La OPS invita a otros países a donar vacunas como anunciaron España y EEUU

La Organización Panamericana de la Salud (OPS) invitó este miércoles a otros países a que "hagan compromisos similares" a los de España y Estados Unidos, cuyos Gobiernos anunciaron que donarán vacunas contra el covid-19 a otras naciones.

Durante su rueda de prensa semanal, la directora de la OPS, Carissa Etienne, consideró que estos países han dado “pasos muy importantes en la dirección correcta” y confió que esa tendencia “será seguida” por otras naciones.

Etienne se refirió al anuncio hecho por el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, de que España donará a América Latina y el Caribe entre un 5 y un 10 % de las vacunas que reciban en 2021, lo que equivale a unos 7,5 millones de dosis.

Estados Unidos, por su parte, ha anunciado la donación en los próximos meses de 60 millones de dosis de la vacuna de Astrazeneca, que este país no está utilizando porque no ha sido aprobada por sus autoridades sanitarias.

“El anuncio de España es una demostración de solidaridad y una contribución al bienestar de nuestra región”, sentenció Etienne, que también felicitó al Gobierno de EE.UU. por su anuncio.

“Instamos a otros países -agregó la funcionaria- a que hagan compromisos similares. No deberían existir vacunas en almacenaje cuando podrían ser utilizadas rápidamente para salvar vidas”.

La representante de la OPS indicó que España ha expresado su intención de canalizar su donación a través del programa Covax -impulsado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Alianza para las Vacunas (GAVI)-, que busca garantizar el acceso global y equitativo a los fármacos anticovid.

Aclaró que no se han identificado específicamente los países receptores de estas dosis y anticipó que la OPS probablemente se encargará de supervisar esas entregas.

Etienne confirmó que durante la semana pasada unas 1,4 millones de personas contrajeron el virus y más de 36.000 murieron en la región por complicaciones relacionadas la covid-19, lo que, aseguró, supone que “una de cada cuatro muertes” ocurridas en el mundo por esa causa tuvo lugar en el continente americano.

También informó que hasta la fecha se han administrado 317 millones de dosis de la vacuna contra el covid-19 en la región.

Sin embargo, alertó que desde principios de 2021 varios países de la región están notificando un aumento de los contagios entre la población más joven -vinculada a una mayor exposición y a la falta de vacunación-, cuya estancia en los hospitales es más prolongada que la de las personas mayores de 60 años.

Hombre dispara y decapita a un excompañero de trabajo por celos en Brasil

El crimen ocurrió este martes en un hospital ubicado en el centro de la ciudad brasileña de Fortaleza.

Un hombre identificado como Francisco Aurélio Rodrigues de Lima disparó cuatro veces y decapitó este martes a su excompañero de trabajo Francisco Mizael Souza da Silva, cuidador del hospital Instituto Dr. José Frota, ubicado en el centro de la ciudad de Fortelaza, en el estado de Ceará (Brasil), informan medios locales.

De acuerdo con el informe policial, Rodrigues de Lima entró en el hospital usando el sistema de reconocimiento facial y llevó a cabo el crimen con un arma de fuego —resultando herido de bala también otro empleado—, tras lo cual decapitó a Souza da Silva y se dio a la fuga. Al cabo de unas horas, fue detenido en la localidad de Aquiraz.

El secretario estatal de Seguridad Pública, Samuel Elanio, explicó que el motivo del crimen habría sido los celos del sospechoso hacia su pareja, quien trabajaba con la víctima mortal. El fallecido tenía una hija de seis años y su esposa estaba embarazada.

Asimismo, detalló que el autor de los hechos, que cuenta con antecedentes por desacato y una orden de protección en su contra, “ya había anunciado varias veces que iba a hacer algo así”. El atacante guarda prisión preventiva desde este miércoles.

EEUU anuncia límites de emisión de CO2 para las centrales de carbón

El gobierno de Joe Biden anunció el jueves que impondrá a partir de 2032 límites muy estrictos a las emisiones de CO2 de las centrales de carbón que prevean seguir funcionando durante mucho tiempo, una medida destinada a ayudar a Estados Unidos a cumplir sus compromisos climáticos.

La nueva normativa, que también se aplica a las centrales de gas que se construyan en el futuro, está respaldada en tecnologías de captación de carbono, todavía poco utilizadas, pero por las que la administración de Biden apuesta fuertemente.

Son anuncios “enormes” que “nos hacen avanzar en nuestra lucha contra la crisis climática”, afirmó Ali Zaidi, asesor climático del presidente demócrata que se presenta a la reelección.

“El sector energético tiene hoy más herramientas que nunca para reducir su contaminación”, añadió.

La generación de electricidad representa alrededor de una cuarta parte de las emisiones de gases de efecto invernadero del país, lo que lo convierte en el segundo sector emisor después del transporte.

Según las nuevas normas, las centrales de carbón que tengan previsto seguir funcionando después de 2039 tendrán que captar el 90% de sus emisiones de CO2 a partir de 2032.

