Rosa Palau, directora del “Archivo del Terror”, ubicado en el Museo de la Memoria de Asunción, declaró hoy durante tres horas ante el Tribunal Oral Federal número 1 de Buenos Aires, que juzga al exdictador argentino Reynaldo Bignone, entre otros 21 imputados, informó a Efe el fiscal general Pablo Ouviña.

Palau fue llamada a declarar por su relación con este archivo, que contiene documentos policiales sobre la larga dictadura de Alfredo Stroessner (1954-1989) que, según Palau, dejó al menos 120.000 desaparecidos en un país que, entonces, tenía una población de 3,5 millones de personas.

“Pedí que el tribunal requiriera la totalidad del Archivo del Terror para nuestra investigación y el tribunal se constituyera en Paraguay a los efectos de diligenciar la remisión y la entrega de los documentos”, especificó Ouviña.

El fiscal argentino destacó la importancia del juicio para las víctimas paraguayas debido a que en el país vecino “no existe ninguna investigación global ni de todos los crímenes cometidos en la época stronista ni específicamente de la participación de Paraguay en la operación Cóndor”.

En el juicio, que comenzó en marzo de 2013, han declarado hasta el momento 188 testigos, en relación con víctimas argentinas, uruguayas y chilenas, y se prevé que cerca de un centenar ofrezcan su testimonio por los crímenes cometidos contra ciudadanos paraguayos.

Además de Bignone, el tribunal también juzga al exgeneral Luciano Benjamín Menéndez, que acumula siete condenas por cadena perpetua, y los exoficiales Eduardo Samuel de Lío, Santiago Riveros, Ramón Díaz Bessone, Miguel Ángel Furci y Antonio Vañek.

Están acusados de asociación ilícita con las distintas dictaduras suramericanas para detener y hacer desaparecer a opositores políticos.

El único extranjero entre los 25 imputados es el militar uruguayo Manuel Cordero, que fue extraditado desde Brasil y está acusado de privación ilegítima de libertad.

El “Plan Cóndor” u “Operación Cóndor” fue implementado por las dictaduras de Chile, Argentina, Brasil, Uruguay, Bolivia, Perú, Ecuador y Paraguay a partir de mitad de la década de los 70 para compartir información, perseguir, asesinar, desaparecer o deportar a disidentes fuera de sus países.

Las primeras pruebas concretas de la “Operación Cóndor” aparecieron en 1992, cuando se descubrieron informes secretos en dependencias del gobierno paraguayo.

En los conocidos como “Archivos del terror” constaba la autorización a miembros de las fuerzas armadas y a paramilitares a cruzar sus fronteras nacionales para secuestrar, torturar o asesinar a sus conciudadanos refugiados en los países vecinos.

El reporte de la corresponsal en Itapúa, Rocío Gómez, indica que además de los nuevos agentes del Grupo Lince, hay 10 motocicletas en total y otras que están en camino.

De los 10 nuevos agentes linces en Itapúa, algunos son recién egresados, mientras otros son ya de trayectoria.

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Asimismo, llegaron 2 caballos para reforzar la agrupación montada.

Cabe mencionar que el helicóptero ángel 01 aún se mantiene patrullando en Itapúa en la frontera con Alto Paraná donde se concentraron importantes hechos vandálicos de supuestos grupos tipo comando.

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También continúa el refuerzo en las comisarías del nordeste de Itapúa, fusileros en las entidades bancarias de todo el departamento, mientras que el jefe de seguridad ciudadana se mantiene trabajando en esa zona casi toda la semana y ya no tanto en Encarnación como anteriores comisarios que ocuparon este cargo.

Esta renovación marca un cambio de mentalidad, alejándose de la dependencia de donaciones y aprovechando los fondos otorgados por el Estado para realizar compras cruciales.

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Anteriormente, el CVBP dependía de donaciones de otros países, recibiendo mangueras de combate contra con su vida útil cercana al fin, es decir la donación era la única alternativa conocida en el país.

Igualmente, las donaciones no faltan en la institución que esta semana recibió ocho móviles provenientes de España, una donación que fue posible gracias a las gestiones del Directorio Nacional en encuentros protocolares con autoridades de diferentes países.

Según informaron desde el CBVP, este año están previstos más encuentros internacionales que buscan generar beneficios tangibles para la ciudadanía.

La modernización de estos equipos es un paso significativo en la mejora de la capacidad de respuesta de los bomberos voluntarios ante las emergencias, garantizando así una mayor seguridad y eficiencia en sus operaciones.

Con esta inversión, el CVBP refuerza su compromiso de salvaguardar la vida y el patrimonio de la ciudadanía paraguaya, enfrentando con mejores recursos los desafíos que presentan los incendios en el país.

El Dr. Javier Moreno, especialista en radiología intervencionista de la Facultad de Ciencias Médicas - Hospital de Clínicas, es un método que aún no se hizo en el Hospital de Clínicas y requirió la participación de especialistas en gastroenterología, hepatología y endoscopia digestiva, de radiólogos intervencionista, de anestesiólogos, de clínica médica y terapistas.

La intervención se desarrolló en la sala de Hemodinamia, dependiente de la División de Medicina Cardiovascular de Adultos y el equipo quirúrgico fue conformado por el Dr. Javier Moreno, con la guía ecográfica del Dr. Miguel Calvo y la anestesia a cargo del Dr. Juan Meza.

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Explicó que TIPS se realiza en pacientes cirróticos terminales con múltiples episodios de sangrado que no tienen una solución endoscópica para sus sangrados. El paciente sometido a la técnica tiene 72 años con diagnóstico de hemorragia digestiva debido a una enfermedad hepática antigua. El padecimiento le causaba aumento de presión en las venas del abdomen, entonces al aumentar la presión se terminan rompiendo las venas más frágiles que suelen ser las del esófago o las del estómago.

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Por su parte, el Prof. Dr. Marcos Girala, jefe de la Unidad de Hepatología del Dpto. de Gastroenterología y Endoscopia Digestiva, indicó que este procedimiento se utiliza hace mucho tiempo en el primer mundo y por los altos costos de los insumos era difícil realizar en nuestro medio. “Gracias a la habilidad adquirida en el extranjero por el Dr. Javier Moreno, radiólogo intervencionista de la FCMUNA y la donación de instrumentales, de catéteres y otros elementos se pudo llevar adelante la técnica”.

Explicó que este procedimiento tiene la ventaja de rescatar a los pacientes que con hemorragia digestiva por enfermedades hepáticas y que no responden al tratamiento con endoscopía, que es el caso de este señor, que, a pesar de haber sido sometido a múltiples tratamientos endoscópicos, no se conseguía que se detenga el sangrado. Entonces, este es un tratamiento más de fondo, más complejo, pero mucho más eficaz.