Desapareció en 1945 y creen que lo hallaron: el tren nazi cargado de oro

"Es aquí, la entrada del túnel estaba aquí y el tren está oculto", cuenta Andrzej Gaik, un guía turístico y antiguo buscador de tesoros mostrando una parte del terraplén que bordea la vía férrea.

En tan sólo unos días, la noticia de la imagen radar de un supuesto tren nazi blindado, oculto en un túnel secreto causó un revuelo en la ciudad de Walbrzych (Waldenburgo en la época alemana).

Los equipos de televisión polacos y extranjeros acuden al lugar conocido como “kilómetro 65” de la línea Wroclaw-Walbrzych.

Hace unos 15 años Gaik ya buscó el “tren de oro nazi” junto con otros aficionados siguiendo las indicaciones de un minero jubilado, Tadeusz Slowikowski. Cavaron el talud y encontraron hormigón y ladrillos pero tuvieron que abandonar la aventura por falta de medios financieros y técnicos.

Hoy en día el guía saborea las revelaciones de dos buscadores de tesoros, que utilizaron un georadar para sondear el suelo, y que son dignas de fe, según el conservador general de los monumentos polacos.

El guía está convencido de que su hipótesis se confirmará. “Hay una gran brecha en la roca oculta en el talud y está llena de piedras diferentes, traídas seguramente por los alemanes para que no se viera la entrada del túnel”, afirma. Se observa menos vegetación en unos 15 metros, como si el suelo fuera menos fértil.

Otro elemento significativo, según él, es el pequeño trozo de muro de contención levantado con piedras grandes, enterrado en el talud en ángulo agudo.

Confirma -dice- que un desvío secreto construido por los nazis permitía enviar convoyes que circulaban entre Wroclaw (Breslau) y Walbrzych hacia un túnel bajo tierra para llevarlos al inmenso complejo de subterráneos nazis llamado Riese (Gigante), escondido en una pequeña cadena montañosa, los Montes Sowie (las Montañas Búho).

Decenas de personas acudieron el viernes al lugar, supuestamente mantenido en secreto.

La mayoría de ellas bromeaban sobre los “lingotes de oro” pero una pareja con dos niños que afirma vivir cerca teme que esté minado y que una explosión pueda afectar a su casa.

El descubrimiento del tren, si se confirma, podría convertirse en un maná turístico, opinan en cambio en el cercano castillo de Ksiaz, otrora Fürstenstein.

“No dispongo de ninguna información concreta para decir que el tren existe, pero personas fidedignas me lo afirmaron y me gustaría mucho que se confirmase”, afirmó el presidente de la sociedad del castillo, Krzysztof Urbanski, encantado con esta publicidad indirecta.

CAMISETA “TREN” DE ORO

El inmenso castillo de 400 salas “ya se beneficia de un efecto al estilo del lago Ness: nadie ha visto al monstruo, pero esto no impide atraer a gente”, dijo Urbanski.

Como buen previsor, Urbanski se adelanta a los acontecimientos y la semana que viene los turistas podrán comprar camisetas “tren de oro”.

El castillo cuenta con una red de galerías subterráneas para Hitler y sus colaboradores que todavía guardan secretos.

“Hemos encontrado un documento que precisa el volumen de los materiales de construcción traídos aquí para las remodelaciones destinadas a la acogida del Führer. Pero, según los expertos, en las partes conocidas del castillo sólo hay la mitad”, asegura Urbanski.

En su garaje de Walbrzych, el minero jubilado Tadeusz Slowikowski muestra exultante su maqueta de los túneles secretos por los que circula un modelo en miniatura del convoy que busca desde hace 30 años.

“Estoy seguro al 100% que el tren existe, pero no se sabe lo que transportaba. Ahora hay que sacarlo de allí”, dice.

Pareja halla pozo secreto de 200 años de antigüedad debajo de su casa

“Simplemente me envió una foto y dijo: 'Dios mío, ¿has visto esto?'”, contó Victoria Ellington.

Una pareja británica ha encontrado un pozo secreto de 200 años de antigüedad con más de ocho metros de profundidad debajo de su casa, informó este viernes Daily Mail.

Después de comenzar trabajos de remodelación en su propiedad, que compraron durante la pandemia en el condado de North Yorkshire, Victoria Ellington, de 36 años, y su esposo Andrew, de 40, descubrieron el pozo que todavía contenía agua cristalina.

En lugar de rellenar el hoyo, los dueños decidieron aprovechar la estructura, la cubrieron con un cristal y la convirtieron en un ‘pozo de los deseos’. Para ello, hicieron una ranura en el vidrio e instalaron luces en las paredes del agujero.

“Planeábamos ampliar la casa y construir una vivienda familiar, pero los cimientos empezaron a hundirse y supimos que algo pasaba”, contó Victoria.

“[Andrew] simplemente me envió una foto y dijo: ‘Dios mío, ¿has visto esto?’”, continuó la mujer, añadiendo que “se puede ver hasta el fondo” y tras varios intentos de medirlo, calculan que el agujero tiene unos ocho metros de profundidad.

Al terminar las reformas de la vivienda este mes, Victoria asegura que “el pozo la hace un poco diferente”. “Cuando lo vi quedé totalmente impresionada y cada vez que lo veo me encanta”, añadió.

Hombre dispara y decapita a un excompañero de trabajo por celos en Brasil

El crimen ocurrió este martes en un hospital ubicado en el centro de la ciudad brasileña de Fortaleza.

