“Lo más valioso de un régimen político es la libertad y esta cuesta”, afirma filósofo
La muestra de ciudadanía ejercida por cada ciudadano es fundamental para el fortalecimiento de la democracia que se sostiene no solo con la tolerancia y el respeto sino con el compromiso que cada persona asume con respecto a sus deberes y derechos, afirma Mario Ramos Reyes, investigador, profesor y filósofo sobre la realidad que se vive en Paraguay.
En crisis. La falta de construcción de un consenso y la impaciencia de la ciudadanía están latentes y esto se trasunta en los representantes en la búsqueda de soluciones de problemas que son reales como la carestía en salud, educación o la misma corrupción, a través de actos de violencia verbal o física, se recurre al insulto, y estos improperios se dan en diferentes ámbitos, incluso entre autoridades y es cuando se presentan fallas en el funcionamiento de la democracia, explica Mario Ramos Reyes, profesor, investigador y filósofo.
“Esto es fundamentalmente impropio en una democracia, es cierto que es difícil llegar a un acuerdo, persuadir, pero precisamente eso hace que una democracia sea tal y esta es frágil si cada generación tiene que ganarse ese tipo de consenso y eso está ocurriendo”, señaló.
El camino a la madurez de una democracia lleva tiempo y es en ese recorrido que se debe dar una educación cívica a aquellos que van a representar al pueblo y también al ciudadano mismo. “Es saber darse cuenta que la democracia no es solo una estructura política sino es que el ciudadano se gobierne a sí mismo, sea responsable de sus tareas porque todos somos actores de la democracia en el lugar que ocupemos a nivel privado, en el trabajo, en la familia, donde se da la muestra de ciudadanía y eso conlleva a que tenga una educación cívica más allá de que sea una persona culta o no culta o que conozca o no de ciencia”, indicó.
Son detalles diarios como pagar impuestos, ceder el paso al peatón siendo conductor y es poco a poco que se va formando la conciencia comunitaria.
“Si cada uno solo persigue sus intereses y es indiferente al de los demás eso se va multiplicando y hace que el tejido de la democracia y comunitario se tense y fraccione, se forman tribus, grupos que se protegen entre sí y buscan solo sus intereses. Eso no es saludable y llega un punto en que la gente se frustra”, alertó.
Ramos explica que al llegar a ese punto es que se utiliza el atajo, lo fácil y es cuando se invoca a la dictadura como una época en la que se vivía mejor, y suponer que ese modelo es mejor que otro es “irracional”, aseguró el profesor y agregó que el supuesto gran desarrollo de la época es solo una afirmación de sus pregoneros.
“No es cierto que en dictadura se vivía mejor, yo viví 30 años de dictadura en la que no había libertad, la gente desaparecía, solamente participaban de los bienes materiales aquellos que estaban con el régimen, había torturados, la prensa amordazada, se perseguía, no había fuente de trabajo para los periodistas y se vivía en un permanente estado de sitio”, destacó.
Explicó que en democracia cada individuo es actor importante y lograr lo que se quiere también es tarea de cada uno, no solo del Estado que sí debe crear las condiciones para que el país se desarrolle y el presidente lo que debe lograr es ejercer un liderazgo.
“El presidente no es el papá que nos tenga que decir qué hacer, él tiene que dar los espacios para que poco a poco lo desarrollemos como comunidad y es cuando eso falla que viene la frustración y en la dictadura eso se ejercía a la fuerza”, indicó.
Destacó que lo más valioso de un régimen político es la libertad y ejercerla cuesta. “Somos muchos y nuestras decisiones y elecciones entran en conflicto necesariamente porque somos libres y es difícil ponerse de acuerdo y es por eso que hay que saber dialogar. Una de las características del inicio de la democracia en el Occidente fue la palabra, y la palabra es lo contrario a la fuerza y si vamos a utilizar la fuerza es la dictadura y ese modelo es completamente contrario a la persona y lo que queremos es ser libres y es el desafío que tenemos”, apuntó.
¿Qué hacer como ciudadano?
La opción que cada persona tiene dentro del sistema democrático es ejercer la ciudadanía desde donde se encuentra. Ramos invitó a descubrir la vocación y saber para lo que cada uno es llamado. “Sea periodista, parlamentario, empresario o futbolista, ejercer la ciudadanía pidiendo a las autoridades que cumplan lo prometido, si son electas hacerlas responsables de lo prometido. En una democracia el pueblo es el gobierno, cada uno de nosotros y los representantes tienen que rendir cuenta, los que ocupan actividades públicas tienen responsabilidades y deberes y nosotros debemos ser contralores”, agregó.