Las nuevas centrales de gas más grandes también tendrán que equiparse para capturar el 90% de su CO2 de aquí a 2032.

La Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA por sus siglas en inglés) propuso hace un año la normativa que se aprobó con algunos cambios tras una consulta pública obligatoria.

La normativa final ya no incluye las centrales de gas existentes, que ahora estarán sujetas a una norma separada. Y la fecha en la que las centrales de carbón tendrán que capturar su CO2 se ha retrasado de 2030 a 2032.

- “Histórico” -

Hasta ahora, no existía ninguna norma federal que limitara las emisiones de las centrales de carbón existentes. Según la EPA, estas centrales representan la mayor fuente de emisiones del sector energético.

La normativa debería evitar la emisión de casi 1.400 millones de toneladas de CO2 de aquí a 2047, lo que equivale a las emisiones anuales de 328 millones de vehículos, argumentó la EPA.

Se trata de “una de las herramientas más eficaces jamás desarrolladas para reducir las emisiones nocivas para el clima del sector energético”, reaccionó la organización Sierra Club.

“Es histórico”, declaró a la AFP Margie Alt, directora de la Campaña de Acción por el Clima, una coalición de una decena de organizaciones ecologistas.

La administración de Biden “habrá hecho más por el clima que ninguna otra”, aseguró.

No se impone a las empresas ninguna tecnología para alcanzar los objetivos de reducción de emisiones, pero la EPA sostiene que la mejor opción será la captación y almacenamiento de CO2, que permite retener este gas en lugar de liberarlo a la atmósfera.

Sin embargo, según la Agencia Internacional de la Energía, actualmente solamente existen en el mundo unas 40 instalaciones de captura de CO2 para procesos industriales o generación de electricidad.

La organización 350.org considera que estas tecnologías aún no han demostrado su eficacia y que, de hecho, lo que debería reducirse es el número de plantas de este tipo.

- Normativa “extrema” -

El congresista republicano de Texas Chip Roy afirmó por su parte que la EPA está “matando la generación fiable de electricidad”.

El grupo America’s Power, que representa a la industria del carbón, calificó la nueva norma de “extrema e ilegal”.

Podría ser impugnada en los tribunales, y el exmandatario Donald Trump ya ha anunciado su intención de revertirla si es elegido presidente en noviembre.

El jueves, la EPA también anunció otras tres normativas relativas a las centrales de carbón, destinadas a reducir sus emisiones de metales tóxicos (mercurio, níquel, etc) y la contaminación de sus vertidos al agua y las cenizas de carbón.

En la última década se han cerrado en Estados Unidos numerosas centrales de carbón. Al mismo tiempo, ha aumentado la producción de electricidad a partir de energía solar y eólica, así como de centrales de gas.

Sin embargo, en 2023, alrededor del 60% de la producción eléctrica de Estados Unidos procederá de centrales de gas (43%) o carbón (16%), según la Agencia de Información Energética estadounidense, seguidas de las renovables (21%) y la nuclear (18%).

Fuente: AFP

Joven es diagnosticada con ‘cerebro de amor’ por llamar a su novio más de 100 veces al día

Xiaoyu lanzó y destrozó objetos domésticos por toda su casa un día que su pareja no le contestó.

Una joven de 18 años, apodada Xiaoyu, de la provincia de Sichuan, ubicada al suroeste de China, se obsesionó tanto con su novio que afectó gravemente su salud mental hasta ser diagnosticada con ‘cerebro de amor’, recoge el diario South China Morning Post.

De acuerdo con la doctora Du Na, del Cuarto Hospital Popular de Chengdu, el comportamiento preocupante de Xiaoyu comenzó en su primer año de universidad, cuando entabló una relación íntima con su novio.

Rápidamente, Xiaoyu se volvió muy dependiente de su pareja y necesitaba estar a su lado todo el tiempo, exigiéndole saber su paradero constantemente y que le respondiera los mensajes al instante, independientemente de la hora, lo que hizo sentir a su novio incómodo y sofocado.

En un video que se hizo viral en las redes sociales, se podía observar a Xiaoyu enviar mensajes repetidamente a su novio para que encendiera su cámara y haciéndole llamadas que él ignoraba. En una ocasión, la joven llamó a su novio más de 100 veces, pero él no le contestó, por lo que Xiaoyu se enfadó tanto que empezó a lanzar y destrozar objetos domésticos por toda su casa.

El novio llamó a la Policía, que llegó al lugar justo cuando Xiaoyu amenazaba con tirarse por un balcón. La joven fue trasladada a un hospital, donde eventualmente fue diagnosticada con trastorno límite de la personalidad (TLP), conocido coloquialmente en china como ‘cerebro de amor’, que se caracteriza por la inestabilidad emocional, impulsividad y relaciones interpersonales caóticas.

Según Du, este trastorno puede coexistir con otras afecciones mentales como la ansiedad, la depresión y el trastorno bipolar. Aunque la doctora no reveló los causantes de la enfermedad de Xiaoyu, aseguró que suele presentarse en personas que no han tenido relaciones sanas con sus padres durante la infancia.