca tuve ningún problema por eso”.
Jennifer confiesa “Me operé dos veces, la última con Darío Jara del Valle del que soy imagen y quedé muy satisfecha con su trabajo” Y agrega: “hay cirujanos y cirujanos, precios bajos y altos. Pero hay que tener en cuenta que lo barato te puede salir muy caro”. Ella hace un recuento de sus intervenciones quirúrgicas: “Tengo lipoescultura y pechos. A los pechos me los operé dos veces, la segunda me los achiqué y me saqué piel porque el tamaño de las prótesis de antes me causaban molestias, ya que me empezaba a doler la espalda por el peso. Es que tengo una espalda muy pequeña, a causa de eso”.
Sobre los gustos y tendencias que están de moda en la actualidad, especialmente si se siguen prefiriendo chicas con grandes lolas, dice que es muy personal. “Fui a otros países y por ejemplo en Estados Unidos, están de moda las lolas muy exageradas, son muy grandes para mi gusto”.
Alerta sobre explosiva mezcla: un cóctel muy riesgoso para la salud
La mezcla de bebidas alcohólicas con energizantes, muy popular entre los jóvenes, puede ser muy peligrosa, ya que aumenta el riesgo de intoxicación, comportamientos arriesgados y efectos negativos en la salud.
La combinación de alcohol con energizantes se convirtió en una tendencia entre los jóvenes, debido en parte a la percepción de que los energizantes pueden contrarrestar los efectos sedantes del alcohol, lo que lleva a una sensación de estar más alerta y en control. Esto, reforzado por la publicidad y el marketing.
En la búsqueda de experiencias intensas y emocionantes, los jóvenes creen que este cóctel permite disfrutar de la fiesta por más tiempo sin experimentar la fatiga asociada al consumo de alcohol. Sin embargo, muchos desconocen los peligros que hay detrás de esta riesgosa práctica.
Los estimulantes de la cafeína en los energizantes pueden enmascarar los efectos sedantes del alcohol, lo que lleva a una falsa sensación de sobriedad. Esto puede resultar en un consumo excesivo de alcohol y un mayor riesgo de intoxicación. Además, la combinación de alcohol y cafeína puede aumentar el riesgo de comportamientos arriesgados o impulsivos.
La doctora Nilda Villalba, directora del Centro Nacional de Toxicología, reconoció que la combinación de bebidas alcohólicas con energizantes es una mezcla explosiva. Esto, a raíz de que las personas pierden la noción de los síntomas depresivos que el alcohol normalmente ocasiona en el organismo. Se trata de un “cóctel riesgoso para la salud”.
La experta resaltó que el alcohol es un depresor del sistema nervioso central y las bebidas energizantes, por el contrario, son estimulantes. Por ello es que, las bebidas energizantes enmascaran los síntomas depresores del alcohol y hacen que las personas consuman de una manera engañosa.
Dentro de los componentes que poseen los energizantes sobresalen la cafeína, vitaminas, guaraná y son varias sustancias que se van mezclando para brindar esa característica particular de dar energía al organismo, según detalló a la radio 650 AM.
“Debemos estar preparados para afrontar las complicaciones que pueden darse por esa mezcla. Se desaconseja el consumo de estos productos en personas que están con problemas cardíacos, que sufren de hipertensión, las embarazadas, los diabéticos y los menores de 16 años. Los adolescentes están en una etapa de reconocimiento de los límites que tienen, entonces esos límites fácilmente se van de un extremo a otro, es por eso que desaconsejamos el consumo de esta mezcla”, subrayó.
Por su parte, el médico pediatra Robert Núñez había mencionado que los energizantes son la segunda sustancia más consumida por la franja etaria de entre 13 y 17 años, después del alcohol. Mayormente, los adolescentes consumen por curiosidad, y tres de cada cuatro menores de edad hacen la peligrosa mezcla de ambas sustancias.
Si bien es importante resaltar que esta mezcla no está prohibida (consumo del alcohol solo en mayores de edad), se deben conocer cuáles son los efectos nocivos de la misma en el organismo, de modo a evitar alguna complicación y desgracia que lamentar.