En democracia la tela común del gobierno se forma de derechos y deberes, nunca será perfecta, habrá desajustes porque no existe el régimen democrático perfecto, existen crisis, altercados pero pueden existir mejores formas de convivencia con el respeto de la ley.
Citó al Papa Francisco que hace una distinción entre corruptos y pecadores al decir que en un sistema, en este caso democrático lo que no se debe permitir es que existan corruptos, esos que violan la ley, se enriquecen a costa de y compran lealtades.
“Pecadores e imperfectos somos todos y en esa imperfección viene el respeto que nos debemos, se quiere exigir la perfección al otro sin mirarse uno mismo y la democracia parte de un supuesto que somos limitados y a través de un acuerdo llegamos a un gobierno que es el menos malo”, señaló.
Elecciones sin opciones
Ramos indica que en algunos casos se elige mal, se puede equivocar la elección pero como se está en democracia el tiempo del periodo ejercido por el electo es limitado entonces viendo su trayectoria se lo vuelve a elegir o no.
“Qué hizo durante ese tiempo y de acuerdo a eso ya no lo elijo la próxima vez, no es una elección de por vida y uno tiene que comprometerse, ver la manera de crea un movimiento, un grupo de opinión para que los más capacitados sean los elegidos siempre teniendo en cuenta la posibilidad de errar”, aclaró.
La queda virtual sin acción
Ramos recordó al sociólogo Zygmunt Bauman quien destacó que nuestra época es fluida y fragmentada donde las cosas no son muy permanentes, la gente cambia constantemente y que debemos evitar ser vagabundos, sin metas, todo el tiempo probando.
“Bauman decía que no somos ni vagabundo ni peregrinos sino turistas y qué hace un turista? llega a una ciudad, mira los escaparates, compra, va a restaurantes y nunca se compromete con esa ciudad porque no es la suya, siempre busca lo lindo, se queja de los precios o de lo que no se produce allí y las redes muestran a veces que somos turistas, nos quejamos, protestamos pero nadie toma la iniciativa. Tenemos una mentalidad de turistas y no de ciudadanos comprometidos y eso es algo que no enriquece a la democracia”, puntualizó.
La dignidad humana como eje de unión
Las divisiones, las creencias divergentes es la característica de una sociedad plural, con convicciones diferentes, generaciones con creencias y en democracia ambos deben aprender a convivir en un grupo y el punto es cómo ponerse de acuerdo.
“Lo importante es que la propuesta de los grupos sea una razonable con cierta lógica, puedo ponerme de acuerdo o ajustarme en forma general que incluya a todos, no es fácil porque nuestras libertades eligen cosas diferentes y la alternativa a la solución al conflicto del pluralismo es la tiranía, el tirano impide que haya facciones que son parte de la libertad. La meta es vivir juntos con aquel que no piensa como yo”, reflexionó.
Sobre discriminar al otro indicó que se debe analizar en qué aspectos y que siempre se debe defender la libertad de la persona con un eje que una a todos que puede ser la dignidad humana.
“Siempre hay algo que nos une que es la común humanidad, cómo nos tratamos le trato bien porque piensa como yo o lo hago porque es persona, ese es el desafío, puede quererla aún cuando sea totalmente diferente en sus creencias, el punto de la democracia no es solo la tolerancia y el respeto sino el amor al otro”.
La aspiración debe ser, según Ramos, llegar al bien común y a esto se puede llegar cuando cada individuo es feliz con lo que hace y construye desde donde se encuentra.
Aumentan enfermedades sexuales en jóvenes y hay abuso de la pastillita azul
El uso indiscriminado de la popular “pastillita azul” entre hombres menores de 40 años genera alarma entre especialistas. A esto se suma un preocupante aumento de enfermedades de transmisión sexual (ETS), revelando una falta de educación sexual en la juventud.
El Dr. Gustavo Codas advirtió sobre el creciente consumo injustificado de viagra entre jóvenes sanos. Según explicó, muchos recurren a este medicamento sin prescripción médica, “por si acaso” o simplemente por sugerencia de amigos, creyendo erróneamente que mejorará su desempeño sexual.
