El inquilino (parte I)

Por Óscar Lovera Vera, periodista.

Hace diez años una anciana y su nieto desaparecieron por algunos días del rastro de sus familiares. La inquietud de un hermano llevó a descubrir la muerte de ambos en un confuso incidente. ¿Qué conduciría a la policía a determinar entre accidente y homicidio?

Por Óscar Lovera Vera, periodista

A sus sesenta y años, Erótida Martínez de Calderoli quedó a cargo de su adolescente nieto, Justo Antonio Martínez Espinoza. Él tenía diecisiete años cuando su padre fue a la Argentina, se instaló en Buenos Aires para buscar trabajo y entregó el cuidado a su anciana madre. Justo era un chico sin muchos dilemas más que la etapa escolar. Su rutina consistía en ir al colegio y volver a la casa de su abuela, la número 85 de la calle Melo de Portugal y Herrera, en el Cuarto Barrio de la ciudad de Luque, a unos pocos minutos de la capital.

La casa no era una común, la abuela tenía ingresos gracias al alquiler de habitaciones económicas. Muchas personas iban y venían, aunque en aquel 2009 no le fue tan bien. El único cliente que permanecía lo tuvo que desalojar al descubrir que robó algunas de sus pertenencias. La conducta de su inquilino fue cambiando con el tiempo, todo lo que encontraba a su paso lo cambiaba por drogas. Erótida lo descubrió y creyó que lidiar con algo así le traería problemas; no solo a ella, también a su nieto.

DÍAS OSCUROS

Agosto traía sus días grises, bipolares. Mañanas frescas, en algunas con frío que llevaba al paraguayo al poncho y bufanda; pasado el mediodía el carácter cambiante ponía al calor clásico de Paraguay, seco a punto de ebullición y condensación y, para completar, con su incandescencia fornida arreciaba el viento norte tumbando hojas y basuras, dispersándolas por las calles del vecindario.

Por las noches solía calmar, la serena luna del primero de agosto llevaba a un preocupado Mariano Martínez a la casa de su hermana mayor, Erótida. No tenía noticias de la mujer y resultaba atípico que no tenga al menos una llamada en días.

Parado frente a la puerta principal llamó insistente, pero nadie contestaba.

Con notable desazón su angustia estuvo justificada. Algo pasó, pero aún no podía entender con exactitud lo que deparaban los minutos posteriores. Debía acudir a la Policía para lograr entrar y así lo hizo.

La estación de policía, la Tercera Central, en el centro de la ciudad, fue su próximo destino. El agente de guardia lo escuchó con atención y cada detalle narrado por Mariano sugerente le resultó.

RASTRO EN LA OSCURIDAD
La patrulla policiaca se estacionó frente a la casa. Eran los agentes, Mariano los condujo a la vivienda.

-Dame una linterna Benítez –ordenó el oficial a un subalterno.

Verificaron desde fuera que unas manchas de color negro rodeaban un ventanal, como una huella que pudo provocar un incendio, esto fue suficiente motivo para entrar a inspeccionar. Sin embargo, la insistencia en que alguien les abra la puerta no tenía retorno, nadie respondía.

No quedó otra opción más que aguardar por un fiscal, la abogada Rosa Noguera. A partir de esa primera semana de agosto entró de turno, debía responder a los requerimientos en la ciudad y este sería su primer caso.

-Hola doctora, te necesitan en una vivienda en el Cuarto Barrio, al parecer hubo un incendio y la Policía no puede ingresar sin una orden – relató la asistente de la agente mientras su jefa escuchaba del otro lado.

Sin mucha demora, la agente llegó a la casa. Su primera inspección fue en los alrededores, algo le llamó la atención. Era una calle concurrida, pero sin muchos vecinos. Su deducción fue que si dentro de la habitación o la casa algo se quemó, nadie pidió auxilio por esa escasa presencia de residencias de la cuadra.

Estaba muy oscuro, tanto que apenas la mano era perceptible. -¡Cuidado doctora! –gritó un policía, advirtiendo sobre los cables sueltos alrededor de la casa y dentro del patio delantero. Era peligroso, no pudieron continuar.

-Doc, es mejor regresar por la mañana. Con las linternas no será posible verificar la casa y en este estado es un riesgo para todos. Noguera comprendió el punto y ordenó que una patrullera quede en custodia de la casa. Regresarían por la mañana para comenzar la inspección.