Estrella Roja: el socialismo marciano de Bogdánov
Podemos decir que Aleksándr Bogdánov fue un adelantado a su tiempo. En 1908 publicó Estrella Roja, una entretenida novela de ciencia ficción de inspirada naturaleza marxista, con la que se adelantó casi una década a las traumáticas revoluciones de febrero y octubre de 1917; que desembocaron en la llegada del Partido Bolchevique al poder en Rusia, el fin de 300 años de gobierno de los Románov y el posterior nacimiento de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas.
Por Gonzalo Cáceres-periodista
Alexander Alexandrovich Bogdánov (1873-1928) fue un revolucionario comunista bielorruso de múltiples talentos: escritor, médico, economista, científico y filósofo, también se formó en psiquiatría. Fundador del Partido Bolchevique, y de influencia significativa en el desarrollo de la teoría marxista en Rusia, ostentó una reconocida militancia política y el estrecho contacto que tuvo con Vladimir Lenin, al tiempo de evidenciar su relación con los más radicales movimientos obreros.
Pese a sus grandes aportes filosóficos, científicos y a las letras, Bogdánov no tuvo la misma repercusión en Occidente que la que sí vieron los monstruos de la literatura rusa como León Tolstói y/o Fiódor Dostoyevski, a razón -principalmente- de las escasas traducciones de sus novelas y otros escritos.
Pero hablemos de Estrella Roja, su principal y más conocido trabajo.
MARCIANOS COMUNISTAS
Estrella Roja aborda una serie de cuestiones políticas que reflejan los debates de la convulsa época en que fue escrita. El libro abraza al socialismo como ideal utópico, la lucha de clases y la revolución como temas de fondo, y una crítica al capitalismo y al papel del individuo en la sociedad socialista.
Precursora de la ciencia-ficción soviética, Estrella Roja se erige como una suerte de ventana por dónde observar el idealismo de la entonces incipiente era de las revoluciones industriales en la lúgubre Rusia de los zares que, tras la eclosión de las revueltas incitadas por los soviets, dio lugar a la redefinición de las clases sociales, lo que concibió una nueva relación con los medios de producción, la ciencia, la tecnología y la literatura.
El libro conjuga dos rasgos fundamentales y necesarios para la literatura de su época y de nuestros días: la imaginación y la utopía, porque además de fungir de testimonio político de su autor, también es considerada por los críticos como una de las primeras novelas sobre exploración espacial.
Bogdánov plasmó su visión de un futuro basado en la concepción de la igualdad social.
La trama se desarrolla en un futuro distante donde la humanidad pegó el salto tecnológico y emprendió la colonización de Marte. La historia sigue el viaje del ingeniero Leonid, quien llega al ‘planeta rojo’ y se sumerge en la sociedad marciana, que difiere significativamente de la que continúa en la Tierra.
La civilización humana en Marte alcanzó un estadio sin división de clases, donde todos sus miembros contribuyen según su capacidad, y reciben según necesiten; un sistema de características propias como ser, la economía planificada, el unipartidismo y la férrea dirección de las relaciones interplanetarias, lo que en la actualidad podemos interpretar como socialismo en la más exorbitante fase.
De forma intrínseca, Bogdánov reflexiona sobre la naturaleza de los humanos y el progreso social, y expone la forma -idealista- en que el socialismo puede transformar las relaciones y crear un mundo sin abusos de las clases dominantes, a priori más justo y equitativo, sin la odiosa brecha económica.
A través de Leonid, el lector atestigua una civilización humana harta de innovaciones con repercusión en el transporte, la generación y suministro de energía (ya trata, por ejemplo, la idea de sustituir los combustibles fósiles por fuentes renovables) y las comunicaciones, y con una medicina tan avanzada que las enfermedades graves son de extrema rareza y la longevidad moneda corriente, con novedosos procedimientos quirúrgicos y de diagnóstico.
Estrella Roja gozó de popularidad luego de plasmarse la Revolución Rusa y con la llegada de las generaciones soviéticas que vivieron los insistentes intentos de la URSS por desarrollarse como potencia mundial (la afamada carrera armamentista y espacial).
A Bogdánov se le reconoce explotar ideas hasta exageradas para su contexto, de ahí su importancia para la literatura universal. Estrella Roja permeó en menor o mayor medida en grandes novelas posteriores como Marte Rojo (1992) de Kim Stanley Robinson, Los Desposeídos (1974) de Ursula K. Le Guin, el Hombre de Marte (1946) de Stanislaw Lem y hasta hay quien asegura que el mismísimo Isaac Asimov se vio influenciado para la serie de la Fundación (1961-1993).
