Los diferentes tipos de personalidad ya fueron descriptas a inicios de 1900 y entre ellos el trastorno antisocial de la personalidad que primero lo llamaron psicópata luego sociópata y ahora trastorno de la personalidad antisocial que es una enfermedad mental, es una patología psiquiátrica donde las personas tienen dificultades para adaptarse a las normas sociales y convivencia en las que se encuentran.

“Estas personas por lo general no tienen remordimiento ni sentimiento de culpa, cuando violan la ley o cuando hacen un hecho antijurídico lo reconocen porque diferencian el bien del mal pero no les importa causar daño”, explicó el Doctor Julio Torales, jefe interino de Psiquiatría del Hospital de Clínicas, en contacto con Ñanduti.

“El trastorno de la personalidad antisocial se acompaña con la falta de remordimiento y no le importa las reglas sociales, morales o de costumbre con tal de recibir beneficios y esto ya se empieza a expresar desde la infancia por ello es importante que los cuidadores, educadores y el entorno del niño hablan de salud mental para una detección precoz y que reciba un tratamiento adecuado.

Por ejemplo si un niño es violento con los padres o no reconoce figuras de autoridad o no tenga remordimiento cuando hace daño a los hermanitos o compañeritos, esa es una característica típica, demuestra crueldad con los animales ya en la primera infancia.

Por ello, el profesional cree conveniente que en toda institución educativa sea pública o privada debería haber un acompañamiento de profesionales de la Psicología para la detección de estos trastornos a tiempo.

Torales recordó que un paciente suyo le ataba al gato al ventilador para ver como se golpeaba. “Nos tiene que hacer pensar que estamos ante un trastorno que puede evolucionar a un trastorno de la personalidad antisocial”, advirtió.

Si la persona no acepta sus errores y principalmente manifiesta esa falta de remordimiento diciendo por ejemplo: “Lo volvería a hacer”, que fue escuchado en el juicio contra Marabel, condenado por el quíntuple asesinato de la familia Rojas es una llamada de atención, afirmó Torales.

Este trastorno no tiene un causa único sino es un complejo continuo de elementos de biología susceptible y se expresa según la personalidad de cada uno. Aclaró que no en todos los criminales la causa es genética.

“Estamos hablando de personas que tienen el trastorno porque claramente los elementos nos hacen llegar a este diagnóstico”, puntualizó.

Si la persona planifica una acción violenta y no demuestra remordimiento, lo más probable es se trate de un trastorno de la personalidad antisocial. Afirmó que con un diagnóstico y un buen tratamiento se controlan esas cuestiones psicopáticas

Durante la reunión del Consejo de ministros realizada este lunes en el Palacio de Gobierno, el titular de Relaciones Exteriores, Rubén Ramírez dio los informes relacionados a su cartera en los últimos meses.

Se les está dando trámite de prioridad a las conversaciones relacionadas ala política energética nacional e internacional.

“En breve vamos a concluir algunos aspectos que, oportunamente, usted mismo los va a anunciar, señor presidente, en lo que se refiere a Itaipú binacional y Yacyretá y a los programas de inversiones extranjera”, comentó Ramírez, durante su intervención.

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Desde abril se sostiene que el Gobierno anunciará la tarifa 2024 de Itaipú, sin embargo, las semanas siguen transcurriendo y hasta el momento, la entidad continúa sin tarifa.

No obstante, se conocen algunos detalles. La tarifa acordada regirá por dos años, periodo en el que se pretende tener las condiciones óptimas para negociar el Anexo C. También se conversa sobre el plan operativo de la binacional.

El Anexo C del Tratado de Itaipú establece las bases financieras del funcionamiento de la entidad. El 13 de agosto del 2023 se cumplieron 50 años de la firma y con esto, el plazo para el inicio de la revisión de ese aspecto.

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La fiscal Cinthia Leiva Cardozo acusó a Fabio Martín Bravo González, quien en su calidad de vicedirector de operaciones del Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Ciudad del Este, habría acosado sistemáticamente a dos subalternas. El requerimiento conclusivo, por acoso sexual y coacción, fue presentado en el Juzgado de Garantías Nº 4, a cargo de la magistrada Alba Meza.

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Según la investigación, los acosos ocurrieron de manera sistemática entre los años 2012 y 2020 en el interior del Cuerpo de Bomberos Voluntarios de la capital del Alto Paraná. El imputado supuestamente acosaba y exigía a las víctimas mantener relaciones sexuales con él a cambio de seguir en la institución y obtener varios beneficios (dinero, regalos y teléfonos celulares) si accedían a sus pretensiones.

Ante la negativa, el acusado manoseaba a la fuerza a las jóvenes, a quienes además sometía a maltratos verbales y las obligaba a realizar ejercicios físicos como castigo. Igualmente, utilizaba un lenguaje soez para referirse a ellas, señalando incluso las posiciones sexuales a las que querría someterlas.

Las víctimas incluso se vieron obligadas a renunciar quedando con secuelas psicológicas debido a los constantes hostigamientos, según el dictamen de una profesional del Centro de Atención a Víctimas.

Las afectadas decidieron denunciar el caso inicialmente ante los directivos del Cuerpo de Bomberos y luego oficializaron la acción ante el Ministerio Público, que inició la investigación contra el presunto responsable.

Finalmente, la fiscal Cinthia Leiva acusó a Bravo González y solicitó la elevación de la causa para ser debatida en juicio oral.

Amambay, y específicamente su capital Pedro Juan Caballero, se han caracterizado por la fuerte presencia de capos mafiosos que operan en la zona.

Similar a lo que sucede con grupos terroristas, a cada capo abatido o preso, automáticamente se activa la sucesión, y asume un nuevo hombre fuerte que toma o disputa la hegemonía territorial.

“Una característica de los jefes criminales de la zona es que la mayoría de ellos no sobreviven más allá de los 55 años, porque son asesinados o atrapados. Por eso es llamativo el caso de Gringo González (64 años) que sobrevivió mucho tiempo”, señala a la emisora 800 AM el periodista Aníbal Gómez, de largo historial profesional en medios de Asunción y de la capital amambaiense.

El mismo refiere que la rutina de los que manejan negocios narco de la zona, no es de lo más cómodo, ya que la disputa contra bandas contrincantes, por un lado, y la policía, por el otro, convertía sus rutinas en constante peligro.

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“Son personas que no pueden pegarse el lujo que tenemos nosotros, personas comunes, como sentarse en a disfrutar en un restaurant y otro lugar público, porque viven con el temor de ser asesinados en cualquier parte”, acota Gómez.

Subrayo que los poderosos jefes de la mafia fronteriza, viven en “cápsulas” (refugios) que deben tener para no estar siempre afincados en un solo lugar, ya que están con el temor y posibilidad permanente de sufrir ataques o tradiciones que son aprovechados por el enemigo.