MISTERIO DESVELADO

El 2 de agosto amaneció fresco, con brisa tenue que no terminaba por dispersar la cantidad de hojas y basura que su predecesor del norte había ocasionado. El Sol despabilado rompía el monocromo cielo gris, alrededor de la media jornada.
El motor se apagó y el sonido del picaporte, seguido del saludo matinal, anunció la llegada de la comitiva. -Hora de trabajar, señores –en voz alta el oficial comandaba a su equipo de policías criminalistas a verificar la casa.

-Comencemos por esa ventana, ya que hay cables frente a la puerta. Ábranla y fíjense si tenemos vista desde ese punto –otra orden seguida del oficial.

La ventana fue abierta y en forma inmediata el pestilente aire sacudió el olfato de la cuadrilla. No hubo caso y en sus rostros se dibujó el impedimento de continuar avanzando. Era la pestilencia de un cadáver de días de putrefacción.

-Doctora, aquí tenemos algo, hay un cuerpo o más, tal vez. El olor es característico.

Tuvieron la impresión de que la mujer murió a consecuencia de una carga eléctrica. Esto desató el incendio y tal vez su nieto corrió la misma suerte cuando procuró sacarla de la habitación.

Luego de cortar el suministro de energía, entró el segundo grupo. El lugar pasó a convertirse en un escenario de muerte dudosa. El forense debía registrar lo que observaba en el lugar para desvelar el misterio, si fue un accidente o no.

La dimensión de la habitación ayudó a comprender lo que pudo suceder. A la par del trabajo médico, un perito encontró un elemento determinante. Combustible.

-Comisario, hay una sustancia acelerante en la escena, esto se vertió adrede y luego provino la combustión. Las llamas se consumieron por sí solas, de ahí el porqué solo el fuego se concentró dentro de este dormitorio.

-A ver… explíquese Ortega –intervino el jefe de Criminalística.

-Bueno, para que un incendio se propague deben existir varios elementos: calor, combustible y principalmente oxígeno. Uno de estos faltó al cerrarse la habitación por completo, no hay más elementos que aviven las llamas y a consecuencia terminó por consumirse, pero sí fue suficiente para afectar a las dos personas que quedaron calcinadas.
En ese momento lo que pareció ser un accidente mutó a un cruel asesinato.

PUNTOS DIFERENTES

En un primer momento la posición de los cuerpos y el punto de calcinación de ellos provocaron en los investigadores una errónea certeza. Creyeron que una descarga eléctrica de un electrodoméstico fue el causante del incendio que convirtió la habitación en un horno, pero se sofocó por la falta de oxígeno. De ahí las manchas de quemadura que envolvían una ventana. Pero esto distaba de la realidad, el material acelerante o combustible encontrado fue colocado adrede, no había otra explicación. ¿Quién podría verter aceite de motor en el suelo –por accidente– y luego encender una fogata?

Pero la certeza forense llegó. El médico confirmó que hubo muerte antes de la quema.

En el caso de la mujer estaba maniatada y en posición fetal, carbonizada. El adolescente fue golpeado en la cabeza, en el parietal izquierdo, también afectado por las altas temperaturas.

Una senda conducía a otra parte de aquella casa, al patio trasero. Unas gotas de un color oscuro marcaban el camino a ese punto. El forense se detuvo allí, también le llamó la atención. Eran gotas espesas, no parecía aceite de motor, lo que utilizaron para acelerar el incendio. Era algo más. Con el dedo índice tocó una de ellas y luego la esclareció esparciéndola entre la yema de los dedales de su guante de látex. Era sangre.

Su coloración era negruzca por la oxigenación, perdió líquido al estar fuera del cuerpo y finalmente se tornó imperceptible a la coloración intensa que se conoce.

-¡Aquí hay algo! –gritó el doctor, alertando a los policías de Criminalística.

La sangre los condujo a un paredón, uno que en su momento parecía ser el proyecto de otra habitación. Recostada, solitaria, estaba una pala, en medio de la estructura, como si alguien la abandonó a su suerte.
Los agentes la tomaron y observaron que la parte metálica también tenía sangre. Descubrieron la otra arma homicida.

Lo que había ocurrido en aquella casa fue crimen atroz y lo habían intentado borrar quemando la habitación, ¿pero quién lo hizo?

Continuará…

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Pensión alimentaria cubre al 55,4% de los adultos mayores 

Foto: archivo.

Al cierre de este año, un total de 310.609 personas reciben la pensión alimentaria, representando al 55,4% de la población de 65 años y más estimada para diciembre de 2023, según datos del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF).