TRÁGICO FINAL
Después de la revolución, Bogdánov se centró en el trabajo en biología y medicina. En 1926 encabezó el primer instituto en el mundo de transfusión de sangre, lo que terminó en su trágico y evitable final.
Bogdánov falleció el 7 de abril de 1928 a raíz de una infección que contrajo tras un fallido experimento médico con transfusiones de sangre (dicen que recibió volúmenes de diferentes jóvenes en un intento de dar pie a su teoría del ‘colectivismo fisiológico’), lo que generó interés y debate a lo largo del tiempo (terminó como ejemplo en las grandes universidades).
Aunque su obra literaria y científica sigue siendo relevante, aquel experimento final y su resultado fatal marcaron su legado.
Bolardos en San Lorenzo: protección para ciclistas, dolor de cabeza para automovilistas
San Lorenzo fue escenario de llamativos percances automovilísticos semanas atrás, específicamente en la avenida Victorio Curiel, donde los protagonistas no fueron precisamente los conductores, sino unos bloques de cemento conocidos como “bolardos”, colocados para dividir la bicisenda, pero ¿para qué realmente sirven?
Imprudencia, falta de atención y alta velocidad, los factores que, sobre esta avenida situada en Capilla del Monte causaron los reiterados accidentes donde los bolardos provocaron graves daños materiales.
Los bolardos se encuadran dentro del mobiliario urbano, y son los elementos que sirven para realizar delimitaciones de espacios, ya sean fijos o temporales. Muy útiles para limitar el acceso de vehículos y que los conductores sepan cuando se están aproximando a algo con lo cual, si colisionan, podrían generar accidentes.
La Arq. Evelyn Madelaire de la Municipalidad de San Lorenzo explicó que estos delineadores tubulares, bolardos, fueron instalados en esa avenida para lograr una mayor seguridad vial, a fin de que los conductores puedan captar los obstáculos que tienen para circular, en este caso, una bicisenda.
#2EnLaCiudad👥
— GEN (@SomosGEN) April 8, 2024
🟡Nuevo accidente vehicular en zona de los bolardos de San Lorenzo: desde la Municipalidad sostienen que no quitarán dichos objetos, atendiendo a la garantía de protección a peatones y ciclistas.
Informa @angelicagesama
🎙️@mikeotr @martidiazm… pic.twitter.com/xgqYlJhzGB
“Los bolardos por definición son elementos que cumplen dos objetivos, en primer lugar, segregar, es decir, dividir lo que es el tránsito vehicular de la bicisenda. Y en segunda instancia, proteger, dar seguridad a los usuarios en mayor situación de vulnerabilidad, en este caso, el ciclista”, expresó durante una entrevista en el canal GEN/Nación Media.
Vittorio Curiel es una avenida urbana que pasa por una zona residencial y una mixta, no es una autopista. La arquitecta indicó que, en ese trayecto, los vehículos circulaban a 80 km/h e incluso más, cuando deberían ir a 40km/h. Ante esto, se colocaron los bolardos.
Sin embargo, la alta velocidad todavía juega una mala pasada a los conductores que circulan por esa zona.
Apenas días después de que se colocaran estas barreras de cemento, dos automóviles atropellaron y destruyeron, no solo sus vehículos, sino también los bolardos hechos de hormigón. Uno circulaba a alta velocidad, el otro intentó adelantarse.
Cabe recordar que, la avenida Vittorio Curiel no es precisamente un trayecto en el que se pueda circular en doble fila, por lo que, insisten en respetar los límites de velocidad permitidos.
“¿Cumple o no cumple su función?, estamos viendo que sí cumple su función. Lamentablemente, para ciertos automovilistas, con perjuicio material. Cumple la función de proteger, nosotros no inventamos, no son precisamente necesarios para hacer funcionar una bicisenda, pero se usa”, finalizó Madelaire.
La Municipalidad de San Lorenzo está trabajando en un plan de educación y seguridad vial para que la ciudadanía pueda entender la funcionalidad de los bolardos. Así se buscará evitar que más conductores tengan que lamentar el perjuicio inmenso a sus rodados.