Un hombre identificado como Francisco Aurélio Rodrigues de Lima disparó cuatro veces y decapitó este martes a su excompañero de trabajo Francisco Mizael Souza da Silva, cuidador del hospital Instituto Dr. José Frota, ubicado en el centro de la ciudad de Fortelaza, en el estado de Ceará (Brasil), informan medios locales.

De acuerdo con el informe policial, Rodrigues de Lima entró en el hospital usando el sistema de reconocimiento facial y llevó a cabo el crimen con un arma de fuego —resultando herido de bala también otro empleado—, tras lo cual decapitó a Souza da Silva y se dio a la fuga. Al cabo de unas horas, fue detenido en la localidad de Aquiraz.

El secretario estatal de Seguridad Pública, Samuel Elanio, explicó que el motivo del crimen habría sido los celos del sospechoso hacia su pareja, quien trabajaba con la víctima mortal. El fallecido tenía una hija de seis años y su esposa estaba embarazada.

Asimismo, detalló que el autor de los hechos, que cuenta con antecedentes por desacato y una orden de protección en su contra, “ya había anunciado varias veces que iba a hacer algo así”. El atacante guarda prisión preventiva desde este miércoles.

EEUU anuncia límites de emisión de CO2 para las centrales de carbón

El gobierno de Joe Biden anunció el jueves que impondrá a partir de 2032 límites muy estrictos a las emisiones de CO2 de las centrales de carbón que prevean seguir funcionando durante mucho tiempo, una medida destinada a ayudar a Estados Unidos a cumplir sus compromisos climáticos.

La nueva normativa, que también se aplica a las centrales de gas que se construyan en el futuro, está respaldada en tecnologías de captación de carbono, todavía poco utilizadas, pero por las que la administración de Biden apuesta fuertemente.

Son anuncios “enormes” que “nos hacen avanzar en nuestra lucha contra la crisis climática”, afirmó Ali Zaidi, asesor climático del presidente demócrata que se presenta a la reelección.

“El sector energético tiene hoy más herramientas que nunca para reducir su contaminación”, añadió.

La generación de electricidad representa alrededor de una cuarta parte de las emisiones de gases de efecto invernadero del país, lo que lo convierte en el segundo sector emisor después del transporte.

Según las nuevas normas, las centrales de carbón que tengan previsto seguir funcionando después de 2039 tendrán que captar el 90% de sus emisiones de CO2 a partir de 2032.

Las nuevas centrales de gas más grandes también tendrán que equiparse para capturar el 90% de su CO2 de aquí a 2032.

La Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA por sus siglas en inglés) propuso hace un año la normativa que se aprobó con algunos cambios tras una consulta pública obligatoria.

La normativa final ya no incluye las centrales de gas existentes, que ahora estarán sujetas a una norma separada. Y la fecha en la que las centrales de carbón tendrán que capturar su CO2 se ha retrasado de 2030 a 2032.

- “Histórico” -

Hasta ahora, no existía ninguna norma federal que limitara las emisiones de las centrales de carbón existentes. Según la EPA, estas centrales representan la mayor fuente de emisiones del sector energético.

La normativa debería evitar la emisión de casi 1.400 millones de toneladas de CO2 de aquí a 2047, lo que equivale a las emisiones anuales de 328 millones de vehículos, argumentó la EPA.

Se trata de “una de las herramientas más eficaces jamás desarrolladas para reducir las emisiones nocivas para el clima del sector energético”, reaccionó la organización Sierra Club.

“Es histórico”, declaró a la AFP Margie Alt, directora de la Campaña de Acción por el Clima, una coalición de una decena de organizaciones ecologistas.

La administración de Biden “habrá hecho más por el clima que ninguna otra”, aseguró.

No se impone a las empresas ninguna tecnología para alcanzar los objetivos de reducción de emisiones, pero la EPA sostiene que la mejor opción será la captación y almacenamiento de CO2, que permite retener este gas en lugar de liberarlo a la atmósfera.

Sin embargo, según la Agencia Internacional de la Energía, actualmente solamente existen en el mundo unas 40 instalaciones de captura de CO2 para procesos industriales o generación de electricidad.

La organización 350.org considera que estas tecnologías aún no han demostrado su eficacia y que, de hecho, lo que debería reducirse es el número de plantas de este tipo.

- Normativa “extrema” -

El congresista republicano de Texas Chip Roy afirmó por su parte que la EPA está “matando la generación fiable de electricidad”.

El grupo America’s Power, que representa a la industria del carbón, calificó la nueva norma de “extrema e ilegal”.

Podría ser impugnada en los tribunales, y el exmandatario Donald Trump ya ha anunciado su intención de revertirla si es elegido presidente en noviembre.

El jueves, la EPA también anunció otras tres normativas relativas a las centrales de carbón, destinadas a reducir sus emisiones de metales tóxicos (mercurio, níquel, etc) y la contaminación de sus vertidos al agua y las cenizas de carbón.

En la última década se han cerrado en Estados Unidos numerosas centrales de carbón. Al mismo tiempo, ha aumentado la producción de electricidad a partir de energía solar y eólica, así como de centrales de gas.

Sin embargo, en 2023, alrededor del 60% de la producción eléctrica de Estados Unidos procederá de centrales de gas (43%) o carbón (16%), según la Agencia de Información Energética estadounidense, seguidas de las renovables (21%) y la nuclear (18%).

Fuente: AFP