El beneficio de pensión alimentaria comenzó a implementarse en el año 2010, atendiendo las limitaciones del pilar no contributivo de la seguridad social. Según estimaciones de la Encuesta Permanente de Hogares, para ese año sólo el 15,4% de las personas de 65 años y más recibía una jubilación o pensión.

En un proceso de expansión progresiva, ya para comienzos de 2017 la pensión alimentaria cubría a 1 de cada 3 personas de 65 años y más, asegurando a los sectores más postergados de la adultez mayor, estando focalizada en las personas en situación de pobreza.

El programa siguió ampliando su cobertura, adecuando sus procedimientos a los cambios normativos (Ley Nº 6381/2020), donde se destaca la elevación del umbral social de acceso a la condición de “vulnerabilidad social”.

La actualización normativa fue acompañada con el fortalecimiento de recursos y procesos destinados a la protección económica de la población adulta mayor.

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Anuncian concurso para 50 cargos en Diputados e investigación de planillerismo

Raúl Latorre, presidente de la Cámara de Diputados.

El presidente de la Cámara de Diputados, Raúl Latorre, anunció un llamado a concurso de méritos para la contratación de 50 personas. Además, una investigación de los casos de planillerismo. No se tomará ninguna medida con la designación de los “hijos de”, alegando que los nombramientos no representan una forma de nepotismo.

En una conferencia de prensa realizada esta mañana, Raúl Latorre, comunicó que, jóvenes de todo el país podrán participar en el concurso de méritos y aptitudes para 50 vacancias en distintos cargos para la Cámara de Diputados.

“Estos 50 espacios van a ser generados a partir de la disminución que logramos del personal contratado de confianza”, expresó Latorre.

También ordenó el inicio de una investigación preliminar sobre las denuncias de ausentismo a los cargos.

Vamos a combatir el planillerismo en forma frontal en nuestra administración, los responsables van a ser sometidos al sumario y a las sanciones correspondientes”, afirmó.

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Sin dar espacio a preguntas, Latorre presentó al abogado Máximo Medina como el nuevo director de asesoría jurídica y director interino de Recursos Humanos para dar más detalles y se retiró cerrando la puerta.

El abogado aseguró que, en relación a los hijos nombrados en cargos de confianza, no se configura ningún caso de nepotismo, tomando en cuenta que, la persona que los nombró, Latorre, no es pariente de ninguna de ellas.

Detalló que, la persona facultada a nombrar o contratar es la que puede cometer nepotismo, solamente si el nombrado es su pariente hasta el cuarto grado de consanguinidad o segundo de afinidad, hechos que no se cumplen con Latorre.

Agregó que, tampoco se violó ninguna norma de ingreso a la función pública, pues, el artículo 63 de la ley de presupuesto exceptúa al Poder Judicial, al Legislativo y a los órganos auxiliares de, cumplimiento de dicha legislación.

Respecto a los planilleros, señaló que, tiene la instrucción de ser implacable con los que se ausentan a sus puestos de trabajo.

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Oficializan entrega de armas incautadas en Operativo Dakovo a la Policía Nacional

Miles de armas incautadas en el Operativo Dakovo fueron entregadas a la Policía Nacional. Foto: SENAD.

Las más de 2.000 armas de fuego incautadas en el marco del Operativo Dakovo fueron entregadas este viernes a la Policía Nacional, a fin de reforzar el combate a los criminales.

En un acto desarrollado esta mañana en la sede de la Intendencia de la Policía Nacional, se procedió a la entrega de las armas incautadas durante la Operación “Dakovo”.

Se trata de más de 2.000 armas de fuego cuyo valor supera los USD 5 millones y que habían sido importadas por la empresa International Auto Supply (IAS), propiedad del prófugo Diego Dirisio.

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Del acto participaron el presidente de la República, Santiago Peña, el ministro del Interior, Enrique Riera, el Comandante de la Policía Nacional, Crio. Gral. Carlos Benítez, y la jueza Lici Teresita Sánchez, entre otros.

El Estado no puede ser sometido por quienes decidieron caminar por fuera de la ley“, expresó Peña durante su discurso, destacando los resultados tanto de Dakovo como de otros operativos impulsados recientemente, incluyendo Veneratio.

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El lote incluye tanto armas de grueso calibre como armas cortas, las cuales pasarán a manos de las fuerzas de seguridad para reforzar el combate a la criminalidad en nuestro país.

Se espera que algunas de las armas incautadas también sean entregadas a la Secretaría Nacional Antidrogas (SENAD), a modo de que sus agentes especiales cuenten con el equipamiento necesario para sus procedimientos.

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