“Lo toman para asegurar, porque un amigo le dijo. En los jóvenes, el riesgo principal es la dependencia psicológica”, alertó Codas en entrevista con radio Ñanduti. El experto en urología subrayó que esta práctica puede tener consecuencias a largo plazo en la autoestima y la salud mental.
El especialista señaló que detrás de este fenómeno se esconde un preocupante desconocimiento sobre la sexualidad, influenciado por estereotipos y estándares irreales promovidos por la pornografía. “Piensan que lo que ven en la pantalla es real, y cuando no ocurre lo mismo en la vida real, aparece la frustración”, explicó.
Además del abuso de viagra, Codas alertó sobre un notable incremento de enfermedades de transmisión sexual en los últimos años, especialmente tras la pandemia. “Hay una promiscuidad elevadísima, la gente está viviendo más intensamente, pero sin protección ni información adecuada”, afirmó.
Entre los jóvenes, las consultas más frecuentes están relacionadas con ETS, infecciones por hongos y cuadros derivados de prácticas sexuales riesgosas. Según Codas, muchos desconocen incluso conceptos básicos, como el uso correcto del preservativo.
También desmintió mitos comunes sobre la sexualidad masculina, como la idea de que los hombres necesitan tener relaciones frecuentes para “demostrar” su hombría o prevenir enfermedades. “La abstinencia no tiene ningún efecto negativo, y eyacular 21 veces al mes para evitar cáncer de próstata no tiene base científica firme”, aseguró.
Para una vida sexual saludable, Codas recomendó un enfoque integral: mantener un peso adecuado, practicar ejercicio con regularidad, dormir bien y llevar una alimentación rica en frutas y verduras.
Memoria viva de Tañarandy: el homenaje póstumo a Koki Ruiz
Sin dudas que Tañarandy este año tuvo una celebración diferente, pero no menos emotiva. El primer año sin su maestro, el artista plástico Koki Ruiz, quien dejó un legado imborrable.
En un emotivo gesto de memoria y gratitud, ayer se llevó a cabo una exposición fotográfica al lado del templo local, donde Almudena Ruiz, hija del maestro Koki Ruiz, compartió imágenes históricas que reviven los inicios de la religiosidad popular en Tañarandy.
De acuerdo al informe de la Senatur, esta muestra, pensada especialmente para que niños y jóvenes conozcan y valoren el inmenso legado de Koki, conectando con las raíces de una celebración que hoy emociona al país entero.
“Porque el arte trasciende, y cuando nace del alma… se convierte en historia viva”, resaltó la Secretaría Nacional de Turismo.
Viernes Santo: cientos de personas participan de Vía Crucis Vivientes en Trinidad y Atyrá
Las localidades de Trinidad en Itapúa y Atyrá en Cordillera, se llenaron de fe, entrega y emoción con la representación del Vía Crucis Viviente.
Más de 300 personas entre fieles, visitantes y miembros de la comunidad participaron de este recorrido espiritual a través de las 14 estaciones, dentro del majestuoso entorno de las Misiones Jesuíticas, en la localidad de Trinidad, departamento de Itapáu.
La jornada fue llevado a cabo por un grupo de 60 jóvenes misioneros de la Cuasi Parroquia de la Santísima Trinidad, con el acompañamiento del Párroco Roberto Ríos.
“Gracias a todos los que hicieron posible esta representación que une generaciones, revive la fe y enaltece nuestras tradiciones”, expresó la Senatur.
Asimismo, otro emocionante realismo con el Vía Crucis de Kurusú Cerro, se realizó en la ciudad de Atyrá. Se trata de una de las expresiones de fe más impactantes, que congregó a miles de personas durante el Viernes Santo.
Cientos de personas participan Vía Crucis Vivientes en Trinidad y Atyrá.
Más de 250 actores, entre jóvenes, niños y adultos, dieron vida a esta obra teatral de meditación y contemplación, desarrollada en un entorno natural.
Cabe mencionar que, Kurusú Cerro, un sitio tradicional de peregrinación y espiritualidad, tiene sus raíces en la antigua devoción al “Kurusu Legua”, nombre con el que los primeros pobladores identificaban a la verde colina situada a orillas del arroyo Zanja Jhũ.
En la época colonial, esta zona fue un punto de referencia para las comunidades indígenas guaraníes durante las reducciones franciscanas, cuando el territorio era conocido como “Atyha” (lugar de encuentro), origen del nombre actual de Atyrá.